No merece que piense en ella... 32

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|Tres años después|

Christopher's POV.
Aquel que en el pasado me dijera que mi vida durante tres años transcurría feliz a lado de una sola mujer, definitivamente no podría creerle, quizá me hubiera reído, jamás imaginé que el compromiso con una sola persona me haría sentir completamente satisfecho, seguro de todo y extremadamente feliz, y eso es lo único que puedo sentir a lado de mi novia, a lado de ___, porque vaya, claro que la relación no ha sido perfecta, ¿Pero qué cosa o persona en esta vida lo es? Cómo todo el mundo tenemos problemas, pero hemos sabido sobrellevar cada uno de la mejor manera, de una forma tal que estar juntos es lo más sano y hermoso que alguien podría desear, pero para su mala suerte ___ es mía, mi novia, mi complemento perfecto, eso no podría ser de otro modo.

- Chris, ___ me pidió que te dijera que su vuelo se canceló, no sé que pasó con la aerolínea así que se lo van a cambiar para dentro de tres días, la señal no era muy buena y por eso no te pudo marcar - Me dijo Erick.
- Carajo, llevamos casi tres meses sin vernos y me salen con ésto, jodida aerolínea - Mencioné en verdad enojado.

Es que en realidad hemos estado mucho tiempo separados y cuando por fin volveremos a vernos le aumentan el tiempo de espera.

- Ya hermano, puedo entender cuánto la extrañas, no quería decírtelo pero ahora que veo como estás tengo que hacerlo - Comentó.
- ¿Decirme qué? - Pregunté curioso.
- Pon atención, imagina que es real - Dijo aclarando su voz - Te amo Chris, ya me muero por llenarte de besos, te extraño mucho, cuento los segundos para vernos, te amo guapo - Dijo con una voz realmente graciosa fingiendo imitar a mi novia, no pude evitar reír por su tontería - Me pidió que te diera un beso de su parte pero claramente no voy a hacer eso -.
- No te preocupes, lo prefiero de los labios de mi novia - Aclaré.
- Pues que delicado, tú te lo pierdes - Mencionó fingiendo estar indignado, a lo que yo reí.

Sin duda Erick me ayudó a quitar mi mal humor y pensar en que tres días se pasan volando, ¿Qué podría pasar?

(...)

- ¿Erick te dió mi beso? - Me preguntó con una sonrisa tras la pantalla del celular.
- No amor, se lo regalo, mejor dámelo tú - Dije de la misma forma.
- Te prometo que será lo primero que haré cuando te vea -.
- De acuerdo, por cierto, ¿Ya arreglaron lo del vuelo? - Inquirí.
- Sí amor, pero Henry está buscando uno para mañana por lo menos -.
- Espero que lo encuentre, de verdad te extraño bonita - Me sincere.
- Yo a ti mi cielo, muchísimo, haremos lo posible - Aseguró.
- Cuéntame que tal estuvo todo, ¿Te divertiste? - Cuestione.
- Ni lo imaginas, me la pasé increíble - Comenzó a contarme.

|Al día siguiente|

Luego de una larga conversación con mi novia ambos nos quedamos dormidos, lo único que de verdad deseo ya, es poder dormir y despertar a su lado, ver sus bellos ojos, disfrutar la suavidad de su piel desnuda, sentir el sabor de sus labios, ___ está en cada poro de mi ser.
Estaba desayunando cuando de pronto el mensaje de un número desconocido entró a mi celular.
Con curiosidad abrí el mensaje y lo que mis ojos vieron definitivamente me hizo sentir furioso, lleno de rabia, la sangre me hervía, pero sin duda alguna mi corazón se estaba rompiendo, y en tantos pedazos que no sabía cómo armaría después, ¿___ quería hacerme pagar a como de lugar lo que alguna vez le hice? ¿Tres años fueron suficientes para ella? ¿Esa fue la forma en la que creyó necesario lastimarme hasta hacerme sentir lo que ella sintió? Pero mil veces peor, porque todo lo que vivimos pareció no haberle hecho sentir nada a ella, ¿En verdad conozco a la mujer que dice ser mi novia? Carajo, que imbécil soy.
Mis ojos ya habían dejado salir las lágrimas, de verdad me sentía terrible, esas fotos decían más que mil palabras, en esas fotos podía verse perfectamente que Adrien jamás dejó de formar parte de su corazón, y ahora puedo confirmar que es él a quien ama de verdad, en quien jamás dejó de pensar, y yo como idiota me enamore y me esforce por recuperarla, lo que no note fue que ella ya no estaba para mí, ya no sentía nada más que odio por mí, pero que bien fingió.
Di un golpe a la mesa y traté de marcar a su número pero me enviaba al buzón, ¿Ni siquiera me dará la cara? Lo del vuelo era una completa mentira, una estupidez para pasar más tiempo con él, todo este tiempo ha estado con él y yo como imbécil extrañandola.
Seguí insistiendo pero nada, llegó un punto en el que ya ni siquiera entraba mi llamada, ¿Esa es su forma de terminar con todo? ¿Solo evitandome? Maldita sea, lo peor es que me está doliendo como la mierda, tengo el corazón destrozado, y no tengo ni la más mínima idea de como es que voy a repararlo, no cuando esa mujer es la dueña de mi amor entero, de los sueños que tengo a su lado, o que tenía, porque ahora sé que no merece que piense en ella y la involucre en mi futuro cuando yo no estoy en el suyo.
Su cuerpo desnudo, en la cama con él, ¿Qué necesidad encontró de tener que enseñarmelas? De enviarme la prueba de que en su cama, en su mente y en su corazón solo está ese imbécil, ese idiota que lo tiene todo, ese jodido francés de mierda que me lo acaba de quitar todo, que acaba de ganar una guerra que creí ganada.
Tres años a la puta basura, tres años de mentiras y una sarta de falsedad, tres malditos años llenos de una felicidad fingida, estoy roto, herido, y sé que salir de esta no va a ser fácil, mucho menos cuando no puedo esperar ni siquiera una explicación, ella no va a darmela.

|¿Dónde está el amor?| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora