GOOD KILLERS ◇ KOOKMIN

Averiguaciones

— Inspector... estoy atento, no se preocupe —Yoongi se acomoda mejor en el asiento del auto, y esboza una ligera sonrisa tratando de imaginar el rostro del beta. Debe aceptar que últimamente no puede dejar de pensar en él de forma constante e intensa. Es una pequeña ilusión que nunca había tenido, un cosquilleo agradable al verlo y de verdad sueña con conseguir al menos una pequeña sonrisa por parte de Hoseok, o al menos un gesto menos tosco.

—Alfa... lo mejor será no cometer ningún error

—Claro que no. Seguro encontraré...— el alfa interrumpe su frase cuando mira las placas del mismo taxi que estuvo en las dos escenas del crimen. —¡Inspector! Lo tengo

—¿Qué?

—Síguelo... síguelo —repite una y otra vez el alfa a Don Kwan quien está sentado frente al volante. Él rápidamente obedece y enciende el coche.

—No lo pierdas de vista Yoongi

—No... claro que no mi querido Inspector —murmura el alfa con una leve sonrisa.

El taxi con las placas avanza a través de la carretera en el tráfico. Do Kwan y Yoongi lo siguen de cerca.

—¿Hasta dónde lo seguiremos? —pregunta el amigo cuando paran ante un semáforo

—Inspector... creo que debería actuar ya

—No claro que no alfa... espera una orden

—Es que se dará cuenta que lo estamos siguiendo

—¡Tienes que esperar al equipo!

—Lo siento... pero no se escapará —Yoongi cuelga el teléfono rápidamente dejando al inspector nervioso y enojado.

—Para... para en este momento —pide hacia Do Kwan, quien frena en el acto.

Yoongi baja del auto y camina con rapidez pasando el par de coches que lo separan del taxista. En cuanto se acerca abre la puerta asustando al conductor, quien da un pequeño grito asustado.

—¿¿Qué demonios haces?? —exclama el hombre al sentir como toscamente Yoongi lo toma de la camisa y lo saca del automóvil.

—Ya te tengo... —sonríe el alfa antes de soltar un puñetazo a su mandíbula. —¡Bastardo asesino!

Yoongi escucha el sonido del claxon de los autos de forma escandalosa y se fastidia al pensar que ellos no comprenden la importancia de capturar a este hombre. Sin embargo, los gritos desesperados desde el parque frente a él, roban toda su atención.

Personas corren desesperadas y el sonido de disparos tensa todo el ambiente.

Yoongi comprende enseguida que tiene al tipo equivocado.

Un poco atónito, suelta al taxista y se dirige en dirección contraria a donde huyen las víctimas, en dirección a quien dispara.

Observa a un aparente alfa sosteniendo un maletín que ruega por su vida

—Por favor... por-por favor no dispares... no dispares —repite una y otra vez mirando al hombre frente a él que sostiene una escopeta y parece temblar con ella mientras lo apunta

—¡Por qué?! ¡¿Por qué nos hiciste esto?! —repite el francotirador de forma desconsolada.

Yoongi se acerca sigilosamente, pero el hombre se da cuenta de su presencia rápidamente.

—¡Tú! ¡No te muevas! —exclama sin dejar de apuntar al asustado hombre.

—Tranquilo... tranquilo, baja el arma —pide Yoongi al observar como el asesino parece totalmente asustado y fuera de control, no como en realidad pensaban que era... despiadado y un profesional exacto.