V E I N T I O C H O

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¿Qué es lo que duele, cariño?


Maia

Después de una semana completa, nuestras vacaciones llegan a su fin y lo único que soy capaz de sentir es una profunda tristeza y una fuerte decepción. Sobre todo hacia mí misma. Es como si el interruptor que me mantenía en marcha se hubiera apagado para siempre y la persona que solía ser días atrás nunca hubiera existido en mi primer lugar.

Es como si me hubieran entumecido. Congelado. Y no puedo dejar de pensar en el hecho de que sólo tomo las decisiones equivocadas en mi vida.

Porque soy el tipo de chica que evidentemente sigue cometiendo error tras error sin aprender de lo que hizo mal.

Y no hay nada peor que sentir que todo lo que haces está mal y que por una vez en tu vida no puedes hacer nada bien. Que eres completamente inútil y que todo el mundo a tu alrededor estaría mejor sin ti.

No quiero seguir siendo la chica ingenua de la que todos se aprovechan y con la que juegan cruelmente porque no se quiere a sí misma lo suficiente como para darse cuenta cuándo alguien la está utilizando.

Pero, de algún modo, sigo siendo esa chica. Estoy atrapada en el cuerpo que sigo intentando no odiar. En mis propias inseguridades que no puedo borrar. En la vida en la que no quiero estar ni vivir. Estoy atrapada en mí misma.

Y saber que no hay absolutamente ningún lugar al que pueda escapar porque estoy intentando escapar de mí misma me sofoca.

No estoy mejor como creía. Ni siquiera estoy cerca de estar "curada". Todo no está en el pasado. Me mentí a mí misma para sobrevivir siendo la chica rota. Necesitaba fingir que todo estaba bien a mi alrededor. Necesitaba algo a lo que aferrarme para no hundirme en mis propias inseguridades.

Y ahora, todo está saliendo de las sombras. Todas esas cosas que intenté con todas mis fuerzas ocultar me están estallando en la cara. Porque no puedo huir de lo que soy.

No soy lo suficientemente fuerte para luchar mis batallas y no destrozarme por las cosas que hago mal. Porque sigo sintiendo que yo soy el problema. Que tiene que haber algo malo en mí para que todos sigan jugando conmigo de tal manera.

Que yo soy la culpable de no ser o sentirme suficiente.

Y es jodidamente agotador estar dentro de mi cabeza todo el tiempo. Escuchar todos esos pensamientos que me recuerdan todos los defectos que tengo. De no tener paz en mi propia mente.

No puedo más. He llegado a mi límite.

Pensé en sentirme furiosa, traicionada, montar una escena como lo hubiera hecho en el pasado, llamarle y mandarle a la mierda por hacerme creer que por primera vez el problema no era yo, pero esperé y esperé, y esas emociones nunca llegaron.

La rabia que debía sentir no quiso aparecer.

En lugar de eso, me siento completamente vacía, rota en pedazos que ya no se pueden juntar, deteriorada hasta el punto de no tener vuelta atrás, como si fuera culpa mía todo lo que ha pasado. Que me lo merezco.

Porque nunca debí hacerme ilusiones.

Estoy demasiado cansada. Agotada de sentirme una completa decepción...

Y por eso necesito remediar parte del daño que he hecho. Empezando por confesarle a Emily la verdad. Todo lo que ha sucedido desde que puse un pie en su casa. Estoy completamente segura de que es lo que necesito hacer para poder solidificar mis deudas morales, aunque termine perdiendo lo único valioso que tenía y que lamentablemente no supe apreciar.

Tormentoso Deseo (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora