Sumision

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"¿No te das cuenta?
Te odio a ti hijo de perra".

(Odio - Natch Scrach)

Sumisión: Sometimiento de alguien a otra u otras personas.

Siempre la arrodillaba. Le gustaba que se la lamiese despacio, lentamente, sin prisas.

Subiendo y bajando sus manos, masturbándole, mientras su boca succionaba y su lengua rozaba su glande, presionándolo.

—Vamos, lámela —hablaba él arrastrando las palabras, con aquella mirada de desprecio

Obligada, coaccionada a hacerlo, sin ninguna opción de deshacerse de esa carga. Así se sentía la mente de ella. Se marchitaba día a día, iba puliendo aquello que él le enseñaba todos los días; el arte del amor, el sexo.

Se preguntaba todos los días de qué servía, por qué se veía sometida a aquella tortura. No le gustaba, dolía cuando él sujetaba su cabeza y aquel líquido pegajoso y caliente se derramaba por sus labios, dolía cada vez que la punta de su miembro le rozaba la campanilla.

Lágrimas de dolor de retenían en sus ojos. ¿Por qué, por qué? Era su pregunta, eterna, inexorable. Definitivamente no le gustaba, nunca le había gustado. Sólo la torturaba, la usaba y la tiraba; jamás la satisfacía. ¿Dónde estaba Neji, dónde estaba aquel primo amable y cariñoso de cuando eran pequeños?

Él había dejado de existir, y nunca se detuvo a mirarle, a siquiera darse cuenta.

Hasta que un día, pronunció las palabras mágicas:

—Te odio tanto, Nii-san.

Y él simplemente sonrió macabramente.

—Lo sé, mi esclava —pronunció, poniendo énfasis en cada sílaba—. Es un sentimiento mutuo.

30 ViciosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora