Veinte

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Lisa

-¿Cómo te fue?

—Fatal —Bufé.

Acababa de tener el examen más difícil del siglo, no exagero, y para sumar apenas había podido estudiar.

Simón estaba esperándome recargado en una de las paredes cuando salí, me tomo de la mano y comenzamos a caminar por los corredores.

—¿No pudiste estudiar? —Se interesó. Negué—. ¿Y eso por qué?

—Otras asignaturas, ya sabes...

No iba a decirle que era porque había estado con Jennie toda la semana, ya sé que es mi amiga y no hubiera tenido nada de raro pero prefería no decirlo.

De todas formas no estoy tratando de culparla por mi falta de estudio, casi me obliga a estudiar pero no me apetecía para nada cuando podría estar haciendo otras cosas con ella.

Llegamos a la puerta de mi siguiente clase: historia, odiaba historia más que a cualquier cosa en la vida, por suerte era la última del día aunque se haría el doble de larga de lo que realmente era.

Solté la mano de Simón para despedirme.

—Nos vemos después. —Sonreí.

—Espera —Me frenó—. Me preguntaba si querias ver una película está noche. —Sonrió.

Era viernes, lo que significaba que si era noche de películas pero con Jennie. Sin embargo, él ya me había invitado las dos últimas semanas y yo había rechazado ambas invitaciones. Podría ir hoy sólo para que no se sienta mal o algo así, Jennie lo entenderá.

—De acuerdo.

—Bien, pasó a recogerte a las nueve. —Besó mi mejilla antes de desaparecer por el pasillo.

Lo observé hasta que dobló la esquina, de repente parecía más feliz y eso me hizo reír.

Me senté en una de las mesas y saqué mi teléfono antes de que el profesor de historia llegara y la clase comenzara.

Para: Jennie

No podré ir a tu casa esta noche, lo siento :(

Pruébame - Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora