Capítulo 48 - Una tormenta se acerca

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-Te recuerdo....-Dijo el omega mirando por la ventana

-¿Tae?

-Eras tú...

....

Los nervios de Tae lo estaban consumiendo, sabía que pronto tenía que regresar a casa antes de que se hiciera más tarde, pero al mismo tiempo le preocupaba el estado de aquel alfa. La enfermera había revisado a Jungkook y solo había recibido un golpe muy fuerte, pero un par de analgésicos ayudaría.

-Listo, mamá vendrá por nosotros y llevaremos al herido a casa.

Hobi había estado al teléfono mientras esperaban afuera de la enfermería, pues la madre de Jungkook no podía ir a recogerlo, pero se había quedado tranquila con la explicación del beta.

-Bien, gracias por la ayuda

-Nada que no sea por el novio de mi amigo.-Hobi rodeó su cuello abrazándolo

-No es mi novio.-Tae gritó alejándose del beta mientras su mejor amiga se reía

-Dios cálmate, o pensaré que te pones nervioso porque te gusta

-Yo no....-El omega apretó los labios y decidió callarse y prefirió entrar de nuevo a la habitación, no tenía ánimos de escuchar comentarios sin sentido.

Al entrar a la habitación vio a Jungkook mirándolo desde la cama y le sonrió débilmente

-Eh, nosotros te llevaremos....-Dijo en voz baja, el alfa solo asintió sin apartar la vista del omega.-Si necesitas tus cosas, p-podemos ir por ellas.-Insistió luego de un breve silencio

-Está bien.-Jungkook le sonrió sin pararse de la cama.-Mi mochila y mi ropa deben estar en mi casillero, no tiene llave

-Ok.-Tae asintió y antes de que pudiera decir algo, la puerta se abrió y Hobi los miró a ambos

-Mierda, debí esperar más tiempo, creí que ya estarían teniendo algún momento entre ustedes o algo así

-Hobi.-Tae gritó y le pegó en el brazo, sin mirar a Jungkook jaló a su amigo y salieron de la enfermería

-Oye, eso dolió

-No me importa, debes dejar de decir cosas así

-¿Así cómo?

-Así, sin sentido.-Gritó el omega exasperado y comenzó a caminar hacia los vestidores

-¿Así como que Jungkook te gusta?.-Se burló el beta

-Jódete, espera aquí y ayúdalo a ponerse de pie, iré por sus cosas, no me sigas o juro por dios que te dejará de hablar en todo lo que resta de preparatoria

-Ok, pero no me quedó claro, ¿si te gusta?

El omega le levantó el dedo medio y decidió ignorarlo. Los pasillos ya estaban vacíos y el cielo comenzaba a nublarse, tenían que darse prisa y volver a casa. Al llegar al campo de juego, ya no estaba ningún chico del equipo. Caminó hacia los vestidores y por suerte seguían abiertos, aunque dudaba que quedara alguien ahí.

Al entrar se sintió un poco incómodo con el olor, las feromonas alfas estaban por todo el lugar, se tapó un poco la nariz y busco el casillero que aún estuviera ocupado, solo necesitaba recoger las cosas de Jungkook e irse de ahí. El omega encontró su mochila y abrió el casillero para buscar su celular y otras pertenencias, comenzó a meter todo y a doblar la ropa con cuidado. Estaba por terminar cuando un estruendo lo hizo saltar y miró a su alrededor para ver a Seung en una esquina.

-Lo siento, no sabía que alguien seguía aquí

-Eh...-El omega sentía su corazón latir muy fuerte debido al susto, volvió a guardar las cosas y cerró la mochila

Noche de TormentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora