*Canción vinculada: I wanna be yours- Arctic Monkeys.
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Había llegado hasta la habitación de Val y tocado la puerta.
— No hay nadie, vuelta otro día- llegó a la puerta y la abrió.
— Si quieres me voy- hice el ademán de irme cuando me tomó por la cintura para que no lo haga.
— Usted, señorita, me va a explicar ahora porque no fue a cenar. Así que no se irá.
— No te podré explicar el porqué pero puedo asegurarte de que voy a comer algo.
— Así, ¿Y cómo?
— Sígueme y lo sabrás.
Llegamos a las puertas de Gloxsfort donde estaba en mi moto.
— Ten, pontela- le dí la mochila y se la puso- y esto también.
— Y tú, no hay otro casco.
— No lo necesito, no te preocupes.
Después de un poder de convencimiento increíble que tuve que llevar por varios minutos se lo puso y se sentó detrás mío.
Me acomodé el cabello cuando paso sus manos por mi cintura y se acomodó mejor.
Arranque y el viaje a pesar de ser un poco largo y silencioso fue muy agradable.
Nos detuvimos en un bosque al otro extremo de Andonia. Lo descubrí hace un tiempo, era mágico, en cualquiera de sus 2 sentidos.
Cuando se puso el casco estaba vendado para que pudiera sorprenderlo, así que una vez se bajó lo tomé de las manos y lo lleve hasta un lugar.
Antes, había llevado las cosas que traje en el bolso y las preparé, ya una vez había terminado todo fue cuando lo bajé de la moto e hice todo lo demás.
— ¿Qué? ¿Me vas a matar?- había una sonrisa en su rostro y un muy buen toque de humor en su rostro.
— Por más preciosa que sea la muerte, no, no te voy a matar.
Me puse atrás suyo y lo desvende.
Su primera impresión fue de esperarse tratar de aclarar su visión.
Luego, cuando podía ver bien, giró hacia el lago que tenía enfrente. Estaba rodeado por altos árboles de toda clase, y la luna alumbraba desde lo alto la despejada noche.
Después de apreciar su entorno dió con el picnic sobre mantas y el pequeño parlante al lado.
Parecía bastante sorprendido, nosé si por el lugar o la sorpresa en sí.
— Sorpresa.
Cuando se lo susurré pareció volver a la realidad y recordado mi existencia así giró a mi dirección.
— ¿Lo hiciste tú?
— Por supuesto, con una ayudita de Annibal.
Sonrió y me abrazó de la misma forma en la que lo hizo aquel día de la llegada de padres con las noticias de la competencia.
La diferencia era que está vez me beso cuando me tuvo en el aire.
— Eres simplemente maravillosa.
— Y tú una de las mejores personas que conocí en mi vida- le sonreí y me volvió a besar.
Una vez me bajó, lo invité a sentarse y puse música bajita para que podamos hablar a gusto.
— ¿Cómo conociste este lugar?
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Le Chante de la Mort
FantasyChloe y Jinx Edevane tenían un historial que para un Normie cualquiera, deberían estar en un psiquiátrico, pero ese no era su siguiente paradero. Luego de un último incidente, las hermanas Edevane serían enviadas a la academia "Gloxsfort", lo que p...