CAP. #29 "JUNTOS PARA SIEMPRE"

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Agosto 20-2026

Estos últimos tres días habían sido de muy buen progreso, Ruggero ya se había enterado que tenía una vida, pero no con quién. Antonella y Bruno le habían informado de algunas cosas respecto a su pasado, pero hoy, precisamente hoy conocería al niño que el ayudo de cierta manera, pero algo que aún lo tenía confundido, era el porque sus padres  le habían dicho que era muy importante que lo hiciera.

Estaban en un pequeño parque cerca del departamento donde El y Leonardo se estaban quedando.

Ruggero estaba esperando a sus padres y al niño junto a Leonardo en las afueras del edificio.

Ruggero: Sabes, me he acordado de algunas cosas. Tengo algunos flashes de mi pasado, pero lo que más me intriga son eso ojos verdes, y no se... Siento que es alguien importante para mí.

Leonardo: Hermano... Me alegra mucho que en estos últimos días nos hayas recordado, a papá, mamá y yo ... Pero hay alguien que merece conocerte y que tú sepas de su existencia... Primero el y luego a ella.

Ruggero: Está bien. Pero... ?Porque dices que tengo que saber de su existencia?

Leonardo: Pues verás...

Andy: ¡¡Tío Leo!!

Antonella: Disculpen la demora, pero este hermoso niño nos hizo regresar de nuevo a casa a mitad de camino.

Ruggero se había quedado anonadado con el niño, se le hacía extraña la felicidad que sentía al verlo de nuevo. Y más extraño fue cuando el pequeño de ojos miel se fijo en él.

Andy: ¡¡Papi!!

El niño corrió hasta el, al punto de que si no lo agarraba se caían ambos. Fue extraño para el, sin embargo eso no le impidió corresponder el abrazo con la misma fuerza e intensidad que el niño.

Bruno: Bueno... Debemos ir al parque para hablar, es un tema muy delicado.

Los cuatro caminaron en dirección a las pequeñas bancas que estaban en un quiosco del parque. Andy, iba en brazos de su papá, se negó a que alguien más lo cargara, y Ruggero no se opuso, más le encantó.

Media hora.

Media hora habían hablado, media hora en la que Ruggero asimiló de lo mejor la noticia de que tenía un hijo, y que era el niño que el había ayudado, que era el niño que tenía en sus brazos, pero había algo que le preocupaba, conocerla a ella, quería saber si era ella la chica de ojos verdes que siempre están en sus pensamientos. Pero de pronto su seño de frunció, recordó algo. Que la mamá de su hijo, y el estaban privados de su libertad, y habían sido maltratados, por alguien que el conocía.

Andy: Papá mira, estos unos dibujos de nuestra familia, de mamá, tú y yo.

Ruggero: Están muy bonitos hijo.

Andy: Te amo papi, y recuerda muy rápido a mamá.

Ruggero: Lo haré campeón, lo haré.

Andy: ¿Irás a mí fiesta de cumpleaños, aunque sea un rato cuando mamá salga, asi ella no te ve?

Ruggero: ¿Porque no quieres que me vea mamá?

Andy: Porque ella no cree que estás vivo, está muy herida papi, y si te ve, se quedará dormida, o nos iremos, porque dice que si te enteras de lo que pasó, la dejaras y la odiarás, por eso es mejor que aún no le digamos hasta que ella esté mejor. ¿Verdad Nonna?

Antonella: Si cariño, así es.

El resto de la tarde Ruggero convivio con su hijo como i nunca hubiese pasado algo. Mientras que en su mente se hacían millones de especulaciones de lo que podría estar pasando con la mamá del nene...

De la mano del Amor  / RUGGAROLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora