Cuando Tacho se ofreció a hablar con Rama, nadie se lo negó, si había alguien que podía hablar con Rama ese era él. Si no podía hablar con la gitana, por lo menos intentaría hablar con su mejor amigo. Decidieron que los dejarían descansar e intentarían el día siguiente.
Tefi había estado agresiva por bastante tiempo después de su charla con Melody, pero volvió a estar tranquila después de un rato. El que no estaba tranquilo era Luca. En su mente no cabía la idea de que Tefi le tuviera tanto odio, claro que había veces que habían peleado, pero Tefi siempre fue dulce con él.
-No, no Thiago, les lavaron el cerebro o algo, pero tengo que intentar hablar con ella.
-Sí, algo les hicieron Luca, pero no sabemos con exactitud que fue lo que les hicieron. Mar está igual ¿Pensás que no me afecta? Pero tenemos que averiguar primero que fue lo que les hicieron a los chicos o puede ser peligroso.-Explicó Thiago.
-Tiene razón Thiago.-Dijo Kika.
-Tefi recuerda todo.-Explicó Melody. -Pero es como si culpara de todo lo malo que le pasó a Luca.
-Vamos a hablar con todos antes de llegar a alguna conclusión.-Dijo Thiago.
Thiago sentía que le faltaba el aire todo el tiempo, pero debía decir que estaba un poco mejor. Tenía a Mar tan cerca y tan lejos, pero se no se sentía tan angustiado como meses atrás. No se le podía acercar, pero sabía que estaba en la guarida, a salvo, y eso era más de lo que tuvo por meses. Ahora solo quedaba ver si podía recuperar a su Mar. Esa noche la escuchó gritar y se levantó de su cama con todas las intenciones de correr hacia ella, pero Tacho lo detuvo y Jhonny corrió para asegurarse que estuviera bien.
-¿Y?-Preguntó Thiago.
-Me dijo que fue una pesadilla y que estaba todo bien.-Les informó Jhonny, cuando regresó.
-¿No te pidió que la liberaras?-Preguntó Tacho.
-No. De hecho, ninguno lo ha pedido. O saben que son una amenaza y prefieren ser contenidos o directamente no les importa.
-Tengo que ir con ella.-Dijo Thiago y trató de subir, siendo detenido por Tacho.
-Pará, sabés que te entiendo mejor que nadie. Me muero por hablar con la gitana, pero viste lo que Mar te hizo. No sabemos lo que puede pasar.
-Necesito verla, Tacho-Dijo Thiago, desesperado. -Está asustada. Debe ser estrés postraumático por todo lo que le hizo la jefa.
-Pero no vas a ganar nada, ella no va a aceptar que la ayudes. Talvez ella no quiere que subas, talvez dentro suyo no quiere hacerte daño y vos subiendo no le hacés bien.-Le explicó Tacho y puso la mano en el hombro de su amigo. -Andá a dormir.
Thiago dejó de insistir en subir y se fue a una hamaca a tratar de dormir. En muchas ocasiones había tirado la toalla o había perdido el control y tuvo la suerte de que Tacho estuvo ahí. Su amigo podía ser impulsivo muchas veces, pero cuando necesitó que alguien le pusiera los puntos o le levantaran el ánimo, él había estado. Sabía que Tacho iba a necesitar lo mismo cuando interrogaran a la gitana y planeaba estar de la misma forma para él.
Al día siguiente, Jhonny pensó que talvez los chicos podían tener algo implantado indetectable y les dijo a los demás que si el sujeto estaba mojado no iba a poder burlar su detector. Con la aprobación de todos, Jhonny se dirigió a los cuatro chicos rescatados y les dijo exactamente eso, y ninguno se rehusó. Jhonny los guio hasta la ducha y una vez mojados, les pidió que se escanearan y comprobó, de nuevo, que no tenían nada.
-¿No te zarpaste, no?-Amenazó Thiago, después de que todos volvieran de su aventura en la ducha.
-Nah, yo tengo códigos.-Lo molestó Jhonny.
-Más te vale que no hayas visto nada.-Volvió a amenazarlo Tacho.
-Bueno, a la gitana es difícil no verla.-Rio Jhonny, provocando a Tacho. Este se le quiso tirar encima, pero Thiago lo detuvo. -Relajá, manzanilla. No vi nada. Pero están limpios, lo que les hayan hecho fue psicológico. -Tacho pateó una silla que tenía cerca y Thiago se pasó las manos por la cabeza, sufriendo solo con imaginarse lo que la jefa de ministros pudo haberle hecho a Mar. Después de eso, el líder de la resistencia tuvo que recobrar la compostura y trató de seguir adelante con el plan que tenían, por Mar.
-Muy bien, vamos con Rama.-Dijo Thiago, reincorporándose. -Recordá Tacho, se va a alterar si le mencionás a Kika, así que tratá de sacarla de la conversación. No sabemos como va a reaccionar al verte a vos, así que tenés que estar preparado, estamos acá por si nos necesitás.
-Tranquilo, es Ramita, mi hermano. No va a hacerme nada.-Aseguró Tacho.
-No te confíes.-Le advirtió Simon.
Tacho asintió, Kika lo abrazó y luego salió hacia la zona donde estaba Rama. Esa zona era de las más calmadas, tenía una hamaca y tenía muchas plantas, era una de las dos entradas de la guarida, pero la estaban evitando mientras Rama estaba ahí. Tacho se acercó despacio, atento a cualquier movimiento de Rama, pero él solo alzó la mirada.
-Tacho...-Dijo Rama suavemente, casi como un susurro.
-¿Cómo estás, Ramita?-Dijo Tacho, también muy suave.
-Cómo puedo.-Dijo Rama con lágrimas en los ojos. Lo emocionaba mucho ver a su amigo después de tanto tiempo. -No fueron unos meses muy alegres.
-Nada que el ángel vengador, no pudiera manejar, ¿no?-Dijo Tacho, tratando de sacarle una sonrisa.
-Ni el ángel rojo hubiera podido con esta gente, Tacho.
-Tranquilo, no tenés de hablar de eso si no querés.-Le dijo Tacho acercándose.
-Fue horrible, Tacho. -Comenzó a contar. -Cada día era peor que el otro. Pensaba que iba a morir y terminar con mi tormento, pero ni eso. -Lloró Rama y a Tacho también se le salieron un par de lágrimas. -Era como estar con Barto y Tina de nuevo, pero muchísimo peor.
-Tranquilo Ramón, ya estás acá, ya te rescatamos. Ya estás lejos de esa turra.
-No. No, esa turra sigue acá. Hay que acabar con ella Tacho.
-Ella no está acá, Rama. Te aseguro que la jefa no te va a hacer nada acá.
-No hablo de la jefa, Tacho. Hablo de Kika, esa turra está acá, yo la vi. Hay que acabar con ella, Tacho. No podés confiar en ella, todo esto es su culpa.- Rama comenzó a tratar de zafar de las ataduras.
-Pará un poco Rama. Eso es mentira, no sé que te hicieron, pero eso es una mentira.
-ELLA MIENTE TACHO. NO PODÉS CREER EN NADA DE LO QUE DICE ¡TENÉS QUE MATARLA O NOS VA A MATAR A NOSOTROS!
Tacho se alejó lentamente, sintiendo lástima por su amigo. No sabía qué decirle para convencerlo. Pero claramente, tener tanto odio hacia Kika le dolía a Rama. Quería ayudarlo, pero no sabía como.
Próximo capítulo: El Negri y la gitana, Jueves 16 de Marzo.
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Hay otra historia escrita para no pensar.
FanfictionCasi Angeles-Cuarta temporada. Después que el muro cayó Jay hizo varios intentos de volver en el tiempo para evitar que eso pasara, pero nada dio resultado. No importaba que cambiara, el destino hacía que el muro volviera a caer. Así que en lugar de...