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Llegamos al lugar alrededor de las 7:30 pm, por lo que ya se estaba oscureciendo. Recorrimos un sendero para llegar a la cabaña que había rentado mi colega. Habían más cabañas en el lugar pero estaban algo mejor y había una distancia considerable entre ellas, yo creo que por cuestiones de privacidad. Realmente agradecía eso.

-¿En serio rentaste este lugar? -pregunte totalmente sorprendida bajando mis maletas de la camioneta.

-Si ¿Porque? ¿Hay algún problema? -pregunto algo preocupada Yukio.

-No, en absoluto -respondí rápidamente- Solo es.. más grande de lo que imagine.

-Eso es bueno ¿no? -Yukio rio divertida- Bien entonces vamos adentro -tomó sus maletas y algunas cosas que había comprado antes y se adentro a la cabaña.

Pensé que cuando había dicho, fin de semana en una pequeña cabaña cerca del lago era en realidad eso, una pequeña cabaña con solo dos habitaciones, pero no. Debo decir que era muy bonita por fuera y no me imaginaba como sería por dentro.

Lleve mis maletas a la que sería mi habitación, confirmando así que todo era tan bonito.
Alguien tocó a mi puerta y era Yukio.

-Vamos a hacer la cena, ¿Quieres ayudarnos?

-Si, solo dame un momento.

-Okeeeeey~ -dijo por último y se fue.

Coloque mis maletas cerca de la cama y me puse una sudadera.

Cuando llegue a la cocina ví a mi compañera y su novia divirtiéndose mientras lavaban y cortaban algunos vegetales.

-Siento interrumpir pero vine a ayudar como me dijeron -avise sentándome en el banquito de la barra de la cocina.

-Bien -Yukio agarro un paquete de salchichas y me las dio- cortarlas en rodajas.

-¡Si! -afirme como si fuera un soldado y ella solo rió.

-¡Descanse soldado! -me siguió el papel- ¡Soldado! ¡Venga aquí y ayude a la cocina! -le ordenó a Shinso que hacía presencia.

-Si capitán a eso venía.

Cortamos algunas cosas más y cenamos muy bien, platicamos un poco, Yukio conoció un poco más a Shinso y nosotros a Nozomi. Cerca de las 12 de la noche cada uno fue a su habitación a descansar. Había sido un día algo cansado.

••

Eran las dos de la mañana cuando me desperté de repente. Por alguna razón me faltaba el aire así que me levanté de la cama y abrí la ventana de mi habitación. El frío golpeó mi rostro, pude respirar un poco mejor pero no era suficiente.

Dejé la ventana abierta y salí de la habitación, caminé por el pasillo cuidadosamente evitando hacer ruido y despertar a los demás y también tratando de no golpearme o tirar algo. La luz de la luna que lograba entrar iluminaba un poco el lugar así que fue más fácil para mí llegar a la puerta principal.

Salí por ella y el viento frío cubrió en totalidad mi cuerpo, se sentía tan bien que comencé a tranquilizarme. Camine un poco más y me senté en el pequeño escalón de entrada, admiré cómo se veía el pasto y los árboles al ser iluminados por la luz natural, no había ningún ruido de autos, vecinos o algo; solo habían grillos y algunos búhos.

-Pero que tranquilo -respire profundamente.

-¿Que haces aquí afuera?

Preguntó una voz detrás mía y yo salte un poco en mi lugar por el susto. Cuando mire quien era mi primer impulso fue darle un golpecito en la pierna.

-Oye, me asustaste.

-Perdona, no fue mi intención -Hitoshi trató de disculparse pero se rió un poco.

-Solo quería algo de aire frio y fresco -volvi a mirar en dirección del bosque y respondí a su anterior pregunta- Y tú ¿Que haces aquí? -ahora cuestione yo.

-Queria algo de agua, mire por la ventana y te ví aquí -hice un sonidito de afirmación a lo que dijo- ¿Puedo sentarme?

-Claro -respondí sin mirarlo.

Nos quedamos admirando el lugar sin decir nada por unos cuantos minutos. Comencé a sentir sueño y cuando estaba a punto de cerrar los ojos Shinso habló.

-Que hermosa se ve la luna.

-¿Qué dijiste? -pregunté, no había alcanzado a escucharlo bien.

-La luna, luce hermosa, solo eso.

-Oh~ Si, está bonita -afirme mirándola, realmente estaba muy brillante y grande.

-Te extrañaba.

-¿Qué? -lo mire y el no lo hacía así que volví a dirigir mi vista a la luna.

-Preguntaste porque decidí salir contigo, venir aquí -hizo una pausa- Extrañaba pasar tiempo contigo.

Me sorprendí un poco y volví a mirarlo.

-Shinso..

De pronto sus labios tocaron los míos, no era un beso brusco o algo por el estilo, solo era eso; un beso, el contacto era tan suave que lo creía irreal. Me había tomado por sorpresa por lo que ni siquiera cerré los ojos y tampoco correspondí. Después de unos pocos segundos Shinso se alejó y me miró directamente.

Yo aún estaba procesando lo que había pasado y cuando mi cerebro dejo de pensar sentí arder en demasía mi cara.

-Pero que.. -lo miré completamente avergonzada y me cubrí mis labios con la mano- tu acabas de.. ¿Porqué hiciste eso?

-Me gustas, si no ¿porque más sería?.

-Pero yo..

-Si lo sé -dejó de mirarme y miro hacia enfrente, para después acostarse completamente en el piso de madera- mira no espero que correspondas mis sentimientos así de la nada justo ahora porque se que aún amas a otra persona.

-Eso no es-

-No te atrevas a negarmelo, porque sabemos que es cierto -me miró acusadoramente y ya no dije nada- yo solo quiero que estés bien, además tenía que decirlo, sabes que no me gusta guardarme las cosas.

Yo solo asentí sin decir nada.

-Bien, ahora -se incorporo de nuevo- no hay que poner el ambiente incómodo entre nosotros.

-Si claro que no pff~ -reí falsamente- digo, como es que se pondría incómodo después de que mi exnovio de hace seis años me acaba de besar y además declararme sus sentimientos ¿No? Imposible.

-Ah~ en el fondo no has cambiado -me sonrió y con su mano dió unas pequeñas palmaditas en mi cabeza- bueno vamos adentro no querrás agarrar un resfriado -se levanto y caminó hacia la puerta.

Asentí y me levanté, cuando estuvimos dentro de la cabaña cada uno volvió a su habitación.

•••

(⁠ㆁ⁠ω⁠ㆁ⁠)


Bonito sábado tenga ustedes, espero les guste el capítulo.

Nos vemos oeo

-Raimioni

Inusual ●| Bakugou x tn |●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora