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—¡Wow, Katsuki! ¡De verdad hemos mejorado mucho como pareja! ¡Eso me hace muy feliz! —esa maldita sonrió.

—Si, también me alegra —me forcé a sonreír.

Me agarró de la mano y se acercó a mi para después besarme. Tuve que aguantarme las náuseas que me provocaba.

—Pero.. es una lástima —ella se alejó, pero continuaba sonriendo.

—¿De qué hablas?

—Ay mi querido Katsuki, a pesar de todo lo que te dije, aun así, fuiste con esa perra.. —mi respiración se cortó por un instante y comencé a sentir algo de frío— tú me obligaste a hacerlo, que te quedé claro.

—¿De qué mierda estás hablando?

—Ouh~ ¿Ya no me hablas de forma cariñosa? ¿No se supone que estábamos avanzando en esta relación? imbécil.

—¡DIME DE UNA PUTA VEZ QUE HICISTE!

—¡¿A caso creíste que no iba a enterarme que te revolcaste con esa zorra?! —se rio como una loca, bueno lo era—  ¡¿Y esa maldita que hizo?! ¡Te abandono y se largo! ¡¡Hasta eso es una cobarde!! —se levanto de la silla y comenzó a caminar hacia atrás— ¿Sabes que? Me das algo de lastima, así que te daré una ventaja de 20 horas para que la encuentres antes de que yo la asesine.

Palidecí ante lo dicho.

—Nos vemos mi amor, espero llegues a tiempo —llevo sus manos a sus labios y mando un beso, segundos después una especie de niebla negra cubrió su cuerpo y desapareció.

La desesperación comenzó a comerme y la voz en el auricular que traía comenzaba a estresarme más, no me dejaba pensar bien.

—¡¿QUÉ MIERDA QUIERES?!

¡Bakugou! ¡¿A donde se fue?!

—La maldita ira por ella.. ¡Tengo que encontrarla!, ¡Debo de encontrarla! —camine de un lado hacia el otro, parecía león enjaulado.

Tranquilízate, ¿Sabes algo de donde esta?

—Mierda, no.

Entonces.. ¿Sabes de alguien que podría saber? —me quede en silencio por unos segundos pensando con quien pudo haber tenido contacto estos días, hasta que a mi mente llego una persona.

—Manténganse atentos a mis indicaciones.

Esta bien.

Cerré el canal de comunicación y me apresure de salir de la plaza.

Después de un tiempo llegue a esa casa característica de fachada color ladrillo y aquel nerd iba saliendo del lugar, en compañía de la persona que estaba buscando.

—¡EN ESTE MALDITO MOMENTO VAS A DECIRME DONDE ESTA _______! —grité cuando llegue junto a ellos, agarrando del brazo a la cara redonda un poco fuerte pero sin llegar a lastimarla, no quería que se echara para atrás en darme información .

—¡KACCHAN! ¡CALMATE! —Deku me agarro del otro brazo, intentando alejarme.

—TU NO TE METAS MALDITO!

—¡URARAKA NO SABE DONDE ESTA _______, ¡CALMATE DE UNA PUTA VEZ!

Solté una explosión a un lado de la pelicastaña, frustrado y me aleje un poco.

—Kacchan escucha, nosotros tampoco sabíamos que se había ido —hablo Deku ya sin gritarme.

—Asi es, _____ casi nunca habla de sus cosas, pero.. —la cara redonda miro hacia otro lado evitándome.

—¡¿Sabes algo verdad?! —ella dio un pequeño salto en su lugar— ¡Dímelo de una maldita vez cara redonda!

—Mina.. —vi cómo se mordió el labio, talvez pensando si me decía la verdad pero al final suspiró— Mina hablo con ella hace tres días, ______ le dijo que había sido transferida al extranjero desde hace tiempo.

—¿Desde cuando?

—Ha-hace un mes.

Me giré y comencé a caminar por la acera, pero de inmediato sentí un agarre en mi antebrazo.

—Kacchan, ¿Qué paso?

—No te incumbe —jale mi brazo liberándome de su agarre.

—Claro que si, ustedes dos se divorcian hace unos meses ¿y ahora que?, ¡Ni siquiera sabes en qué parte del extranjero está!

—¡Mierda, ella no está en el extranjero! —me gire a verlo.

—¿Qué? —dijo con una ligera confusión— ¿Cómo lo sabes?

—Porque estuve con ella hace dos semanas.

Deku me miró algo sorprendido.

—Necesito saber dónde está, _______ claramente le mintió a Mina, a ella no le gusta ir al extranjero si no es acompañada.

Volví a darme la vuelta para comenzar a caminar, estaba perdiendo tiempo valioso en estupideces.

—¡¿Pero a quien esperas preguntarle?! ¡Kacchan! —ignore los gritos del nerd, hasta que gire en la esquina dejando de oírlos.

Llegué a la agencia dónde _______ trabajaba, en busca de una persona en específico, alguien que podría ser mas de utilidad que la cara redonda.
Recorrí los pasillos e ignore las miradas de algunos estúpidos curiosos y los sorprendidos de otros idiotas.

Y después de un tiempo di con aquella oficina y la persona que quería estaba dentro.
Entre sin tocar la puerta importandome poco el grito de aquella chica.

—¡Tu sabes dónde está! ¡¿No es así?! —la señale y di un manotazo en su escritorio, ella nego efusivamente con la cabeza— ¡NO ME QUIERAS VER LA CARA DE IMBÉCIL! ¡DIME DE UNA PUTA VEZ DONDE ESTA!.

—¡NO! ¡Me hizo prométerle no decir nada! ¡Y MUCHO MENOS A TI!

—¡MIERDA, DEJA DE DE SER TAN ESTUPIDA!, ¡ENTIENDE QUE ELLA ESTA EN PELIGRO! ¡¿ACASO QUIERES QUE ELLA MUERA?!

—¡NO! —respondió levantándose de su asiento, bajo su mirada y se quejo bajito— Agh.. Está bien, está bien yo.. ella está en Sapporo.

—¿Sapporo? —ella asintió y yo salí de la oficina sin más.

Tenía que llegar a ella lo mas rápido posible, tenía que llegar a tiempo.

No me di el tiempo de empacar, solo me lleve mi traje y partí directamente al aeropuerto, mi cabeza comenzó a doler pero no podía perder el tiempo de detenerme en una farmacia o algo, sabia que era por no saber en donde estaba exactamente ________, así que sabia que dejaría de dolerme una vez que llegara a ese lugar.

Compre los boletos importándome una mierda si estaban demasiado elevados en el precio. El vuelo salía en una hora, por lo que no perdería tanto tiempo. Sapporo quedaba solamente a 3 horas, así que tendría el tiempo suficiente para buscar su agencia y dar con su paradero.

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(⁠ ⁠╹⁠▽⁠╹⁠ ⁠)

Espero les guste y descansen

(Cualquier error será corregido cuando la historia pase a borradores)

Inusual ●| Bakugou x tn |●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora