Jóvenes Máscaras

Cuenta regresiva

Facundo

06 de Junio , 2015

Salí de la casa, crucé la calle y golpeé la puerta de la casa de la familia Lemos Amarilla siendo atendido por Alexander.

—¿Si? ¿Qué quieres? —preguntó el pequeño con una dulce voz 

—¿Está tu hermano? 

—Tengo más de uno 

—El que tiene los cachetes más grandes.

—Si, espérame ahora lo llamo —dijo con una sonrisa y volteo la cabeza —¡Agustín te busca el tipo que te cae mal! —gritó y esperó una respuesta —oh, bueno creo que no está ¿sabes cocinar? Tengo hambre, en la heladera solo está lo que Agus cocinó pero apreció mi vida.¡Ey! ¿a dónde vas? ¡Eso fue muy grosero! -gritó el chico mientras me alejaba. 

Saqué mi celular y le mandé un mensaje a Coty preguntando si Agustín estaba con ella, quería hablar con él para desmentir lo que Julián me había confesado con tanta culpa, al obtener un "no" como respuesta le pedí de manera insistente que le pregunte a Carlos y a los demás si sabían algo de él. Ninguno sabía nada.

Caminé hasta la librería pero no estaba ahí. Ni siquiera Tomás, Ámbar o don Antonio sabían dónde Agustín estaba, parecía haber desaparecido en el aire y eso no era una buena señal.

Esperé a que asistiera a la clase. Estaba preocupado. Le pedí por mensaje a Olivia que me llamara si es que lo llegara a ver, pasaron unos diez minutos y Max llegó junto a su novia la cual despidió de un beso. El chico me saludó, se apoyó en la pared y se colocó sus auriculares. Los siguientes en llegar fueron Lorion y su madre. Él pequeño se mostraba más tímido de lo normal. Tras ellos Raquel llegaba en su bicicleta. 

Lorion ocultó su cabeza detrás de su madre hasta que Raquel lo saludó.

—Si quiere —ofreció Raquel dirigiéndose a la madre de Lorion —yo puedo cuidarlo, Oliver avisó que va a llegar un poco tarde. 

—¿Te parece bien? —preguntó la madre de Lorion mirando a su hijo a la cara. El pequeño asintió con la cabeza. 

Al irse su madre el chico le agradeció a Raquel por lograr hacer que ella se fuera. 

—¿Porque te agradeció que descartes a su madre? —pregunté.

—Porque lo vuelve loco últimamente, fue a más de quince casting en estas últimas semanas, más las clases de canto, baile y no sé qué más. No lo deja descansar, desde que se levanta hasta que se va a dormir ella lo está poniendo en actividades diferentes. Yo no estoy en contra de que ella quiera hacer que su hijo tenga una rutina, o un futuro mejor, pero ese niño no tiene tiempo ni de respirar fuera del apretado calendario de su madre. 

—Suena a que es un dolor de cabeza.

—Lo es, ¿porqué estás desde tan temprano? 

—Espero al idiota de Agustín.

—¿Se volvieron muy amigos últimamente? digo ahora ya no los veo pelear. 

—No lo creo, pero es verdad ya no peleamos —. "Ni podremos hacerlo si no aparece" pensé, el recuerdo de Dani me vino a la mente. 

Poco a poco el resto de los chicos fueron llegando, ninguno sabía del paradero de Agustín ni entendían el porque yo me encontraba tan preocupado por él. Perdía mi mirada por momentos, aún hablando con Coty no me podía concentrar. Ella me perdonó después de enterarme que fui yo quien le regaló el libro de la portada azul. 

La clase comenzó y mi vecino no daba señales de vida, la preocupación que estaba experimentando se exparcio contagiando a todos a mi alrededor, supuse qué cada uno tenía una teoría dentro de sus cabezas del porqué no había llegado, pero ninguna de ellas podría ser tan descabellada como la que yo estaba considerando: "eso se lo pudo llevar, es tan idiota que de seguro toco esa cosa. Ni siquiera se que es esa cosa, solo se que es real y si pasa lo mismo que con Dani él va a dejar de ser real, supongo que así funciona, no lo se, estoy hartó, a este punto me volveré loco".