Yo si te amo | Pablo Gavi

3 - " Muy simpatico "

Narra Gavi

La cena ya estaba lista y pasamos al comedor. Gracias a dios no me sentaron al lado de esa chica pero para mi mala suerte si al frente junto a mi hermana.

Ellos hablaban solo de esa chica y de todo lo que hacía, sus logros, estudios y demás.

- Que clase de danza bailas Emi?- pregunto mi madre.

- Pues de todo, pero me especializo en danzas urbanas- contestó y yo rodee los ojos.

Que presumida.

- Empecé con ballet, por eso de vez en cuando tomo esas clases para no perder la técnica- volvió a hablar y mi mamá se veía muy interesada en la conversación.

- Y tu gavi? Como vas con los entrenamientos?- me pregunto el señor que estaba en la punta de la mesa.

Al fin un tema interesante para hablar.

Narra Emilia.

- La verdad bastante bien, ahora entrenamos todos los días por la mañana y un día de por medio por la tarde hacemos máquinas- Respondió el chico que no había pronunciado ni una sola palabra desde ese "hola".

- Disculpen- interrumpí. - Que entrenas?- le pregunte directamente a él, todos me miraron sorprendidos.
- Lo siento, pregunte algo malo?-

- Nono, solo que nos sorprende que no sepas que el juega al fútbol, en el club Barça- respondió su madre.

- Ah, que bueno, no sabía disculpen, sigan hablando- dije y me dispuse a seguir comiendo, mientras ellos hablaban de fútbol.

Encima de lindo, deportista.

No era mucho del fútbol, solo cuando jugaba Argentina.

La cena continuo entre charlas con Aurora, esa chica me caía super bien, es muy simpática, nada que ver a su hermano.

Terminamos y pasamos nuevamente a la sala para beber café y charlar de lo que verdaderamente importaba.

- Bueno, presten mucha atención Emi y Gavi- Hablo mi padre mientras abría una carpeta que se encontraba en la mesa ratona de la sala.

- En este contrato se encuentran todos los requisitos que tendrán que cumplir durante dos años, iniciando desde hoy, a esta misma hora- hablo esta vez Pablo sacando un bolígrafo de su bolsillo y dándoselo a su hijo.

Leí el contrato muy atentamente, este decía que teníamos que iniciar una relación amorosa, los medios se enteraran, y me conocerán. Nos tendríamos que casar legalmente un mes después de que todos sepan de lo muestro y este sería un proceso bastante largo para hacerlo más creíble.

Luego decía que tendríamos que comprar una casa, que esta estará al nombre de Pablo, compartiriamos dormitorio sin excepciones y saldremos a todos lados juntos.

- No podemos cambiar la parte de compartir dormitorio?- pregunte.

- Si yo tambien quiero cambiar eso- hablo el chico. - Y poner otra condición... nada de besos- Dijo y me sorprendí, no había pensado en eso.

- Me temo a que el contrato ya está hecho y revisado por un abogado, no podemos cambiarlo, así que lo del dormitorio no podemos cambiar- dijo mi padre apenado.

- Pero en el contrato no dice nada de besos así que, si no quieren, no hay besos- Hablo Pablo y nosotros acentimos.

- Quien es Mateo?- pregunte mientras leía que teníamos que hacer lo que el nos decía.

- Ah si...- recordó mi padre.
- El se va a encargar de su relación en las redes sociales, ya que eso es lo importante aquí, el público-

- Lo que faltaba- rio irónico el chico.

- Será solo por este mes, cuando convivan podrán hacer lo que quieran- Dijo su madre.

- Okey- conteste.

- Tómense su tiempo- dijo mi papá mientras me entregaba un bolígrafo sonriente.

A los segundo vi como el firmaba el contrato cansado y resoplando. Yo me tomé unos minutos para terminar de leer el contrato y luego firmar.

Pablo y yo nos dimos la mano y los demás nos felicitaron, la verdad no se porque, este era el principio de una pesadilla si ese chico seguía siendo tan mala onda conmigo.

Papá me dio las gracias y yo lo abrace, hacia esto por el y para ayudar a la empresa familiar, pues gracias a ella yo hago lo que hago y estudio lo que estudio.

- Mañana mismo van a conocer a Mateo en mi oficina a la hora de almorzar, podemos pedir algo, conozco un restaurante muy bueno que está cerca- hablo papá. Los demás aceptaron y unos minutos después la cena terminó y la familia Paez se marchó de la casa.

Suspire en cuento me senté nuevamente en mi lugar cansada.

- Muy simpático mi prometido la verdad- dije sarcástica y mis dos padres rieron.

- Es un poco tímido, se acostumbrará con el tiempo-

- No lo mando a la mierda, solo porque es lindo- ocasione la risa de mis dos padres con mi comentario.

Me despedí de ellos y me fui a dormir.

Narra Gavi

A mi familia pareció fasciarles Emilia, no paraban de hablar de ella en camino a casa.

A mi me resulta muy irritante, todo el tiempo sonríe, no se cansaba?

- Intercambiamos número de teléfono, y quedamos en ir de compras el martes después de almorzar- comento mi hermana a mi lado.

- Que opinas Gavi? - me miró mi madre desde el asiento del copiloto. - Encima deportista- yo me reí incredulo.

- Mamá la danza no es un deporte, aparte estoy seguro de que no es buena en eso- conteste.

- La danza si es un deporte Pablo, tu persigues a una pelota y nadie te dice nada- la defendió Aurora.

- Solo pienso que todo el mundo puede bailar, yo no te e visto perseguir una pelota hermanita- la mire.

Llegamos a casa y me dispuse a ir a mi cuarto para dormir, tengo entrenamiento temprano y mañana también será un día bastante largo.