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Escribir la historia de amor que de niño imaginaste tener, con alguna persona famosa o simplemente por los sentimientos de una persona. Quieres escribir si todo saldría a la perfección o los comentarios tan positivos que iban a nacer frutos de una hermosa relación.

Unas fracasan y le dan vuelta a la página para que inicies un nuevo comienzo con otra persona pero jamás lo has logrado, intentas arrancar las páginas que ya no te quedan más hojas blancas pero te das cuenta que hasta aquí termino tu vida amorosa.

Algunos libros son un éxito que muchos lectores desean tener este estilo de vida y entre ellos estaban dos futbolistas que seguían los pasos de una hermosa relación sana y hermosa, a pesar de las nacionalidades no les quitaba la felicidad.

Pues esa felicidad crecía más que ayer pero más para mañana. Un futbolista que estaba dispuesto a darlo para que no le hicieran ningún daño.

La noche cayó por completo y tuvieron que regresar al hotel ya que va a empezar los partidos, Leo quería ver a su mejor amigo si pasaría a la semifinal con él y por supuesto que va a dar lo mejor. Por su parte Memo se tuvo que retirar ya que sus amigos les esperaba a cenar, este día de novios fue fantástico.

—Me alegra mucho que te la pasaste tan bien conmigo.

—Tambien digo lo mismo cariño, espero que podamos tener otra de estas citas.

Rieron y se dieron un beso de despedida aunque no querían irse ya, aún debían estar juntos y ver la televisión o tal vez dormir abrazados en cama con las sábanas cálidas. Ambos se dieron vuelta pero las ganas de besarse se hacían presente.

—Un último y ya — los dos dijeron al mismo tiempo que les sacó una pequeña risa y volvieron a unir sus labios.

Abrazados y que nadie les interrumpía parecía que está noche iba ser suya pues ambos cayeron a la cama siguiendo el beso, sin darse cuenta Leo estaba encima de Memo mirándose a los ojos por un par de segundos. Sus respiraciones estaban un poco agitadas.

Memo tomo el rostro de su amado con ambas manos para tocar su rostro de una manera tan tranquila y atrayendo a su rostro lentamente, esos labios eran su dulce favorito. Leo se acomodaría en las piernas del mayor para que no todo el peso se lo lleve el contrario, a punto de darse un beso.

Los labios de Ochoa bajaron hasta el cuello del chico dejándole un pequeño camino de varios besos y que el Omega soltarían algunos jadeos, su piel era un poco sensible, todo esto termino a su fin.

—¡Leo! ¡Tenemos buenas noticias sobre nuestra selec-! — Enzo azotó la puerta con mucha felicidad y encontrándose la escena "romántica" ahí mismo, este se sonrojo y mejor decidió irse.

—¡Cuántas veces tengo que decirles que toquen la puerta! — Leo estaba demasiado rojo que se separó del cuerpo de su pareja y empezó a perseguir a su compañero joven.

El alfa también estaba demasiado sonrojado que se tapó con la almohada de la cama y se quedó ahí quieto por un par de minutos. Habían arruinado su momento favorito y parece que no se volvería a repetir.

Ochoa mejor se quería retirar del hotel no sin antes de encontrarse en los pasillos a su amigo Julián, ambos chocaron la mirada y entendió que es una emergencia hablar entre ellos dos, el Omega sonrió para acercarse a él y darle un pequeño abrazo. Se lo llevó a su habitación.

Dentro de éste estaba muy bien organizada las cosas y claro que sí, todo estaba mucho mejor acomodado y en sus respectivos lugares, no como sus amigos los mexicanos.

—Que alegría es volver a platicar bien contigo Memo — Julián le dijo que tomará asiento en su cama para que pudieran platicar de las cosas importantes que estaban por mencionar.

𝑈𝑛𝑡𝑖𝑙 𝐼 𝐹𝑜𝑢𝑛𝑑 𝑌𝑜𝑢 •||• 𝑀𝑒𝑠𝑠𝑖 𝑥 𝑂𝑐ℎ𝑜𝑎 (TERMINADA)✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora