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El sentir de las emociones estaban comiendo su alma poco a poco y era una bonita sensación, que tus sentimientos sean correspondidos de todos modos y si la persona está dispuesta a compartir esa emoción, es la indicada.

Claro que a veces el amor puede fracasar de una forma tan tonta o dolorosa pero de las pocas veces que uno puede triunfar es que le está echando muchas ganas a qué esa persona se fije como es, no por el físico, si no como es tan dulce con los demás. Tal caso era como el de los dos jugadores, dónde aún quedaba un poco inconcluso su respuesta en el amor.

Ante ese beso, ambos se terminaron de separar para tomar un poco de aire y mirarse un poco los ojos, por un momento pensaba que era un sueño para ambos el que se hayan besado pero no lo era, sin saber cómo reaccionar Memo solo estaba demasiado nervioso que se apartó mucho de Lio.

—Ah lo siento mucho Leo, no era mi intención besarte enserio — sus mejillas de un tono rojo le delataban. — me dejé llevar por el momento, una disculpa.

El chico de rizos estaba demasiado avergonzado el besar a uno de los mejores jugadores del mundo y por sus emociones lo impulsaron a que lo besé con demasiada intensión aunque, ¿a quien iba a engañar? Le gustaba a kilómetros.

Por su parte Leo estaba demasiado feliz ya que un chico lo beso y era quien le quería confesar sus sentimientos antes de que iniciará el mundial. Eso era un verdadero amor, nuevamente tomaría las manos del portero y le miraría a los ojos.

—No te dejes llevar por el momento y claro que yo también aceptaría las veces que me quieres besar — el Omega río un poco para ahora besar las manos del contrario. — Memo, tu me gustas...

¿Esto era real? Por supuesto que sí.

Una campanada despertó el corazón de Ochoa y claramente era que los sentimientos habían salido al aire sin temerle nada al mundo, que todos se enteren de quién estaba enamorado. El alfa con una sonrisa volvió a besar esos labios que tanto le quería como el primer día que lo vió, al principio no tenía un buen lazo fuerte cuando cruzaron miradas en Rusia pero algo decía que en este mundial muchas cosas cambiaría.

La tristeza cambio demasiado y las emociones iguales, aún con el beso intentaron hacerlo largo mordiendo y jugando con esas lenguas pero por sorpresa alguien tocó la habitación del mexicano.

—Memo, ¿vienes a cenar? — Kevin quien tocaba la puerta intentaba recibir una respuesta. — Se que todos estamos tristes pero comer te hace la barriga feliz.

Leo se sobre salto un poco y cae al suelo, por su parte el alfa se levanta rápido y se enreda con los pies de ahora su enamorado y ambos caen escuchándose algo doloroso, Álvarez se asustó demasiado por lo cuál intenta abrir la puerta con fuera y una vez que lo intento lo busca, sin esperarse esa sorpresa.

—¡Memo! ¿Todo en ord-...? — abrió los ojos en par mostrando la escena vergonzosa.

Memo y Leo miraban al otro mexicano dónde no podían decir nada, las palabras no salían de esa boca incluso Memo se había lastimado un poco el rostro ya que cayó sin poner las manos. Kevin solo suspiró intentando no pensar lo que podía pasar.

—Adivino...¿A qué se debe la visita de Leo? Seguramente a burlarte de ti — enojado tomaría la mano de Memo para que se volviera a sentar en la cama.

—No...Kevin, vino hasta acá pasa ayudarme a levantarme el ánimo, no viene a eso — miró por un par de segundos al argentino quien le regaló una pequeña sonrisa.

Álvarez miro la tensión de ambos y solo quiso salir de la habitación lo antes posible y también por llevarse a Ochoa, aunque era difícil ya que ahí estaba Lionel. Por alguna razón lo odiaba aunque eran rivales pero tenía algo, lo podía descubrir pronto.

No le quedó nada al alfa menor así que con mucha "amabilidad" invito al Omega argentino a qué cenará con ellos antes de que alistaran sus cosas y nuevamente de viaje a México, el primer día en Qatar sería investigar toda la ciudad y próximamente a su país natal.

Los tres chicos bajaron hasta el lobby principal y hacía un pasillo estaba el comedor principal dónde se encontraba el director técnico con los otros jugadores, por supuesto que todos miraron a Lionel ya que era una "visita" inesperada, Kevin solo les dijo que se sentarán y que iba a llegar la cena.

—¿Si eres Messi verdad? — Alexis Vega estaba demasiado feliz de verlo que comiera con ellos. De ahí recibí una bofetada por el jugador 22.

—Pues claro que sí menso, es Leo — Lozano con su tenedor robo un pedazos de spaghetti que había comido Vega.

Lionel sonrió y se sentó a lado de Andrés Guardado, otro alfa que le tenía un poco de miedo ya que su olor era un poco fuerte que el de Memo, le asustaba un poquito aunque también era el capitán.

La cena ya estaba servida y con eso agradecieron para comer en una forma de familia y tranquilidad, Leo le tuvo que mandar mensaje a su director técnico que no se preocupe, se encontraba despejando su mente cosa que no era cierto. Guardo el celular y empezó a comer.

—¿Es cierto que te enfrentas a Australia? — Luis Chávez miraba atentamente al argentino y este asintió con la cabeza. —Te deseo la mejor suerte del mundo Leo.

—Gracias chicos, al principio íbamos mal pero nos pudimos... recuperar — aún recordaba el rostro de Memo ante el primer gol de Argentina, le dolió verlo así.

Aunque Memo recordó lo malo que lo paso no podía odiarlo y mucho menos tenerle un gran rencor, después de todo muchos países les gustaría tener una copa mundial en sus manos y a quien no, es una pieza muy valiosa en el fútbol.

La charla continúo y casi siendo una noche inolvidable debía retirarse Lionel ya que quería dejar que los chicos duerman como se debe. Por supuesto que Memo le acompaño hasta la salida y de ahí ambos se despidieron.

—Me alegra saber que la hayas pasado bien con nosotros — Memo sonrió para mirarlo. — esperemos que nos volvamos a ver.

—Espera, ¿ya te irás de el país? — Leo estaba algo preocupado y le tomaría la mano. — No te vayas, quédate aquí conmigo.

Era una decisión algo demasiado pensativo y esa era ya la respuesta definitiva de Memo, ya no habría que hacer nada en este país por todo lo que pasó en una fase de grupos, será una marca que jamás podrá olvidar. Volviendo al tema, el moreno dudaba un poco si quedarse o no.

El beso en la habitación lo dijo todo y por si fuera poco los sentimientos fueron correspondidos por ambos, no era la pregunta típica cuando están enamorados, era la decisión de los dos. El portero lo dudaba un poco y verlo así le daba mucha ternura.

—¿Pero dónde me voy a quedar a dormir? — pregunto cruzándose de brazos.

—Te podrías quedar en mi habitación del hotel — apresuró antes que el otro chico dijera algo.

—¿No crees que tú director técnico o alguno de tus compañeros vean que hay alguien en tu habitación? — le miró algo extrañado.

—Yo creo que no... — el argentino desvío un poco la mirada algo apenado y sonrojado al mismo tiempo.

La cosa estaba que ninguno de los dos estaban llegando a una buena organización y pues tenían que decirlo una vez, quedaron en que Memo se iba a quedar en Qatar con unos de sus amigos por esta vez y cerca del hotel argentino.

—Tendré que hablar con mis amigos — Ochoa miró al argentino. — Debería comentarles de esto y de nosotros.

Tomó delicadamente sus manos para besarlas y aunque el amor aún no se fuertemente entre ellos dos era posible que iba a nacer, algún día.

Leo estaba súper emocionado saber que sus sentimientos estaban siendo correspondidos pero por otra parte tenía miedo de que las cosas que decía Memo era solo una mentira para no lastimarlo. Esperando que nada fuera un juego.

Al final ambos se fueron por su lado no sin antes de darse un cálido beso, Leo se fue a su hotel muy feliz sabiendo que lo que vivía no era un sueño, es una realidad. Por otra parte, Memo entro a su hotel con una sonrisa en su rostro y llegando a su habitación se encontró con alguien.

—¿Tu y él son algo? — Kevin Álvarez apareció de la nada interrogando al portero.

Algo no parecía salir bien, ni mucho menos mal.

𝑈𝑛𝑡𝑖𝑙 𝐼 𝐹𝑜𝑢𝑛𝑑 𝑌𝑜𝑢 •||• 𝑀𝑒𝑠𝑠𝑖 𝑥 𝑂𝑐ℎ𝑜𝑎 (TERMINADA)✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora