Eterna condena

Sueños intensos

No paraba de soñar con esta persona sin rostro, sabía que existía y no me rendiría hasta encontrarle.

Llevo años soñando con él, quizás con ella,aun no lo se.

Para ser exactos 106 años.

Tengo 125 años ahora mismo, pero parezco de 18.

He recorrido 15 países en total, tratando de huir de la realidad, y de que mis compañeros me pregunten porque nunca envejezco.

Y he dejado escapar algunos buenos amores, nunca nos dijimos adiós, ¿por miedo? quizás, nunca me he enamorado, pero lo he intentado con todas mis fuerzas.

Una vez ame tan intensamente, que rompí mis reglas y me quede durante 8 años en Buenos aires.

Donde conocí por primera vez a Ela, la primera mujer que llamo mi atención en mis 90 años, ella era la chica más hermosa de todo el instituto. Y aunque pasaron muchos meses para que ella llamara mi atención, me atrapo por completo con la transparencia de su alma. La conocí un día después de que ella cumpliera 16 años, en un club en pilar. Me había ido a la parte de atrás del restaurant a fumar un cigarro, y ella había llegado hablando sola, se asustó cuando me vio, pero no le importo, ella le hacia un reclamo a Dios.

Me dio mucha risa, quise decirle que Dios no existe, pero cada quien con su creencia.

Aunque para ser honesta, a esta altura de mi vida, yo no creía en nada.

Duramos 8 años en una relación, fue mi primera vez, y yo fui la suya. Con una mujer claro, a los 20 años Ela se desarrolló de una manera increíble, su voz era muy gruesa, su cuerpo había cambiado, y seguía siendo la mujer más perfecta que mis ojos hayan visto alguna vez. Ella solía bromear con que yo en las noches me iba a dormir en la nevera, porque mi rostro nunca cambiaba, cero ojeras, cero arnes, cero cicatrices. Cuando cumplió 25 años ya era toda una mujer, incluso hablaba de que quería ser madre. ¡Yo no! Eso me aterra, me aterra dar a luz a un ser como yo, 125 años tengo, y aun no sé lo que soy con exactitud. Una vez pensé que era vampiro, pero no tenia deseos de sangre.

Aun sigo en la búsqueda de personas como yo.

De alguien que pueda explicarme lo que en realidad soy.

Supongo que me llevara algunos años más.

Para resumir, Ela le pego la típica pubertad, se veía muy mayor a mi lado, y aunque me dolió lo que le hice, fue necesario. En su cumpleaños 25, me encontró follando en la sala de su casa con su mejor amigo.

¡Lo se! Una mierda.

Pero ella me tenía que odiar.

Nunca había conocido a alguien tan insistente como ella, que luchaba por todo lo que su corazón dictara. Y muy en el fondo sabía que Ela estaba enamorada de mí, ella me buscaría hasta el fin del mundo si fuera posible.

Esa madrugada me cole en su habitación, y le pedí disculpas a través de una carta.

Lo siento mucho, espero me puedas perdonar.

¡Te amo!

H.

Fueron solo 60 minutos los que pasaron para dejar todo atrás, fui al aeropuerto y compré un ticket a mi próximo destino.

Grecia.

7 años han pasado, y mis sueños con esta persona cada vez han sido más intensos.

No he estado nunca más en una relación en serio. Me he divertido con algunos chicos, y cuando estoy aburrida con mi compañera de piso Cassandra.

Quisiera saber porque sueño con él o ella, porque me despierto con el corazón acelerado, porque siento cosas extrañas mientras duermo, y porque siento la necesidad de encontrarle.

¿Quién eres?

¿Qué quieres de mí?

Hace 7 años que quieres decirme algo.

Pero siempre que me acerco a ti en mis sueños, me despierto llorando.

¿Por qué me dueles tanto?

Desde el día 1 que llegue a Grecia, te he llorado tanto.

Por favor, déjame en paz.

Porque creo que me duele amarte.

— ¿Hope? — Cassandra entra en mi habitación con desayuno y con cara de preocupación—¿Estas bien? — Pregunta angustiada.

— ¿Por qué no debería estarlo?

— Es que... Sueles gritar todas las mañanas, y cada vez es peor, es como si te clavaran una daga en el corazón, escucha, tuve que grabarlo con mi teléfono.

Ella reproduce el audio, y me encuentro sorprendida.

Incluso me doy un poco de miedo.

¿Cuántos días llevo gritando así?

¿Quizás lo he hecho toda mi vida y Cassandra ha sido la única valiente en contarme?

Definitivamente, seas quien sea, debo encontrarte.