"El juguete de Rea"
Todos en el olimpo se habían enterado de mi relación con Hope, todos las llamaban mi juguete sexual.
Nadie estaba de acuerdo con mi relación, pues no era ético.
Ambas eramos mujeres.
Solía ignorarlos porque muchas veces vi a Ares y a Hefesto compartir la misma habitación, a veces solia ver a hombres hipnotizados caminar por el templo, sabía que eso era obra de los Dioses, pero jamás me atreví a indagar.
Odiaba la hipocresía.
Pero tenía miedo de Zeus.
Zeus no estaría de acuerdo de mi relación.
Sin embargo escucharlo hablar de la relacion de Erebo con Nix me parecía la cosa mas jodida del mundo.
¿Como es posible que se queje de esos dos, pero quiere casar a sus hijos?
—¿Irónico? ¿No te parece padre? ¿Te parece raro que Nix se casó con Erebo, pero te parece normal que yo me case con Apolo?
—Lo tuyo y Apolo está destinado a ser. Deja de fastidiar ya con ese tema, ¿De dónde vienes? ¿Ya dejaste a tu juguete en su casa?
—No es mi juguete, es mi novia.
Decidí retar a mi padre, al final era el rey del olimpo, no tardaría mucho en que los comentarios llegasen a el.
Delfo siempre me ha dado miedo, pero después de dictar la profecía, lo odie.
¿Quién se cree que es?
Por supuesto que esta manipulado por Apolo, me llene de rabia y cometí la estupidez de querer tomar el rayo de mi padre, pero había fallado. Había escrito sin querer el destino de mi pobre Hope.
*
—¿Por qué te desagrada Apolo?— Pregunto Artemisa
—¿Por qué tú eres la única que lo quiere?
—Literalmente es mi alma gemela.
—Yo siento lo mismo con Hope, supongo puedes entenderme.
—No me creeo en condición de juzgarte— Artemisa me miro con lastima y desapareció.
Necesito a mi madre.
Hera, mi madre es la Diosa más hermosa del olimpo, Hope suele decir que saque todo de ella porque de alguna manera Zeus no le parece nada atractivo.
—¿Pensando en voz alta, querida?— Mi madre interrumpió mis pensamientos y me abrazo. —¿Que te trae por aquí?
—¡Te extrañana! Solo quería verte.
—¿Es esa chica?
—¿Tú también sabes de ella?
Ella asintió y me dejo un casto beso en mi frente, mi madre era cariñosa conmigo, a comparación de mis hermanos con los cuales solía ser estricta.
—Mi padre estaba con Elfos—Le hice saber — Y dicto una profecia.
—¿Una profecía?— Pregunto llena de curiosidad.
—Si, que Apolo y yo tenemos que casarnos. ¿Tu estas de acuerdo?
—¡No! Apolo y Artemisa son la misma cara de Leto, no deseo que mis nietos tengan su cara— Expreso con cara de asco.
—¿No te molesta con que ame a una chica?
—Por supuesto que no cariño, te sorprenderías si algún día ves más allá de tu templo.
Se de que hablaba.
—Entonces... ¿Zeus esta molesto porqué no aceptaste casarte con Apolo?
—Dijo algo más... Como que yo traicionaré a mi padre por amor, y le daré de mi sangre a Hope.
—¡Termina con ella!— Exigio mi madre con preocupación sin dejarme terminar de hablar.
Espera...
Hace un momento estabas de acuerdo con mi relación, ¿Que pasa?
—No estoy de acuerdo con que te cases con Apolo, pero tampoco voy a permitir que por una humana nos extingamos, mi madre hizo todo lo imposible para que mi padre dejara de existir por eso mismo. Lo siento Rea, pero la profecía no se puede cumplir.
¡Oh vamos!
¿En serio?

ESTÁS LEYENDO
Eterna condena
RomanceHope creía ser una simple mortal, pero todo cambia cuando conoce a Rea, parece como una chica de 17 años pero en realidad tiene 124 años, pasó toda su vida huyendo cambiando de países para que nadie descubriera su secreto, hasta que un día regresó a...