Eterna condena

Rea

Quiero estudiar para aprender a quererte.

Llevaba esa frase que me habia dicho Cassandra esta mañana, no quiero que me estudie, muy en el fondo siento que ella es parte de mi familia, nunca había convivido con nadie para no dar explicaciones, y en mis salidas y misterios ella nunca se había atrevido a interrogarme.

Pero si te enamoras de mí, tendré que irme antes de tiempo Cassandra.

Mi lugar favorito en Grecia era acrópolis, de alguna forma me sentía como en mi hogar. Pero justamente hoy se sentía mucho más cálido.

Muy mi hogar definitivamente.

Era mayo, buena temporada para los turistas. Y mi amigo Acheron estaba feliz por tener trabajo.

—¿Como haces para entender español perfectamente? — Pregunta jalándose la oreja, conocí a Acheron hace 3 años, y sé que cuando lo hace es sinónimo de que está nervioso.

Simplemente me es fácil entender cualquier idioma.

Pero él no lo puede saber.

—Antes de venir acá, viví 10 años en argentina. Tuve que aprender a hablarlo si o si.

— ¿Dónde es que naciste tu?

Mierda.

Olvidé que país que le dije.

—¿Por qué me preguntas algo que ya sabes Ach?— Me hago la indignada, y me alejo de él.

—¿Vas a hablar con Tommy esta noche? — Niego, ni siquiera lo quiero ver, nunca más, seria genial — Le rompiste el corazón Hope, tienes que solucionarlo, porque se la pasa todas las noches escuchando Ultimo, y ya aprendí italiano en los últimos cinco días.

—Lo superara. ¿Lo bueno de todo esto? Ultimo es un gran cantante, y tiene buenas letras. A que despertó tu curiosidad y le buscaste la traducción.

—La verdad es que: Solo,me atrapo. A veces me siento así.

Lo miro con cara de preocupación, pero me hace saber que está bien, no quiero que mis amigos estén mal, y si puedo hacer algo, soy capaz de sacrificarme, quise interrogarlo, pero llego el bus con los turistas.

Nunca me había comprometido a ayudar a Acheron con trabajo, pero hoy era una excepción.

110 personas de España venían a conocer Acrópolis.

Y estábamos 101% seguros que algunos de ellos no hablarían inglés. Mucho menos griego.

—Ya me aburri— Le hago saber en un susurro.

— Vamos Hope, nunca te pido nada.

— ¿Quieres que recorra este lugar que me sé de memoria con 110 españoles, y les hable sobre historias que no son de verdad, y todo por un Pastitsio a lo Ach?

—¿Me estas cobrando el favor disimuladamente Hope?

Me rio a carcajada y me acerco a los turistas.

—Buenos días, bienvenidos a Acrópolis, mi nombre es Hope, y hoy seré su guía.

Una pareja de ancianos me ofrece la mano, y yo con gusto la tomo.

—¿Hace tanto calor aquí o es mi imaginación? — Dice una voz en el fondo.

Trato de ignorarla, porque apenas acaba de empezar el día, iba a estar durante 5 horas seguidas escuchando solo quejas.

Veo a Acheron con una sonrisa falsa, pero que le deja en claro que le voy a matar apenas pueda.

—El primer recorrido será a el Partenón, para quienes no saben el Partenón se construyó como un templo, dedicado a la diosa Atenea, quien fue la patrona de Atenas.

—¿Quien asegura que fue así? — Dice la voz irritante nuevamente, esta vez me atreví a buscarla con la mirada, porque, aunque ella tuviera razón la iba a callar.

Pero entonces la vi.

La voz irritante le pertenecía a una chica.

La persona más hermosa que mis ojos hayan visto en 125 años de vida.

Mi corazón no dejaba de latir.

Y mis ganas de salir a abrazarla eran inmensas.

Necesitaba aferrarme a ella como nada en mi vida.

Llevaba un moño alto, y hacía que su cabello negro luzca, le llegaba hasta la cintura. E imaginarla con el cabello suelto removía todo en mí.

Sus cachetes estaban llenos de pecas.

Sus labios eran gruesos, y yo moría por besarla.

Sus ojos eran marrones, como la miel.

Me podría perder ahí durante horas.

—Hope— Acheron interrumpe y se acerca a mi— ¿Puedes disimular? No has parado de babear por esa chica.

—¿Que dices? —Entro en sí, y me doy cuenta de que todos me han estado observando.

¿Por cuánto tiempo?

Genial, primera vez en mi vida que alguien me hace perder la noción del tiempo.

Veo a la chica sonreír, y carraspeo.

—Como les decía, la estructura inicial les llevo 9 años. Sin embargo, les llevo 6 años más en hacerse algunos arreglos, evidentemente esta estructura ha sido reutilizada desde sus inicios.

Mientras hacemos el camino para que todos se hagan fotos, busco a la chica.

Ella, está observándome.

Y mi corazón bombardea sangre como nunca.

¿Qué está haciendo conmigo?

¿Por qué me siento así?

Ella es magnética.

Me siento atraída hacia ella como una estúpida polilla.

Decido ser valiente y acércame, y ella sonríe.

—Hasta que por fin decides acercarte a mi Hope.— ¿Como mierda sabe mi nombre? — Hope, está escrito justo encima de tu pecho izquierdo. — Después de tal Show que montaste, pensé que no tendrías el valor de acercarte a mí.

—¿Que hablas? — Mi voz es tímida esta vez.

—¿En serio? Te quedaste durante 10 minutos en silencio mirándome, ¿Te deslumbre Hope?

A la mierda.

—¡Esta loca! —Afirmo, estoy a 5 metros de ella más o menos, peso siento que estoy a tan solo un centímetro.

—¿Sabes hablar griego? —Pregunta una chica acercándose a ella.

Y ahora es que caigo en cuenta que desde que me acerque hemos estado hablando griego.

—¡Si! Mi papa nació aquí.

La chica la toma de la mano, y le pide tomarse una foto juntas.

Y aquí estoy yo, encontrándome celosa.

Celosa por primera vez en mi vida.

—Eres la hostia Willow, cada día me sorprendo más de ti, no decepcionas tia. —La chica le deja un casto beso y se aleja de ella y va a por sus otras amigas.

—¿Willow? — ¿Ese nombre es común en España? Dudo.

—Mi verdadero nombre es mas chulo— Esta vez esta hablando en español. —Un placer Hope, yo soy Rea— Estira su mano y al tocarme el tiempo de detiene.

R E A.