—Tomlinson y Styles por favor guarden silencio—mencionó la maestra sin necesidad de voltear a verlos, pero escuchándolos desde su escritorio.
Ambos voltearon a verse y rieron en voz baja, continuando con sus apuntes.
El día anterior prácticamente se la habían pasado toda la tarde platicando entre ellos, riendo al mismo tiempo que comían pizza y contando algunas anécdotas del pasado mientras otro tema de conversación surgía.
Parecía que eran amigos de toda la vida cuando apenas llevaban un mes entero de tratarse.
No iba a negarlo esta vez, pero Louis es una gran persona que solo te das cuenta de eso si realmente lo llegas a conocer a fondo o al menos él te deja que lo hagas. Le sorprendió mucho que el castaño lo haya dejado después de cómo lo trató al principio. ¿Los demás también conocían esta parte de Louis o sólo la que él solía tener de él? Se preguntaba Harry.
Cada día empezó a esperar con ansias las clases que compartía con Louis y los días que no tenía entrenamiento para poder hablar con él. Le daba cada vez más seguridad estar a su lado, aunque casi siempre lo hacía cuando estaban a solas. Le incomodaba aún sus otros amigos, además de que no quería que empezaran a hacer rumores.
Pues tan solo paso esa semana, Louis empezó a ser más... expresivo físicamente, en el sentido que cada que se saludaban un abrazo se atravesaba en este. Al principio lo tomó por sorpresa, pero después lo empezó a sentir agradable, cálido. Ya lo estaba empezando a considerar un amigo.
Eso desde el punto de vista de Harry, Louis estaba más que encantado cada vez más con el ojiverde. La única palabra con la que lo podía asociar era tierno y perfecto.
Por fin había logrado acercarse más al chico y que este le tuviera más confianza, estaba yendo lento en caso de que las cosas no pidieran funcionar, pero el hecho de tener su amistad ya estaba haciendo un avance para él.
Los próximos días intentaría seguir conviviendo con él más seguido. No iba a mentir que había sido flechazo desde hace tiempo por el encanto Styles, como le solía decir Zayn para molestarlo cada vez que hablaban de él, lo cual era algo cotidiano.
El jueves de la siguiente semana que empezaron los abrazos, como todos esos días tenía planes de irse a casa temprano y terminar unas tareas que tenía pendiente, sin embargo, su plan se vio interrumpido cuando iba saliendo de su salón y apenas iba por los pasillos cuando se encuentra a Louis.
—Hazz—escuchó a lo lejos, se dio la vuelta y vio al oijiazul trotando hacia él.
—Louis, creí que ya estarías en tu entrenamiento—mencionó cuando el ojiazul estuvo cerca.
—Sí, pero el entrenador va a tardar unos minutos en llegar.
—De acuerdo y, ¿qué paso? —Preguntó acomodándose la mochila.
—Estaba pensando, ¿no quieres acompañarme a mi entrenamiento de hoy?, solo a observar claro, como apoyo moral, ya sabes de amigo a amigo—rio nervioso rascando su nuca.
ESTÁS LEYENDO
This is us, Lou and Hazza
FanfictionHarry Styles, un joven de 18 años apasionado por la música; muy reservado y tímido cuando se trata de los demás, pero muy expresivo y divertido con sus dos mejores amigos, Taylor y Niall, quienes son los únicos que saben acerca de su debilidad por l...