s e v e n t e e n

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Un par de semanas habían pasado desde que había adquirido mi nuevo negocio, el cual estaba comenzando a tomar forma cada vez más rápido. Y cada vez comenzaba a tener más personas a mi cargo, lo que era más agradable que seguir ordenes como idiota.

Las cosas con Claire habían estado complicadas, gracias a mi nuevo trabajo ella pensaba que estaba engañándola. No la culpaba, probablemente era su punzada que le estaba dado una respuesta equivocada, si le estaba ocultado algo, pero jamás la engañaría.

Ahora estábamos preparándonos para la boda de mi padre, en la que me tendría sonriendo frente a todo el mundo como el hijo perfecto, mientras que cuando estábamos solos, no podía pasar más de dos segundos sin decirme que seguía siendo un adicto. Mientras mi nueva madrastra me consideraba un puto violador. Me había sacado la lotería con ese lado de la familia.

–Puta corbata. –Susurre.

–Te ves adorable. –Ella sonrió y la ajusto. –Creo que me están dando ganas de casarme contigo. –Sonreí.

–¿Para qué quieres casarte conmigo?.

–Para que digas prometo serte fiel en la prosperidad y en la adversidad, en la salud y en la enfermedad, y así amarte y respetarte todos los días de mi vida.

–No tengo que casarme para prometer algo como eso. –Levanto su ceja y la besé.

–¿Crees que nos perdimos la boda de Christian y Alessa?. –Negué. –¿Seguro?.

–Christian no se casaría sin mí a su lado, es como si no tuviera a su padre. –Ella me miró fijo por un par de segundos. –¿Qué?

–Hay que me estas ocultando. –Rodé los ojos y asintió divertida. –Es cierto, siento la punzada, hay algo que no quieres decirme Drew.

–¿Qué no te podría decir?. –Encendí un cigarrillo. –Te dije que trabajo como seguridad del VIP en el club.

–¿Por qué alguien como tu trabajaría como seguridad en un club?.

–Mmmm.. Quizás porque es lo que llevo haciendo desde hace más de diez años.

–Me estas ocultando algo. –Arrugo su nariz. –Te voy a descubrir Drew y te voy a cortar las pelotas.

Últimamente se la pasaba diciéndome Drew, para ella era como si me estuviera amenazando, mientras intentaba controlarme, algunas veces funcionaba. Pero la mayor parte del tiempo me ponía extremadamente duro.

–Apaga eso y vayan a sus lugares, por favor. –Jeremy se acercó. –Chelsea está en camino, no quiero que hagan el ridículo.

–A la orden. –Tome la mano de Claire y entramos a la iglesia. –Ella me mira como si fuera basura, Jeremy no debería casarse con ella. –Ella abrió su pequeño bolsito. De él saco una pequeña botella de whisky. –¿Por qué no me dijiste que tenías eso?. –Bebí un sorbo.

–Mamá oculto todas las botellas de casa, me descubrió bebiendo vodka hace un par de noches, cree que me dará un coma etílico. –Bebió un enorme sobo y se la quite.

–¿Te la robaste del club?.

–Si, debería durar toda la ceremonia. –Bebi un sorbo. –Creo que me veo ridícula. –Miro el vestido. –Entiendo que tu debas estar junto a tu padre, pero ¿Yo como dama de honor?.

–No creo que deban casarse. –Bebí un sorbo. –¿Qué tal si digo que me opongo?.

–Te matarían. –Suspiro. –¿No tienes drogas?.

–¿Qué te hace pensar que tendría drogas? –Hizo una mueca. –No, mamá reviso todos mis bolsillos antes de venir.

–Un poco de hierba nos haría bien. –Di golpecitos en mi bolsillo y me miro divertida. –Hijo de puta.

Jesse [+18] | JUSTIN BIEBERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora