t w e n t y - t w o

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Al despertar al siguiente día, me encuentre a Claire durmiendo en mis brazos, estaba decidido a dejarla dormir un par de horas más. Me había despertado varias veces por sus pesadillas, por suerte no se había despertado. Con un suspiro de satisfacción, me estiro y me levanto de la cama, listo para enfrentar el nuevo día.

Bajo las escaleras y el aroma tentador del desayuno me guía hacia la cocina. Al entrar, me encuentro con una escena que me llena de alegría: Alessa, está de pie junto a la mesa, preparando café con una sonrisa en su rostro.

Nuestros ojos se encuentran en un momento de sorpresa mutua, y una sonrisa se extiende en mi rostro al reconocerla. Corro hacia ella y la abrazo con fuerza, sintiendo una oleada de emoción y afecto mientras nos reencontramos después de tanto tiempo.

–Justin. –Ella corresponde a mi abrazo con entusiasmo, su risa llenando la habitación mientras nos separamos para mirarnos el uno al otro. –¿Claire vino contigo?. –Asentí. –Christian me dijo todo anoche. –Me tomó de las mejillas. –¿Están bien?.

–Ahora lo estamos.

–Nunca debieron haberse ido, era demasiado peligroso estar con Bob. ¿Claire esta despierta? Tengo que verla...

–Quiero que duerma por un par de horas más, tuvo un día duro. –Suspiro y luego asintió.

–Supongo que estará hambrienta cuando despierte. –Apuntó la mesa. –Tu debes estar hambriento, mamá vendrá a medio día, amará a Claire.

–Buenos días familia. –Christian entro a la cocina. Rodeo la cintura de Alessa y beso su mejilla. –Buenos días.

–Buenos días. –Sonreí. Comencé a comer y ellos comenzaron a besarse. –Eh, eh, eh, estoy comiendo.

–Tuve que aguantarlos a ti y a Claire en su peor momento hormonal.

–Quiero saber de ese momento.

–Créeme que no quieres, bellisima. –Ella miro a Christian.

–¿Se lo dijiste?.

–Estaba pensando a que tú lo hicieras. –Christian sonrió.

–¿Qué pasa?.

–Nos casamos en cuatro semanas. –Levante mis cejas y sonreí. –Tengo que llevar a Claire a buscar un vestido.

–Felicidades. ¿Chiara sabe que se van a casar?

–Le dijimos antes de que Christian volviera a América. Alguien de la mansión le dijo lo que querían hacerle a Claire, papá lo envió a buscarlos, pero...

–Pero se jodio todo.

–Buenos días. –Luca entro a la cocina. Tomo una taza de café y me miro. –Papá quiere hablar contigo ahora.

–¿Ahora? Primero tiene que desayunar.

–Es importante Alessa.

–Vuelvo enseguida. –Le guiñe un ojo. Camine hasta la oficina de Salvatore, el estaba sentado en su escritorio fumando un puro mientras miraba por la ventana. –Salvatore.

–Papa. –Sonreí.

–Papa, buenos días. –Me senté frente a él. –¿Querías hablar conmigo?.

–Tenemos mucho que hablar Justin. –El me miro. –¿Cómo estás?.

–¿Confundido? No esperaba a que alguien me contactara para que me hiciera cargo del club, no podía hablar contigo ni con Christian.

–El club era algo seguro para ti, tendrías dinero, hombres a tu cargo, guardias para Claire. –Asentí. –La policía podía estar escuchando tus llamadas, cooperaste con ellos, pero saben que podías tener contacto con nosotros.

Jesse [+18] | JUSTIN BIEBERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora