Lazos [TanIno]

9

Después de aquel golpe que sin querer se había dado con el omega, el pobre se había quedado inconsciente. Se asusto por uno segundos al verlo con los ojos en blanco y babeando, pero recordó que era algo que siempre hacia Inosuke luego de que sin querer le daba uno de sus icónicos cabezazos.

Lo dejo dormir, o lo que fuera que le estaba pasando. Necesitaba unos minutos para tranquilizarse a si mismo, pensando en porque creyó que subirse encima del chico para "despertarlo" seria una grandísima idea. ¿El calor estaba derritiendo su cerebro? ¿Exponerse a las feromonas de un omega también lo estaban afectando? 

Lo mas obvio es que si. Pero no podía aceptarlo, no quería. Cerro sus ojos frustrado, odiaba no poder controlar bien a su alfa por lo bueno que llegaba a ser su olfato, captaba tan bien todo inconscientemente que a veces su cuerpo actuaba sin que se diera cuenta. Con los años había podido controlarlo, incluso durante todo el tiempo que llevaba conociendo a Inosuke nunca había pasado algo así...¿entonces por que ahora...?

- ¡Kentaro imbécil! ¡Algún día de estos me va a dar un derrame por culpa de tu estúpida frente! -Al acercase al sillón recibió de entrada un cojin en la cara y una patada en el estomago que lo echo para atrás - ¡te voy a poner una orden de restricción! ¡estoy cansado de que siempre pase lo mismo! - el chico de ojos verdes tocaba el enorme chichón que tenia, viendo con odio al tipo que tocaba con dolor su estomago.

- lo...lo siento - Intentaba recuperar aire, los golpes de Inosuke no eran precisamente lo mas suaves - ¿te duele? -

Silencio, unos cuantos segundos de hermoso silencio.

- ¿¡ERES IDIOTA?! - 

No supo de donde, pero le había estrellado un zapato en la cara, 

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Había sido una pregunta muy estúpida, lo tenia claro. Aun así, no creía que fuera motivo para que no le hablara, llevaba una hora sin emitir ni un sonido. Solo estaba ahí, sentado y cruzado de brazos, haciendo pucheros.

¿Era acaso por las feromonas? 

Ya tenia claro que sus cambios de humor serian muy duros en esos días, ¿pero tan rápido?..

- Inosu- -

- no me hables - no lo dejo continuar, siguiendo con su berrinche. 

Realmente, y por mucho que quisiera, no podía reclamarle al omega, no era culpa de el sentirse así, seguramente y hasta el mismo le estaba haciendo mas daño con sus propias feromonas aunque tratara de minimizarlas. Pero no podía dejarlo solo, no era una opción.

- ¿por qué no tienes amigos betas Inosuke? -

- porque solo un par de mongolos son capaces de aguantarme - ignorando su respuesta anterior, le respondió al chico - y también...espera, ¿y a que viene esa pregunta? - por fin le miro, con el seño fruncido y la boca torcida, pero al fin le estaba mirando.

- nada... - si fuera un beta, no seria tan complicada su situación.

No dijo ni pregunto nada mas, solo se acerco al chico en el sillón y se sentó en el borde, muy cerca de él. Levanto el cabello que cubría su herida y la observo de cerca, sin prestar atención a las mejillas rojas de su compañero.

- se ve mejor...¿aun duele mucho? - 

El omega brinco al sentir como bajaba por su mejilla y tomaba su barbilla, levantando su rostro para observar mejor. 

- T-Tanjirou... - tembló, sus manos tomaron la muñeca contraria y empujo para alejarla de si mismo - no hagas eso... - agacho la cabeza ocultando su mirada del alfa, no era capaz de mirarlo y tampoco quería que le siguiera mirando.

Ahora se sentía débil, vulnerable. Odiaba sentirse así, como su corazón latía con fuerza dentro de su pecho, pero la sensación no era buena, sentía como se le aguaban los ojos. Se mordió el labio en un intento por sopórtalo y suspiro, levantándose e ignorando al alfa que lo miraba sin entender. 

- ¿a donde vas? -

- tengo hambre, voy por comida - 

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Bueno, a lo mejor sus cambios de humor si estaban bastantes descontrolados. La comida fue como un placebo y ahora se sentía en el cielo, olvidando casi por completo que estuvo a punto de llorar por una simple caricia. 

Tanjirou lo miraba sin decir nada, tampoco comía porque ya lo había hecho. Solo estaba ahí, grabándose cada expresión y cada movimiento del omega. Se sentía aliviado de que por fin llenara su estomago con algo, creyó que con lo que había pasado antes se volvería encerrar en su habitación hasta que colapsara de nuevo.

Sonrió tranquilo, disfrutando de la vista inconscientemente.

- "que lindo..." -

Tan distraído estaba, que ni siquiera se dio cuenta de que aquello se le había filtrado por la boca. El pelinegro dejo de comer y lo miro sin poder creérselo, no quería emocionarse, pero era casi imposible. Se le iluminaron los ojos con un par de estrellas y sintió todo sus cuerpo caliente. 

No fue después de unos segundos que se dio cuenta. 

- Yo... -

- ¿Te parezco lindo? -

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aaah, que capitulo tan flojo.

Pero bueno, sentía la presión de actualizar después de mucho. 

Quiero que terminen bien estos tipos 😔