O14

5.8K 352 105
                                    

Sábado 8 de octubre, 2022



Victoria

La semana había pasado volando. Por suerte Leandro ya no volvió a molestarme así que no supe nada de él en estos días si no fuera por verlo en Instagram que subía alguna que otra historia de él entrenando. Pero nada más que eso, y me parece perfecto.

El sábado había llegado y ya sé escucha un poco la música de la casa de Enzo. Estoy sentada en frente del espejo de cuerpo entero haciendome el delineado y me frustro cuando no me sale del ojo izquierdo. De repente escucho mi celular y me levanto para tomarlo ya que estaba en la cama. Era una llamada de Kiara, enseguida atiendo.

—Buenas — digo alegremente — ¿Qué pasó? — camino denuevo hacia el espejo y vuelvo a mi posición anterior.

—Vicky, perdóname pero no voy a poder ir al final — escucho que dice del otro lado y suelto un suspiro. Lo que me faltaba — Me peleé con mi mamá y ahora no me deja salir.

—Uff que cagada. Bueno no pasa nada, otro día será — le digo desanimada. No me gustaba la idea de ir sola a la joda, por eso la había llamado a ella. Escucho que ella suelta un suspiro igual de desanimada.

—Te juro que quería ir, pero mi mamá...

—No te preocupes amiga, enserio. ¿Nos vemos el lunes?

—Si, nos vemos.

—Chau — digo cortando la llamada.

Desanimada, me saco las botas y me tiro en la cama. Me había puesto un top con mangas largas de color negra con rayas blancas, un jean que me iba pegado al cuerpo y unas botas negras con un poco de tacón. Ya me había hecho el delineado, faltaba el labial y plancharme el pelo, pero ya fue, no voy a ir a la fiesta, no sin Kiara. Seguro me voy a re aburrir porque no conozco a nadie.

Me levanto para cambiarme denuevo por mi pijama, escucho una voz que viene de la ventana de enfrente. Claramente conozco esa voz.

—Que onda Colo, ¿Te estás poniendo linda para venir? — dice Enzo, está apoyado sobre la ventana y tiene un vaso de color rojo en su mano.

—¿No tenes otra cosa mejor que hacer que acosarme? — le pregunto mirándolo y él se ríe.

—Claro que si tengo, solo estoy esperando a que te prepares y vengas.

—Bueno vas a tener que esperar sentado entonces, porque no voy a ir.

Veo que frunce sus cejas.

—¿Por?

—Mi amiga no va a venir, y no quiero ir sola — digo y él rueda los ojos.

—Venite igual, hay mucha gente acá.

Lo miro con los ojos entrecerrados.

—¿Con borrachos desconocidos, música, alcohol y vos? No gracias — digo incrédula. Niega con la cabeza.

—Bueno si cambias de opinión, la puerta va a estar abierta para vos. Apuesto a que te vas a divertir, créeme — me dice antes de alejarse de la ventana e irse, desapareciendo de mi vista.

Me pongo a pensar un ratito lo que me dijo, no me gusta la idea de ir sola a la joda sin conocer a nadie. Pero tal vez ir un rato a ver qué onda no estaría mal...





[>>>]







Enzo

Después de molestar un rato a la vecina, que justo la agarré casi cambiándose, bajo a la planta baja donde era la joda. Ya hay una cantidad de gente que por ahora solo están tomando, capaz mas tarde cuando ya estén entonados se empiezan a descontrolar. Llego a la cocina donde están Rodrigo, Emiliano, El Papu, Nico y frunzo el ceño al verlo a Leandro también, es raro verlo acá ya que no era de ir a jodas.

Vecinos | Enzo Fernández Donde viven las historias. Descúbrelo ahora