Yacía cabizbaja, limpiando su labio roto.
Su vida es una completa mierda, está segura de eso.
Nunca había pensado que su vida sería una completa mierda, maldecia a su esposo.
Amarrada a alguien que siempre la dañó.
La puerta de la habitación fue abierta, dándose a ver a JaeJoon, su rostro completamente serio.
—Parece que tu amiguita regresó—Dijo el quitándose el abrigo.
Haneul se hizo pequeña en su lugar, queriendo huir.
—Si no estuvieras casada conmigo creeme que estarías muerta, deberías de agradecerme y no hacerte la víctima—Dijo el, mirándola con fulmino.
—Preferiría estar muerta—Dijo ella, sintiendo sus ojos lagrimear.
JaeJoon volteó su mirar, con coraje se acercó a ella, agarrando con fuerza los castaños cabellos de su esposa.
—¿Te crees fuerte, eh?—Dijo el, mirándola con desprecio—No me quieras sacar de mis casillas, creeme que estoy teniendo un pésimo día como para matarte a golpes—Dijo soltandola con fuerza.
Haneul soltó un sollozo, abrazándose.
—¿Quieres estar muerta? Uno de estos días te asesinaré—Dijo señalandola.
Haneul se arrepentia de haber nacido, se arrepentia de todo.
—Quiero el divorcio, JaeJoon—Dijo ella, mirándolo con temor.
El volvió a mirarla, aunque este lo negase si siente enamoramiento hacia Haneul.
La amaba, pero sentía una gran vergüenza al sentir aquello. Pero, una persona que ama no daña, la persona que te ama nunca te haría daño.
—No aguanto esto, JaeJoon. Si nos divorciamos aún así verás a Soomin—Dijo ella.
JaeJoon negó, caminando hacia ella. Agarrando con fuerza las mejillas de ella, haciendo que ponga su mirada en el.
—No quiero que mi hija tenga unos padres divorciados, no le haré daño a mi hija—Dijo soltando con brusquedad sus mejillas.
Ella negó—Pero sí me haces daño a mi, no puedo aguantar esto. ¿Crees que Soomin no se percata de que me maltratas? No puedo seguir aguantando esto—Dijo Haneul, levantándose de su asiento.
—Si no lo firmas juro que le hablaré a la policía, no me importa si me asesinas por ello—Dijo quitándose las lágrimas.
El alzó una ceja, viéndola con una sonrisa con burla—¿Quieres el divorcio?—Dijo soltando una risa amarga.
Haneul asintió.
—Bien, te lo daré—Dijo, sabiendo que seria su perdición—Tampoco podía aguantar una vida contigo—Dijo.
—No sabes el asco que me das, la vergüenza que diariamente das—Dijo—Serás la divorciada, no conseguirás a nadie mejor que yo—Volvió a decir.
Soomin escuchaba todo, un odio agrandandose en su interior.
Su madre había sufrido por la culpa de su padre.
—No me importa el que dirán, solo quiero el maldito divorcio—Dijo ella.
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La menor al escuchar las palabras de sus padres, levantó su mirar, sintiendo sus ojos lagrimear.
—Tu no querías a mamá—Dijo ella en un susurro audible.
El padre frunció el ceño, volteando a ver a su ahora ex esposa.
Ella bajó la mirada negando, dándole a entender que ella no había dicho nada.
—Dijiste que me protegerías de los mostruos, papá—Dijo la menor lagrimeando—Pero tu eres un mostruo, eres el que daña a mamá—Decía ahora sollozando.
El padre con la culpa carcomiendolo negó, queriendo abrazar a su pequeña pero esta se apartó.
—Tu eres una persona mala como me dijo el tío Myeongoh—Decía la menor limpiando sus lágrimas con sus manos.
El padre frunció el ceño, ¿acaso ese idiota le había dicho?
—Soomin, ve a tu habitación—Dijo el mayor, volteando ahora a ver a su ex esposa.
Ella negó acercándose a la menor.
—Y-Yo iré con ella—Dijo la madre, temblando.
JaeJoon se maldecia a sus adentros.
—Soomin, acata las órdenes que da papá—Dijo JaeJoon.
La menor Volteo a ver a su madre, esta soltaba pequeñas lágrimas.
El padre volvió a mirarla, con seriedad.
—Ve a ti habitación si no quieres que me enoje contigo—Dijo el.
La menor cabizbaja, sintiéndose culpable fue corriendo hacia su habitación.
JaeJoon volteó a ver a su ex esposa, esta yacía en una gran distancia, encorvada por el miedo.
—¿Crees que soy estúpido?—Dijo el, acercándose con lentitud a ella.
—¿Decirle eso a nuestra hija? Maldita perra, ganas de asesinarte no me faltan—Dijo el, lanzandole una fuerte cachetada a la más baja.
Ella soltó un sollozo.
—Recuerda que puedo hacer que seas un parásito más en este mundo, no eres nadie sin mi—Dijo el, besando con lentitud la mejilla de esta.
Ella negó, empujandolo con fuerza.
—Me das tanto asco—Decía ella sollozando—Juro que te haré pagar por todo el daño que me causaste, te haré pagar todo el daño—Decía ella entre sollozos.
El la agarró con fuerza de los cabellos, pegando con fuerza su frente con la de ella.
—Vamos, hazlo. Qué harás cuando no duermas en casa—Dijo el, agarrandola de los cabellos.
Los gritos de ella se hicieron presentes al ser lanzada con fuerza al suelo, siendo golpeada.
La menor salió de su habitación, asustada.
Vio cómo su padre sacaba a su madre de la casa, a rastras.
—¡Mamá!—Gritó ella, corriendo hacia la ex pareja.
JaeJoon volteó su mirar, viendo cómo la menor abrazaba a su madre.
—No me alejes de mamá, papi; por favor—Decía la menor sollozando.
El padre apretó los puños, conteniéndose de cualquier locura que quiera cometer.
—Me iré cariño, pero vendré a verte—Decía la madre, levantó su mirar hacia JaeJoon—No olvides tener miedo de el, porque es un mostruo—Ella eso quiso decir.
La mayor se levantó, poniendose serie estando al frente de JaeJoon.
—Ve un rato a la cocina, cariño—Decía el padre.
La menor miró a la madre, esta dio un asentimiento.
Corriendo fue hacia la cocina, poniendose de rodillas rezando para que no siguieran peleando.
—Juro que si me entero que le pusiste un dedo encima a mi hija, no dudes en que te asesinaré—Dijo ella, apretando los puños.
—No, no. Nunca le pondría un dedo encima a mi hija, y tu siempre estate alerta porque puedo hacerte dejar este mundo. No me amenaces porque sabes que vas a perder—Dijo el, sonriendo con falsedad.
La mayor sonrió también con falsedad, retirándose del lugar.
El mayor sentía ese vacío, pero el odio crecía, el odio hacia ella crecía tanto como el odio que siente ella hacia el.
