Caminaba con empoderacion, sonriendo coquetamente a cualquier chico guapo que veía, pero no por eso quería decir que no tenía su juego bajo la manga.
Vio en un lugar lujoso, la pareja.
Esa maldita no podía ser feliz, no merecía la felicidad que ella siempre debió tener.
—¿Ahora quien atrapa a quien?—Decía en un susurro audible, viendo cómo la maldita perra de YeoJin sonreía viendo a su familia.
Tomando una fotografía, enviandole el mensaje a DongEun.
Caminó del lado contrario, moviendo sus caderas mientras imaginaba como sería ver morir a las personas que la dañaron.
Pronto, muy pronto —Decía a sus adentros.
Vio la tienda de ropa de su ex pareja, soltando una sonrisa traviesa. Vio cómo el hablaba por celular distraído, ¿que acaso no tiene algo mejor que hacer?
Las clientas veían los zapatos encantadas.
Sacó la rana de su bolso, es algo insignificante, no se consideraba una vengaza, simplemente quería divertirse. Ciertamente ella tampoco tenía algo mejor que hacer, simplemente pensando en la vengaza.
Vio como la rana saltando se adentró a la tienda, sonriendo con malicia se marchó.
Segundos después gritos se escucharon, viendo cómo las clientas salían completamente asustadas, gritando.
Se marchó del lugar, sintiendo la vibracion de su celular.
Vio que su pequeña hija la estaba llamando, con rapidez contestó.
—¿Mami? Papá se fue, ¿por qué no me llevas contigo?—Decía la menor.
Haneul sabía que sería una distracción si la llevaba con ella, claro, se la llevaría pero no en ese momento.
—Pronto te llevaré conmigo, cariño. Mientras, estate atenta a cualquier movimiento de tu padre. No confíes en lo que te diga, no le digas nada de esto a tu padre—Dijo ella.
La menor acató lo que la madre dijo, colgando al momento.
Soltando un suspiro con pesadez.
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Vio como Sara salía del lugar artístico, caminando distraídamente.
La siguió, chocando intensionalmente haciendo que esta cayera al suelo.
Sonríendo con malicia, viendo cómo está volteaba, al instante poniendo una cara de fulmino.
—Lo lamento—Dijo Haneul fingiendo tristeza.
—¿Te duele mucho?—Decía ahora soltando una sonrisa sarcástica.
Sara se levantó como pudo, empujando con fuerza a Haneul.
—¿Enserio te enojarás? Oye, fue un accidente—Dijo aún manteniendo su sonrisa.
Sara apretó sus puños.
—¿Quieres que le diga a JaeJoon que andas de perra, eh?—Dijo ella, soltando una sonrisa maliciosa.
Haneul soltó un suspiro, sacando de su bolso una paleta.
—¿Crees que me tocará un pelo?—Decía Haneul—Eres tan estúpida, podría asesinarlo, o incluso asesinarte—Decía lo último en un susurro audible.
Sara agarró con fuerza los cabellos de esta, haciendo presión. Haneul no soltó ningún quejido, simplemente reía con mucha gracia.
—¿Asesinarme? No sabes con quien estas tratando, maldita zorra. Si quiero puedo hundirte, no puedo esperar a que ruegues por el idiota de JaeJoon—Decía con burla.
Haneul sonreía con gracia.
Agarró con fuerza la muñeca de Sara, haciendo que esta soltara un quejido. Con su otra mano agarró la otra muñeca de Sara así deteniendola a cualquier agresión.
—¿Se te olvida que con el dinero de ese idiota ahora soy más grande que tú? Por dios, seamos realistas. Te podría destruir completamente, más contando tu preciado secreto—Dijo lo ultimo en un susurro.
Sara cerró su boca al escuchar lo último.
Haneul presionó con fuerza las muñecas de Sara, haciendo que esta soltara chillido haciendo que quisiera sacarse del agarre de Haneul.
—¿Podrás pintar?—Dijo doblando su muñeca haciendo que esta gritara—¿podrás drogarte?—Dijo lo último en un susurro con gracia.
Sara se tensó, sintiendo manos temblar.
—Cuida muy bien tus pasos, Sarita. Estaré siempre siguiendo tus pasos, no olvides que la que ganara será yo. No olvides que alguien literalmente podría apuñalarte la espalda—Dijo lo último sonríendo.
Haneul soltó con brusquedad las muñecas de Sara.
Haneul soltó una carcajada al ver el rostro de pánico de Sara.
—No olvides que podría conseguirme algo mejor que JaeJoon, algo así como... Do.. —Dijo, dando la inicial.
Sara sentía el pánico recorrer su cuerpo.
—Nos vemos pronto, linda. Por cierto, procura no fumar tanto, te vez asquerosa—Dijo lo último con burla.
Camino del lado contrario, metiéndose la paleta en su boca.
Habia ganado.
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Tomaba una taza de te mientras escuchaba hablar a Dong-eun, la escuchaba con atención. Pero, el maldito celular comenzó a sonar, asi sacándome de mi concentración.
Llamada entrante de Idiota:
Solté un sonoroso suspiro, agarrando mis cabellos con frustración. ¿Qué acaso ese maldito idiota no me podía dejar en paz?
--Ese imbécil me esta llamando, de seguro esa perra ya le fue de chismosa.- Dijo Haneul, susurrando con fastidio.
Dong-Eun pego su atención en Haneul.
--Contéstale, no te hará nada estando solamente en llamada.- Dijo Dong-eun.
Asentí en lo que dijo, claramente es verdad.
Llamada entrante de Idiota:
Sin dudarlo contesté.
--¿Qué carajos quieres?.- Dije con brusquedad tal luego de contestar.
--¿Qué carajos quiero? Maldita perra, ¿por que mierda estas hablándole de mi a esa otra perra, eh?.-Dijo con brusquedad.
Solté una carcajada.
--¿Qué tanto te dijo esa? Vamos, soy todo oídos.-Dije, queriendo reírme.
--Solo te advierto, Haneul. No juegues con fuego porque te puedes quemar. No provoques lo que no quieres que suceda, sabes que puedes aparecer muerta si asi lo quiero.- Dijo con rudeza.
Solto una sonorosa carcajada, golpeando levemente su pierna con mucha gracia.
--Que buen chiste, Jaejoon. Mejor en vez de estar pendiente de mi, cuida tu puesto de trabajo; es una incompetencia tener una rana en un trabajo.-Dije con burla.
El silencio se hizo presente.
--¿¡Fuiste tu, maldita zorra!?.-Grito con furia.
Esto si que es gracioso.
--Me dijeron, oh, otra cosa mas. Dile a tu perrita faldera que no eres mas mi esposo, en realidad nunca lo fuimos. No quiero que me líen con alguien incompetente.-Dije con burla.
--Lo hare, de mi no te libras. Cuida tus espaldas, Haneul.- Dijo lo ultimo para colgar.
Solté un sonoroso suspiro, ordenando mi cabello.
--Ganas no me faltan de asesinarlos.-Dije haciendo una mueca.
Dong.eun solto una maliciosa sonrisa, asintiendo levemente.
--Acabaran muertos si asi nos proponemos, si lo haces bien ellos acabaran muertos.-Dijo ella en un susurro audible.
Asenti levemente.
--Por cierto, el señor Ha si que es atractivo.-Dije mordiendo levemente mi labio.
