Capitulo 16

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Vanessa


Ya estoy lista.

Me puse un vestido de tirantes azul, y unas sandalias de tacón, mi pelo lo ando en una coleta alta.

Veo mi reflejo en el espejo y suspiró.

Cuando era más pequeña me sentía algo insegura con mi apariencia pero ahora me siento bien con la imagen que veo en el espejo.

El tenis y el ballet han hecho que mi cuerpo tenga buena figura.

-¿A dónde vas tan arreglada? -me pregunta mi madre en el marco de la puerta de mi habitación.

-Tengo una cita.

A ella le brillan los ojos de alegría.

-¿Con Thiago? -pregunta emocionada.

Le pongo mala cara.

-No.

Se le va el interés.

-Ah. ¿ Y entonces con quién?

-Con Erik.

-Mhm.

Es lo único que responde y yo pongo los ojos en blanco.

No entiendo porque la madre de Thiago y la mía tratan de que nosotros estemos juntos. Qué acaso no entienden que nos odiamos y nunca nos llevaremos bien.

-Pues cuídate y no regreses muy Tarde.

-Si.

Escuchamos la bocina de un auto, que seguro es Erik. Bajamos al primer piso y abro la puerta mi madre al verlo hace Disimuladamente una mueca de asco.

No pues que madura madre.

-Buenas tardes señora Brown.

-Buenas tardes Jefferson quiero que traigas a mi hija temprano no me fío de ti.

Abro mucho los ojos.

-Mamá -protesto.

Ella se encoje de hombros -¿Qué? Soy sincera.

Erik se ríe.

-No se preocupe señora Brown traeré a su hija temprano.

Ella le da una mirada desconfiada.

-Más te vale.

Nos despedimos de ella y subimos al auto los primeros minutos son silenciosos pero no puedo aguantar más sin preguntar a donde me lleva.

-¿A dónde vamos? -le pregunto al tiempo que volteo a verlo.

Él me da una mirada rápida y me sonríe.

-Primero iremos a comprar un helado y después iremos a otro lugar.

-Ah.

Otra vez un silencio incómodo.

Llegamos a la heladería y él entra primero yo iba a entrar al mismo tiempo pero la puerta se cerró de golpe, así que tuve que volver a abrirla.

¿Ni siquiera abrir una puerta puede hacer este hombre?

De todas formas yo puedo abrirla sola pero tampoco era para que me la tirará en la cara.

-Lo siento Vanessa se me fue la puerta -me dice apenas llegó a la par suya en la barra de pedidos.

Me da una mirada apenada.

Su insoportable Manera De Ser Donde viven las historias. Descúbrelo ahora