Capitulo 17

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Alisten sus corazones para el final del capítulo.

Vanessa

Hoy van a ver olimpiadas de juegos en el instituto. Cada año hacen esto para que los jóvenes compitan jueguen, y se diviertan.

Desde pequeña nunca me gustó este día porque el idiota de Thiago siempre me ganaba y me botaba y terminada toda llena de lodo.

Como sea… Van a ver competencia de sacos, quien es el mejor corredor, arco y puntería,

—A ver jóvenes —comienza a decir el director —Estos son competencias limpias. No quiero peleas,

Estamos todos los jóvenes del instituto en el auditorio después iremos al patio a comenzar a jugar.

—¿Entendido? —pregunta él director.

—¡Si! —respondemos todos

—Bien, ahora ya se pueden ir a divertir.

Todos nos dirigimos al patio del instituto donde los jugadores de fútbol juegan. Ya tienen todo listo y ubicado para jugar.

—Lo primero será una carrera los que quieran participar vengan —dice la maestra Méndez.

Me dirijo donde dice y me doy cuenta que Thiago, Erik y Mónica también competirán.

Ay joder.

—¿Van a competir? —les pregunto asombrada.

—Si, porque te asombras tanto —me dice Mónica.

—Te recuerdo que yo siempre te ganaba en las competencias —me recuerda Thiago.

Pongo mis ojos en blanco.

—No me lo recuerdes.

—Y ahora también te ganaré. —sigue él.

Que presumido.

—O tal vez yo te gané a ti —le respondo.

—Lo dudo —me dice dándome una sonrisa de superioridad.

—Apuesten —propone Derek posicionándose a nuestro lado. —el que pierda le tiene que dar algo al que gane.

Erik y Mónica intercambian una mirada.

—No creo que eso sea buena idea—comenta Erik.

—Acepto —decimos Thiago y yo al mismo tiempo.

—Pero deben jugar por lo menos tres juegos más no solo este —dice Zack.

—Y si ninguno gana —pregunta Axel.

—Pues… Les damos un pastelazo en la cara. —propone Noah emocionado.

Volteo a verlo con los ojos entrecerrados.

—Tú te quieres vengar por lo del carro ¿Verdad?

Él pone los brazos en jarras.

—Todavía me duele.

—¡No le hice nada!

—Pero lo quisiste hacer, y la intención es lo que cuenta.

—Entonces —nos interrumpe Derek —¿Si, lo harán?

—Yo ya acepte. —dice Thiago.

—Yo también.

—Bien entonces a jugar.

Todos los que correremos nos posicionamos en la línea de meta.

—Piensalo bien Thiago las apuestas son malas —le dice Mónica.

Su insoportable Manera De Ser Donde viven las historias. Descúbrelo ahora