Craig, te amo // Creek × Twole

⟩⟩ Capitulo 26 ⟨⟨

» Nervios. «

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Gregory no podía creer que pudo aceptar nuevamente a un canalla como Stan, Stan no es romántico ni tampoco tan divertido como quiere ser, por otra parte no tenía tanto problema si tan solo podría dejar de generarle pena ajena.

— En serio no creo que debas tomar ese emparedado, no te pertenece.

Stan solo giro los ojos y después de tomarlo solo se lo lanzo al perro para así tomar la mano de Gregory y obligarlo a correr. El rubio odiaba hacerlo, por razones no podía evitarlo, no quería que el dueño los atrapará y regañara llamando la atención de tanta gente, sería un escándalo.

Era la cita más extraña que había tenido, ni si quiera Christophe era tan sucio a comparación de Stan, Stan incluso eructaba en su cara y luego se reía por hacerlo. Más... Empezaba a sentir empatía por aquel sujeto, a cierto punto es agradable cuando se inclina para acariciar a un perrito de la calle, aquello justifica el emparedado pues el dueño de ese refrigerio había golpeado al perrito para que se alejara y por su puesto que Stan no permitiría tal atrocidad.

— Stan, no vuelvas a hacer eso — el ceño de Gregory estaba fruncido, Stan supo que se enojo.

— Oh vamos, amigo,  ¿Permitirias que pateen a un perro en tu presencia? — sonrió de lado ante su palabras — sé un poco más humano y defiende a los tuyos.

— ... — el inglés lo miro de forma extraña y luego respondió: — ¿Acabas de llamarme "perro"?

Stan negó entre una risa.

— ¡Solo diviertete!

Tomo las manos del rubio y con él comenzó a dar pequeñas vueltas, como si estuviera bailando al compás de una canción divertida, Gregory le costó entender que Stan solo quería que se relajará, aún así poco a poco captaba y comenzaba a seguir los pasos del chico, estaba seguro que al detenerse su cabello sería un desastre y él estaría mareado.
         El azabache detuvo sus pasos dejando que su acompañante también lo hiciera, no soltó las manos de Gregory, solo las acarició con delicadeza, trataba de memorizar la calidez de cierta persona. Fue entonces cuando levanto la mirada para encontrarse con la mirada azul de Gregory, sus azules no son tan claros como los de esa persona, aún así era fácil confundirlas.

— Oye... ¿No haz considerado cortarte el cabello?

— Por última vez, no.

— Que lastima, así te verías más lindo... — dijo con simpleza a lo que Gregory solo respondió con unas rojizas mejillas y una mirada sorprendida — si te lo cortaras y lo dejaras semi largo, luego lo peinaras un poco de lado... Hm, sí, creo que te verías incluso más lindo...

El inglés le observó boquiabierto, jamás pensó que aquel chico soltará un comentario así de ¿Lindo?. Le sonrió compresivo.

— Lo consideraré...

— Espero que sí, G-Gregory... — mordió su lengua por la confusión de nombres, cuando el rubio le miro con extrañeza Stan tomo su mejilla para volver al momento — Gregory...

— ¿Si? — su mirada no se apartó del azabache, su corazón estaba latiendo un poco loco.

Aquel azabache si quiera tomo permiso para acercarse al mayor, lo atrapó en un beso pequeño que con permiso de la sorpresa y shock de Gregory, continuó. Jamás en su vida espero ser besado por aquel tipo, frente a un hermoso atardecer.