⟩⟩ Capitulo 27 ⟨⟨

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꒰ ͜͡➸ Exagerado...

Christophe mantenía una mirada neutral pero que a ojos de Gregory era intimidante.

El francés había invitado a Gregory a pasar el rato y este un poco dudoso acepto pues no tenía planes esa tarde; peinó su cabello hacia atrás como solía hacerlo cuando era pequeño. Había olvidado ese pequeño detalle en cuanto se presentó y vio la mirada seria de su amigo. El topo no había mencionado nada, incluso parecía normal pero no podía evitar notar que esté le tenía una mirada penetrante enzima.

— Está bien, dilo, dí que se me ve mal. Anda.

Christophe saco la cuchara de plástico medio mordida de su boca. Se encontraban degustando un helado, la tensión se sentía en el aire.

— Te ves bien... Aunque; me sorprende que te cortaras el cabello. — fue sincero, no tenía nada en contra de el cabello corto, sin embargo, se había acostumbrado al Gregory de cabello largo — ¿Por qué lo hiciste?

— Uh, ya sabes... Hace mucho calor últimamente — tomó una cucharada de helado y sostuvo la cereza para comerla y entretener su boca.

El castaño no era para nada estúpido, Gregory no suele tener ese comportamiento, él es más un "príncipe" presumido que alardea todo el tiempo. "hace mucho calor últimamente" es la mentira más barata que ha escuchado, le creería un: "De está manera me veo más hermoso." A la mentíra de tres pesos que se había inventado.

Alguien estaba cambiando a su amigo, él no es así. No sabía porque pero tenía el presentimiento de que tenía que ver con aquel chico que lo invita a citas y pone a Gregory de un humor terrible.

— Ya veo... — volvió a tomar un poco de su helado y meterlo a su boca.

El inglés aún se veía nervioso detrás de toda esa faceta de hombre relajado se escondía alguien que no estaba disfrutando de su tarde ni de su vida, él no es así, reitera y repite, Gregory no es así.

“¿Quién es la persona que te está cambiando...?" — Pensó.

— Sabes, no hemos pasado mucho tiempo juntos, esto me trae viejos recuerdos de cuando éramos niños.

— ¿Cómo olvidarlo? Me quitabas el dinero para venir corriendo a la heladería. — Recordó Gregory con una sonrisa.

— Nunca me lo impedias, si no matabas al perro la rabia se esparcía.

— Ja,ja,ja. En realidad era divertido perseguir a ese niño cubierto de tierra solo para terminar apoyando la idea y comprar helado.

— Era muy convincente ¿No es cierto?

— Eras un idiota.

— ¿Es lo único que rescatas de mi? — Christophe le miro "dolido" pero en medio de una sonrisa — me lastimas.

— No hagas esa cara, tú eras quien se salía con la suya y me dejabas con las ganas de comer otra cosa.

— Te lo compensaré, no te angusties — le dijo de forma tranquila y divertida. — yo pagaré los helados de hoy.

Gregory puso una mano en su rostro y luego negó entre una risa pequeña. El hombre que tanto ama es tan divertido...

Craig, te amo // Creek × TwoleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora