— ¿por qué lo hizo? — pregunté un poco molesta, suelto la mano de Zeus para abrazarme debido al frío y al recordar también el frío de la celda — Afrodita me contó que fue manipulado por Hera, sé que él haría cualquier cosa por ella pero...
— sé que estás molesta y lo entiendo pero no te preocupes, ambos recibirán su castigo pero primero debo ocuparme de salvarte — indicó y sonreí débilmente
— ¿Tú no estás molesto? — pregunté confundida
— lo estoy, pero ya sabía que él haría algo — bajé la cabeza con tristeza
— me lo advertiste — señalé y siento que pone su abrigo en mis hombros para cubrirme del frío, sonrío para mirarlo a los ojos donde su mirada siempre me calma
— no te culpes por eso y tampoco te preocupes por él, Poseidón es fuerte y logrará superarlo algún día — asiento con la cabeza, para abrazarlo de la cintura, apretando mi agarre en su espalda baja al tiempo que cierro los ojos y él frío desaparece por completo. Sus manos acarician mi cabello con ternura, haciendo que me sienta bien
— gracias por salvarme, por salvarme de mis papás — le agradezco y al no oír palabras de él, me separo para verlo a los ojos donde parecen tristes y eso me preocupa — ¿Qué ocurre?
— no quiero perderte — me dice en un susurro apenas audible, eso hace que sienta un pinchazo en mi pecho
— no lo harás — le garantizo y él vuelve acercarme a sus brazos donde me abraza con miedo. Supongo que tiene miedo de que la bruja me haga daño pero eso no va a pasar, porque juntos somos mucho más fuertes y lucharemos hasta el final.
Al día siguiente.
Me levanté temprano junto con mi hermana, pues queríamos almorzar antes de continuar con nuestros deberes. Sheyla debe trabajar y nosotros volver al palacio para hablar con los reyes, aunque esa parte me da miedo. tomo la planta con cuidado para ponerla en la tierra y plantar la flor que compré ayer en el puesto, convencí a Zeus de que me comprará una pues también me apetece tener un jardín bonito aquí. Aunque vivir aquí es temporal
— ¿Segura que quedó bien? — preguntó Sheyla en burla, hago un gesto de frustración porque no estoy convencida de si coloque bien la planta
— me falta experiencia, no te burles — me quejo y ella ríe
— eso tiene solución, yo las ayudo — dijo la voz de Hermes detrás de nosotras, quién usa su magia para plantarla bien. Sonrío feliz de que ayudará pero dejo de sonreír, al ver a Sheyla mirar al Dios del mensaje como una tonta, los miro confundida
— ¿Se gustan? — pregunté a ambos que enseguida me miran asustados, como si fuera algo nuevo para ellos. Sheyla comienza a reír nerviosa para aniquilarme con la mirada
— ¿Qué dices? — preguntó Sheyla y reí
— es hermosa tú hermana pero no creo ser la pareja perfecta para ella — dijo Hermes. Sheyla sonríe emocionada por eso y sé que sólo es cuestión de dejar atrás los complejos
— ¿Tú familia lo impediría? — inquirí
— ¡Holly!, Deja de hacer tantas preguntas — se quejó Sheyla apenada
— está bien. De echo no tengo familia, sólo es Zeus a quien considero mi familia — respondió Hermes
— ¿Entonces son muy cercanos?, ¿Cuál es tu don? — pregunté curiosa — ¿También eres muy poderoso?
— como vez soy el mensajero así que puedo correr y volar más rápido que todos, yo sé casi todo lo que pasa en este mundo e incluso él de los mortales — asentí sorprendida por eso, imagino debe ser agotador
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Mi mundo eres tú
Fantasyuna joven adolescente jamás pensó que quedaría embarazada pero, mucho menos pensó que quedaría embarazada de un Dios del cielo, a lo que ella le llama Dios griego. El dios griego se hace responsable de ella y el niño que aún no nace, los lleva a una...