Noto que la pelea es dura y difícil, Zeus se encuentra en el aire flotando mientras pelea con la bruja hestia, combaten espada contra espada y ambos son buenos, esquivan y atacan con buenos movimientos. Me preocupa que resulte herido y todo por querer protegerme, aunque él aclaro que no es sólo contra mi, me giro para ver a los demás con desesperación de no poder hacer nada, Afrodita también está en combate con un monstruo salvaje y parece que está un poco débil, superan su fuerza y mis manos se aferran a la barrera queriendo destruirla. También está Hans quién pelea con un soldado de hestia y va perdiendo la lucha, él usa su magia junto con sus puños, dando vueltas con facilidad para patear en las partes débiles del soldado pero pronto lo derriban y termina siendo atacado. Afrodita también está en el suelo, usando sus manos de escudo junto con la espada para impedir que el animal la coma.
Intento confiar pero es difícil, esto hace que los nervios me consuman, de pronto una bola de fuego viene hacia mi y no puedo evitar gritar del pánico que se crea en mi, retrocedo al pensar que esa bola va atravesar mi barrera protectora. Es un ave extraño quién me lanza esa bola de fuego, parece que es del mismo Reyno que hestia. Para mí sorpresa la bola si logra derrumbar la barrera, haciendo que caiga al suelo por el fuerte viento que se creo, pero la bola de fuego no llega a mi debido a que tabú me protege usando su magia con su hocico, impidiendo que llegue a mi del todo, pero el avestruz sólo se muere cuando alguien le lanza una flecha en el cuerpo del avestruz haciendo que caiga al suelo, ese alguien es Poseidón que salió del palacio.
Lo miro impresionada pues llegó justo a tiempo para salvarnos, trago saliva con dificultad aún en el suelo.
— gracias — le agradezco a Poseidón quién hace una pequeña reverencia
Zeus se percata de lo que pasa abajo y se da cuenta que nos salvó, entonces le hace una seña con la cabeza a tabú como una orden para volver a crear la barrera protectora, pero está vez tabú se pone delante de mi respaldando la barrera para que no se destruya con facilidad.
Poseidón ayuda a Hans quién enseguida ayuda a su chica, Afrodita quién no podía con ese animal. Todos parecen estar bien por ahora, me giro al sentir a alguien más entrar y me vuelvo a sorprender al ver a Hera venir con una mirada de determinación, saca un abanico para ayudar en la batalla. Eso sí que no lo imaginé, pienso y de pronto me siento inútil, maldigo por lo bajo para ponerme de pie.
Todos están teniendo una lucha muy complicada. Mis ojos miran a Zeus quién sigue en el aire combatiendo con la bruja que no se rinde, de pronto veo como lo ataca lanzando a Zeus hacia nosotros donde aterriza en el suelo. Me preocupo pero no por mucho cuando se levanta como si nada, su mirada demuestra enojo y me temo que eso significa que no sabe que más hacer, o tal vez si sabe que hacer pero no quiere hacerlo.
— ¡Hazlo!, Sabes como acabar conmigo — le gritó hestia con burla — y si no te atreves puedo ayudarte
— no te saldrás con la tuya, encontraré la forma de acabar contigo — finalizó Zeus para detener está batalla con su espada que entierra en el suelo, haciendo que todos los enemigos vuelen lejos del palacio
Miro cada segundo de lo que pasa y hestia hace lo mismo, parece que no puede hacer nada porque todos salen disparados lejos del palacio. Ella le mira mal para desaparecer por su cuenta pero promete volver.
— ¡Ha ido demasiado lejos! — expresó Afrodita enfadada — no podremos proteger al mundo si sigue aumentando sus poderes
— es una Diosa astuta — señaló Poseidón con diversión
— ex Diosa — afirmó Hera, mirando mal a su amigo — Zeus puede acabar con ella, sólo tiene que hacerlo y dejar sus prejuicios si no quiere que todos mueran — le acusó Hera a Zeus donde parecen entender muy bien de lo que hablan
Tabú rompe mi escudo, liberandome y sin pensarlo más corro a él quién me mira enseguida pero pronto me recibe en sus brazos. Lo abrazo con fuerza, rodeando su espalda baja con mis brazos, negándome a soltarlo, odiaría perderlo y no quiero pensar en esa posibilidad. Zeus se aferra también a mí, con su nariz en mi cabello. Se que está preocupado por algo y necesito saber que es.
— tranquila, estoy aquí — dijo acariciando mi espalda y eso me reconforta
— disculpen pero deben entrar, no estamos a salvó aquí — pidió Hans al lado de Afrodita — él rey seguro quiere hablar con ambos
Ambos nos miramos y Zeus sostiene mi mano para darme ánimos, sólo asiento porque creo que es momento de enfrentarse a sus padres. Afrodita me sonríe y se que con eso me desea suerte.
— lo siento, no quise hacerte daño Holly — se disculpa Poseidón algo apenado, la cara de Hera nuestra desagrado y decepción hacia él y supongo que ya despertó de su amorío hacia la Diosa Hera — cometí un error
— error que tendrá consecuencias — aseguró Zeus para caminar al palacio, llevándome con él dentro y pasando al lado de sus amigos
Ambos miramos a los reyes no sin antes inclinarme hacia ellos pero Zeus me detiene sosteniendo mi mano, lo miro confundido pero su mirada está al frente con concentración en sus padres.
— ¿Qué acaba de ocurrir? — preguntó molesto él rey — creí que arreglarías este problema
— lo haré, ten paciencia y ahora vine aquí para decirles que Holly será libre de todo crimen — informó Zeus y me alegra oírlo decir eso — no más acusaciones a mi futura esposa — mis ojos se abren en sorpresa y mi corazón palpita ante esa mencion, no puedo creer lo que escucho y parece que los reyes tampoco pueden asimilarlo
— ¿Pero qué...? — preguntó una perpleja celeste
— no tengo nada que discutir sobre ese tema, yo decido con quién puedo casarme y claro solo si Holly acepta — me mira y sonrío un poco nerviosa pero no digo nada, no estoy lista para responder porque siento que no es el momento y también sé que no espera una respuesta, ahora.
— Poseidón y Hera tendrán su castigo — dicta Zeus con firmeza, eso me da confianza, la seguridad que hay en él
— ¡Ella no hizo nada inapropiado!, Perdona que lo diga hijo mío, pero ella sólo quiere tú felicidad — interviene la Reyna por Hera
— ¿Se puede saber que es lo que hizo? — preguntó el señor en confusión
— sin contar las mentiras hacia las mujeres que la respetan y esperan un cambio en cada Reyno, meter a un dios del cielo al abismo junto con su novia ya se considera un crimen — empezó a decir Zeus — intentar lastimar al futuro heredero al trono — menciona a nuestro hijo y recuerdo ese momento donde Afrodita me salvó — y manipular para destruir la joya preciada de mi madre
— estás equivocado, cariño — le dice celeste, preocupada por Hera — ella no hizo esas cosas, no tienes esas pruebas
— las tengo, Afrodita estuvo ahí cuando paso lo de la "supuesta revisión al bebé", Poseidón quién puede contarnos la verdad para espiar sus pecados y yo que ví caer a Holly al abismo — indicó Zeus con severidad y me sorprende su frialdad
— Hera es como una hermana para tí — le recuerda, celeste
— y yo soy como un hijo para ti — aseveró Zeus haciéndola caer en razón — la hemos malcriado y creo tener un lugar perfecto para ella en este mundo pero... Primero debo ocuparme de la bruja hestia
— se hará lo que digas, hijo mío — indicó el señor celestial, en rendición — confío en tú sabiduría aunque sobre Holly Bruce, la corte debe hablarlo con el emperador, Dios del cielo — le indicó refiriéndose a Zeus quién asiente
— lo haré — afirmó
— disculpa, hijo. No veía la realidad de Hera al verla como mi hija — se disculpa celeste haciendo asentir a Zeus como aceptando sus disculpas
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Mi mundo eres tú
Fantasyuna joven adolescente jamás pensó que quedaría embarazada pero, mucho menos pensó que quedaría embarazada de un Dios del cielo, a lo que ella le llama Dios griego. El dios griego se hace responsable de ella y el niño que aún no nace, los lleva a una...