Capítulo 5: Sam

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La primera semana de clase pasó rápidamente y ya era jueves por la tarde cuando bajé a una de las salas comunes para adelantar algunos deberes.

Le había mandado un mensaje a Sina para que se uniera a mí así que debía estar al caer.

Al llegar me acomodé en una de las mesas que quedaban libres y abrí mi portátil para empezar a buscar información sobre el Brexit y su impacto en las televisiones nacionales. De momento la asignatura de periodismo audiovisual era la que más me estaba aburriendo y eso que solo habíamos hecho dos clases.

A ver, tampoco era que el profesor le pusiera mucho entusiasmo y la verdad es que el temario era bastante denso.

Iba a ser una tarde larga.

- ¡Por esa cara juraría que has empezado por el artículo del Brexit! - Oí la voz de Sina acercándose a mi mesa -. ¿De verdad es tan horrible? - Preguntó haciendo una mueca.

- No te lo puedes ni imaginar - Le respondí llevándome una mano a la cabeza.

- ¡Ahhhh! ¡Qué manía le estoy cogiendo a esta asignatura! ¡Encima no entiendo nada!

- Claro, si te pasas toda la clase leyendo entrevistas de Chris Martin... - Me reí.

- Es que creo que mi cuerpo ha desarrollado un sistema de desconexión total cuando escucha la voz de ese señor... ¡De verdad! ¡Es imposible! ¡Y lo intento!

- Lo sé – Suspiré.

Nos pasamos toda la tarde hincando codos y metidas en el maldito artículo, que tardamos casi tres horas en terminar.

No porqué fuera muy largo, sino porqué la mitad del tiempo estuvimos charlando y conociéndonos un poco más.

No me costó nada sentirme a gusto con Sina, sino todo lo contrario. Desde el primer momento sentí que podía contarle lo que fuera y que no iba a juzgarme jamás.

Me transmitía ese tipo de confianza, como cuando hace dos días que conoces a una persona, pero parece que haya estado allí durante toda tu vida.

Me sentí lo suficientemente cómoda para explicarle como era mi vida en mi pueblo y lo que había sucedido con Austin y mis amigos.

Ella me contó que llevaba cinco años con su novio, el cual era mayor que nosotras y no iba a nuestra universidad, y aunque últimamente no se veían demasiado, tenían una buena relación.

De repente una voz familiar me hizo levantar la cabeza del portátil, y suerte, porqué ya empezaba a tener los ojos rojos de tanto escribir.

Al alzar la vista, vi como Connor, con su sudadera enorme con el logo de la universidad y el pelo un poco alborotado, se acercaba a nosotras.

No pude evitar sonreír al verle.

- ¿Qué tal está yendo tu primera semana novata? Por esa sonrisita... Veo que muy bien.

- ¡¿Muy bien?! Llevo haciendo deberes desde las cuatro de la tarde - Le dije poniendo los ojos en blanco - ¡No sé dónde está esa vida universitaria de la que tanto me has hablado!

Sina y él se rieron.

- Mmm... Eso es porqué aun no has salido de fiesta conmigo... - Comentó mientras se metía las manos en los bolsillos haciéndose el interesante -. De hecho. venía a proponerte un planazo para mañana por la noche... Bueno, a proponeros.

De repente, apartó la silla que quedaba justo delante mío y cruzó los brazos cómo si estuviera a punto de contarme un secreto de estado.

- Miedo me das – Me reí.

Espérame en CamdenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora