Desalmado

834 131 30
                                    

Un cálido día que mecía con un vaho gélido extraño, era la persistente sensación que daba un indicio que no muchos salvo expertos podían percatarse de que algo avecinaba.

Se encontraba sentado Todoroki Shoto frente una mesa en cubierta con muchas cartas náuticas como un rompe cabezas girando sus heterocromáticos iris de un lado a otro mientras manipulaba un compás con una brújula de bolsillo expuesta.

Izuku le observaba con curiosidad al otro lado con sus manos al borde de la mesa para no interrumpir, pero con una evidente ganas de preguntar muchas cosas. Sus dedos golpetearon con ansiedad la madera y su vista agudizó a un determinado punto.

—Uhm... Todoroki-kun, ¿no crees que si se tomara la ruta al noreste podrías evadir los remolinos hacia el Cabo Muerto? —Recitó un poco nervioso al percibir la vista del otro levantar hacia él.

—Se podría acortar tiempo, pero a como se siente esta brisa en la tarde habrá una tormenta, no es conveniente ir recto.

Midoriya abrió ligeramente sus labios sorprendido.

—¿Puedes darte cuenta de eso? ¿Cómo?

—Con el viento, la presión de la atmósfera, puedes juzgar también las nubes que se ven en horizonte. Navegar no solo se trata de direcciones —respondió con serenidad percibiendo el asombro del otro. —El clima influenza sobre todas las cosas.

—Eso es increíble, ahora entiendo porque te mencionan como un corsario experimentado en altamar.

—Más eso no fue suficiente, me tomaron con la guardia baja y perdí mi flota —dijo sin intención de dar una encarecida excusa mientras hacia su cabeza hacia atrás. —Parte de mi tripulación fue capturada, debo recuperarlos.

—¿Por eso te alineaste a Kacchan?

—Tenemos una meta parecida, así que es conveniente complementarnos. Es por eso que me alivia que me haya dejado a cargo de la ruta de navegación, porque me reconoce, al igual que las cartas náuticas que Uraraka benefició también es como se reconoce a ella —esbozó una tranquila sonrisa. —Uno simplemente no puede cargar con todo, nadie es perfecto.

Ese comentario fue tan banal para Shoto, sin embargo en Izuku fue todo lo contrario, había enclarecido aun más los momentos dubitativos que ocasionalmente revoloteaban en su cabeza luego de los últimos días. Cada vez más verificaba que las creencias entre los nereidas eran muy erradas a la realidad.

—Yo también quiero poner mi parte, quiero ayudar de alguna manera... —masculló con sus iris divagando en los mapas.

—A pesar de que no te des cuenta lo haces, un claro ejemplo es que fuiste el primero que percibió mi naufragio o que eres el mismo que le ha dado fortaleza a Bakugo para todo lo que ha experimentado —reiteró con serenidad.

—No es suficiente, si pudiera ir a los terrenos de Burnin' a corroborar lo que vio en Kacchan, debe tener un remedio que-... —pausó con agobio cerrando su mirada en resignación— aunque él me dijo que no separara de él...

Shoto ladeó su rostro unos ángulos pensativo de que podía ser precisamente a lo que se refería, ya que no tenía mucha información de eso.

—Oye, los pequeños detalles pueden lograr un gran cambio, no debes ser tan radical —sentenció en insistencia de calmarlo. Izuku le observó con extrañeza.

—Tú... siempre permaneces muy tranquilo, ¿cómo logras eso?

—No del todo, soy tan furibundo pretendiendo no perder los estribos cuando se trata de piratas, también en este barco puedo relajar ya que hay un buen ambiente. ¿No lo sientes? —Preguntó con la brisa cálida removiendo un poco sus cabellos y los papeles que sostenían con otros pesos para que no dispersaran en la cubierta. —Puede ser porque esos dos fueron a completar el reabastecimiento de agua dulce —susurró llevando una mano bajo su mentón. Izuku rio divertido.

El tirano de los mares [BkDk +18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora