Ruinas, El calor de una noche de bodas.

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Los Jiang han llegado sin invitación a las recientes ruinas de Gusu Lan. Lo primero que notaron es que el bendito muro de las reglas ya no estaba. Jiang ZiYuan no pudo evitar burlarse con una sonrisa torcida de la desgracia de aquellos, que se creen santos, limpios y que miran al resto como si fueran mundanos.

La familia principal de los Lan, los ancianos y unos pocos discípulos que quedaban los recibieron. Los Jiang venían con 150 discípulos detrás de ellos.

Después del saludo de cortesía y unas cuantas palabras Lan QiRen comenta sobre una observación - traer a todos sus discípulos, es un derroche. ¿Quién protege su secta? - pregunta dándose cuenta de que los varones herederos de los Jiang y sus respectivos esposos no venían con ellos.

- Maestro Lan QiRen, debería preocuparse por sus problemas, pero para su tranquilidad - dice Jiang Fengmian con su típica personalidad tranquila - los discípulos que nos acompañan son una pequeña parte del total.

Los Lan no pueden evitar tensarse ante la revelación que los Jiang le acaban de restregar en la cara y eso es que ellos, son una secta prominente.

- ¿qué los trae hasta Gusu Lan sin haber enviado una carta de aviso?

- no pensé que en la situación en la que están, ese insignificante detalle fuera importante - dice madame Jiang.

Los Lan están en evidente desventaja en todos los sentidos, por lo tanto, saben guardar silencio ante el evidente insulto.

- hemos venido para ayudarlos a levantar la estructura de Gusu Lan - dice Jiang Fengmian - traemos materiales, dinero y mano de obra.

- ¿de verdad nos van a ayudar? - pregunta un anciano con desconfianza.

- y ya que están interesados, primero deben firmar estos documentos - dice el líder Jiang entregando unos papeles.

- ¡ESTO ES INAUDITO! - grita Lan QiRen después de leer el contenido de aquellos papeles.

- ¿se están burlando de nosotros? - pregunta un anciano colérico.

- queremos ampliar nuestras tierras - dice madame Jiang - y para eso Gusu Lan debe ser un anexo para Yunmeng Jiang. Una extensión.

- si no colaboran, en la próxima reunión todos sabrán que vuestra secta ha dejado de existir. Si aceptan estarán bajo nuestro mando, como secta podrán conservar el nombre y ante el mundo podrán aparentar que siguen siendo los mismos - dice el líder Jiang.

Los Lan se miran entre ellos, con inseguridad y presión ante el hecho de que ya no son nada.

- esperaremos hasta el mediodía de mañana la respuesta, si es negativa - dice madame Jiang - aténganse a las consecuencias.

Los Jiang se fueron al pueblo, ahí con anticipación debieron pagar por más de una posada para el alojamiento de los discípulos, puesto que alojarse en Gusu no era una opción.

- no entiendo a YanLi. Primero los quiere ver en ruinas y ahora quiere que les ayudemos a reconstruir todo - dice madame Jiang.

- Si los Lan desaparecen, nos veremos perjudicados, A'li solo quería rebajarlos moralmente - dice FengMian - acorralarlos haciéndoles creer que no pueden ser los mismos que antes. Conociendo a los Lan, ellos no van a pedir ayuda a nadie.

- esa niña es muy enredada... -bufa la araña - dijo que, si los Lan no vuelven a ser los mismo, en apariencia, no tendríamos el apoyo para lo que se viene.

- lo bueno de todo esto y que rescato es que nuestro territorio se ampliará y que la misma secta de Gusu será una torre de vigilancia, la principal de esta región.

Jiang Yan Li.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora