¡Alerta! ¡Héroe enamorado! [DekuBaku]

Capítulo 4

Uraraka Ochako solo tuvo que ser sobornada con media docena de mochis para dejar al número uno de Yuei levitando en la entrada. Bakugou le gritó, insultó y amenazó para que lo dejara libre pero no lo hizo hasta que Sero lo tuvo bien amarrado y amordazado con sus cintas. Ashido tenía una enorme sonrisa de oreja a oreja delante del cenizo que echaba humo por las orejas y le recordó que no podía atacarlos en la entrada de la preparatoria. No al menos que quisiera que los profesores salieran a detenerlos y les dieran alguna sanción.

—Los matará apenas se alejen unos metros —dijo la de ojos chocolate que podía ver en el contrario una clara intención asesina hacia ellos —Mina-chan, ¿por qué van a hacer esto?

¿Están cansados de vivir?

Si bien ella participó en la emboscada, el de quirk explosivo seguramente desquitara todo su violencia con los autores intelectuales de su desgracia. Estaba muy preocupada por todo el grupo. Realmente angustiada de no volver a verlos.

—Es por una causa importante, Ochako, muy importante —juró la de quirk ácido con una enorme sonrisa que le dirigió al cenizo —Pero puedo contarte. Un poquito.

El cenizo le vio el doble de mal y ella aguanto una carcajada, en lo que caminaba delante de él y le miraba con diversión, pellizcando su mejilla y escuchando sus gruñidos.

—O puede que no lo haga. No sé. Todo depende de Bakugou —se colocó a un lado del molesto chico y le guiño un ojo —Si te portas bien, no le diré nada a Ochako.

Aunque la relación del cenizo con Izuku Midoriya no parecía ser un secreto, por la manera en que esté se quedó en silencio y sus animos se calmaron, fue bastante claro que tampoco quería que otros lo supieran. Kaminari pensó que era muy curioso pero no comento nada al respecto, al igual que Kirishima y el azabache. Por otro lado, la castaña se moría de ganas por saber de lo que estaban hablando pero si lo preguntaba se vería involucrada en un violento intento de asesinato y no estaba lista para eso. Les deseo suerte a todos y se fue junto con Iida que la esperaba en la entrada.

El representante de la clase A no se metió por dos motivos. Uno, fue gracioso ver a Bakugou Katsuki levitando en el aire, pese a que era peligroso e iba contra las reglas jugar de esa manera fuera de la preparatoria. Dos, el grupo conformado por los últimos en el ranking académico y el número uno era bastante problemático. Ni siquiera Aizawa podía detenerlos. Aunque estaba mal no intervenir, prefirió hacer de espectador y ver a su amiga a lo lejos.

—Lamento la espera Iida-kun, ya vámonos —se acercó la de quirk de gravedad a su alto amigo con una sonrisa.

— ¿Paso algo malo con Bakugou-kun para que Ashido-kun te pidiera ayuda? —quiso saber el más alto.

—No lo sé. Mina-chan no me dió muchos detalles. Solo me pidió que lo hiciera flotar mientras Kirishima-kun lo distraía y Sero-kun la ataba —suspiro la castaña —Me gustaría preguntarle. Pero no quiero ganarme el enojo de Bakugou-kun.

—Espero que estén bien cuando lo liberen —deseo el de lentes.

—Yo también.

Con corazones algo ansiosos, Tenya y Ochako rezaron por el bienestar de sus torpes compañeros de clase.