(𝐈𝐈𝐈)

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¡¡Hola a todos!! Lo sé, he tenido muy abandonada esta historia pero por fin con este capítulo la doy por concluida. Gracias a todos aquellos que habéis estado aquí dándome ánimos para continuarla. Espero que vuestra larga espera haya merecido la pena.💙💙💙

💙💙💙

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— Porque me gustas de verdad, Icy. 

Esas palabras resonaban en la cabeza de Icy una y otra vez, no podía creerlo. La chica que le gustaba le había confesado su atracción. Si alguna de sus hermanas le hubiera dicho antes de la fiesta que su noche acabaría así, hubiera desconfiado de ellas.

Intuía que Anukis se sentía atraída por ella. Lo sabía por cómo le miraba la otra bruja, por cómo le sonreía, pero no se esperaba en absoluto que ella fuera tan valiente y le confesara que le gustaba. Las palabras no eran el fuerte de Icy, sobre todo cuando tenía que emplearlas para explicar cómo se sentía. En ese momento no sabía qué decir. Anukis la miraba expectante. La mayor de las Trix debía hacer algo. Sin más preámbulos tomó entre sus manos la cara de la otra bruja y la besó para expresarle que ese sentimiento era completamente mutuo. 

Anukis se entregó al beso y sonrió contra los labios de Icy antes de profundizar el beso un poco más. La poderosa bruja también sonrió antes de unir sus labios nuevamente a la chica que le había robado el corazón. Las ganas reprimidas durante tanto tiempo provocaron que el beso se tornara apasionado, estaban tan inmersas en sentirse la una y la otra que les dio absolutamente igual que pudieran ser vistas por otras brujas. 

Darcy, la anfitriona de la fiesta, tras liarse con varias brujas despampanantes, buscó de forma exhaustiva a sus hermanas para comentarles lo mucho que había disfrutado en la fiesta que ella misma había organizado y para cotillear con ellas acerca de sus ligues, no le fue difícil dar con su hermana pequeña, Stormy, la cual estaba despidiéndose apasionadamente de la bruja con la que estuvo toda la noche, Darcy se acercó a su hermana Stormy y le guiñó el ojo.

— Veo que te has divertido mucho esta noche, hermana— comentó Darcy dándole un codazo para chincharla.

 Stormy se sonrojó y chinchó a su hermana como forma de contraataque.

— No he sido la única, querida hermana. Por lo que he visto has estado demasiado ocupada besando a muchas brujas.

— Ya lo sé. Muchas brujas de Torre de Nubes literalmente perderían la cabeza por mí con tal de que les prestara un poco de atención—contestó así Darcy.

— Bueno, no seas tan egocéntrica, busquemos a Icy—añadió Stormy mientras tiraba de la mano de su hermana para sacarla de la pista de baile.

Al final salieron al patio y no les costó dar con su hermana mayor, estaba sentada en un banco liándose con Anukis. No les sorprendió encontrarlas en esa situación, porque desde el principio se habían dado cuenta de que amas se gustaban.

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