(𝐕)

57 11 0
                                    

¡¡Hola!! hacía mucho que no publicaba un capítulo de la historia de ambas y creo que ya tocaba publicar uno nuevo. Os aviso de que queda uno más y ya daríamos por concluida esta historia.  

Os dejo ya con este capítulo. Si os ha gustado me ayudáis dejando un voto y un comentario🩷 Espero que disfrutéis mucho la lectura y os ayude a evadiros de todo✨🥰

 Si os ha gustado me ayudáis dejando un voto y un comentario🩷 Espero que disfrutéis mucho la lectura y os ayude a evadiros de todo✨🥰

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


La detective Rizzoli volvió a mirar el reloj con impaciencia. Ya eran las 8 pm cuando su madre y su hermano Frankie no habían hecho acto de presencia.

Se acercó a la barra y se pidió un botellín de cerveza para calmar sus nervios, pues esa noche les contaría que Maura y ella eran pareja desde hacía unos 6 meses. Jane había ocultado con gran habilidad su relación con la forense. Sólo era conocedor de esta relación Barry Frost, pues ante su gran insistencia, se vio obligada a contárselo, haciéndole jurar varias veces que no se lo diría a nadie.

Frost cumplió su palabra y por eso, Jane Rizzoli tuvo que convocar una reunión familiar en su bar de confianza, el Dirty Robber.

Eran pasadas las ocho cuando Ángela Rizzoli y Frankie Rizzoli entraron por la puerta del bar, buscando con la mirada a Jane. La localizaron por fin, en una mesa del fondo, degustando un botellín de cerveza. La morena se levantó cuando vio a su madre y su hermano ante ella y les saludó con un abrazo.

— ¿Maura no cena esta noche con nosotros? — preguntó Ángela Rizzoli y es que veía tan unidas a su hija y a la forense que ya no podía imaginarse a la una sin la otra.

— Ahora vendrá, pero primero tengo que contaros algo — repuso Jane jugueteando con sus dedos, mostrando un nerviosismo inusual en ella.

Frankie y Ángela cayeron en la cuenta de lo nerviosa que estaba.

— Jane, puedes confiar en nosotros — dijo Frankie en un intento de reconfortar a su hermana.

Jane sentía que el corazón se le iba a escapar por la boca, porque no sabía cómo se tomaría su familia que tuviera una relación formal con una mujer, con nada más y nada menos que la doctora Maura Isles. Jane, caracterizada por el poco tacto y por ser directa decidió que ya no podía callarlo más.

— Maura y yo estamos juntas — dijo como si nada mientras apuraba hasta el final su botellín de cerveza. Esperaba ver reacciones de sorpresa, escuchar reproches, pero no fue así.

Ángela Rizzoli fue la primera en reaccionar. Se levantó de su asiento y abrazó a su hija mayor.

— No sabes lo feliz que me hace saber que estáis juntas. Siempre he pensado que los chicos que intentaban ligar contigo no eran dignos de ti — añadió la señora Rizzoli antes de soltar a su hija.

Jane se sonrojó y se le escapó una sonrisa al pensar en Maura.

— Me siento afortunada por estar con ella — se sinceró mientras se aproximaba a su hermano, el cual todavía guardaba silencio.

Relatos variados (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora