Sabotaje/ luz, cámara y... ¡Te tengo!✔

Capítulo 16: Hay líneas que nunca se deben cruzar

Alessia

Ojeé por encima la página y arqueé las cejas, incluso quiere mandar al director cuando es un profesional y eso no es todo, ella quiere hacer el guión para recibir el salario, el que escribiera un libro y tuviera un éxito impresionante, no significa que pueda reemplazar la labor de otros.

—Song, Lee y Palma… llamen a la editorial y díganle que no realizaremos ningún trato, por cierto, Palma, ¿puedes acompañar a la Srta. Crab fuera?

—¿Qué? —elevó la voz—, ¿acaso no sabes quién soy? Me necesitan.

—No querida, no te necesitamos en nuestras filas con esa actitud arrogante. En esta empresa no se permite ninguna especie de denigración hacia el personal y usted lo ha hecho, ¿cómo dijo?, ¿diminutos cerebros? Desde el personal de limpieza hacia las recepcionistas y de ellos hacia la gerencia y la cabeza final que vendría siendo la presidenta, o sea yo, todos y cada uno de ellos son importantes en esta empresa y no, no necesitamos a alguien que no tiene el más mínimo sentido de decencia.

Me di media vuelta y mi cabello ha sido tirado. —¿¡Qué te crees!?

—¡Srta. Barnes! —se alteraron mis colegas.

Me liberé de su agarre y la encaré, solo para recibir una bofetada. —Conste que lo empezaste—elevé mi mano y mi cuerpo fue arrastrado hacia atrás—, ¡suéltame que alguien debe enseñarle modales!

Me liberé del intruso y la tipa esa rodeó la mesa, por lo que me dispuse a subirme a esta para alcanzarla. —¡Alessia! —mi pierna que está subida sobre la mesa, se bajó levemente y me erguí, es Xavier y no suena muy contento—, ven acá.

—Pero ella…

—Que vengas—demandó y de mala gana me situé a su lado.

—Esto no se quedará así, diré que quisiste agredirme—amenazó la bruja esa.

—Anda, hazlo y publico las grabaciones—señalé la esquina, donde la cámara de vigilancia cubre toda la pieza—, ¿qué? —pregunté al ver su semblante asustado—, ¿tienes miedo de que todos te hagan a un lado? Por cierto, no olvides que gracias a los rumores de la adaptación por parte de nuestra cadena es que tu libro se volvió lo que es…

Un minuto después transcurrió y Xavier tiró de mí hacia mi oficina, ¿qué rayos hace aquí cuando debe estar trabajando?

Recorrí mi oficina de un lado al otro sin parar, con los ojos de él posados en mí con curiosidad. —No lo hagas—pidió, hemo vuelto al Xavi agradable, su tono de voz me lo dice.

—¿Qué no haga qué?

—Eso, tomarás asiento y beberás cuando sabes que estás medicada por esta semana.

—Y a ti qué carajo te importa si me quiero intoxicar. Es más, ¿no deberías estar trabajando en este instante? Todo el tiempo te la pasas ojeando lo que hago y lo que no, dame un puto respiro—vociferé y segundos después, me dejé caer en el sofá… mi cabeza quiere estallar, debí haberla golpeado para liberar estrés.

—Si no te comportaras de esta manera, entonces yo no tendría que estarte vigilando, si yo no hubiera llegado, ¿qué harías?, ¿golpearla? —tomó asiento a mi lado y acunó mi rostro entre sus manos—Yo solo quiero que estés tranquila, sabía que podías llegar a cierto límite, estaba preocupado que de pronto bebieras sabiendo muy bien que estás medicada… quiero que estés bien—su timbre de voz se ha vuelto suave—, ¿umh? —sus ojos oscuros me miran y en ellos se nota cierto brillo—, ¿por favor, podrías cuidarte?

—Deja de hacer esto… no es normal el tono con que lo haces.

—¿A qué te refieres?

—Sabes lo que quiero decir, lo que haces, no es lo que haría un amigo, tú… actúas diferente conmigo comparado con cómo tratas a Briana.