Especial (1/2)
SAVANNAH:
Estaba más confundida de lo que pude haber estado en toda mi vida, peor que haber pasado una semana sin sangre en el medio de un bosque.
Pequeñas imágenes llegaban a mi mente, como recuerdos borrosos, no sabía lo que ocurría a mí alrededor, sólo sentía la cálida mano de Marcus apretando la mía en forma de apoyo.
Miraba detenidamente los ojos de Seth y sus palabras se repetían en mi mente:
"Soy yo, tú hermano..."
Toda una vida estando sola, décadas sufriendo pensando que no tenía una familia y de la nada un día el universo dice "Démosle un hermano a Savannah" Las cosas no funcionaban así, uno no se despertaba diciendo "hoy tendré un hermano " y salía por las calles asignando el ese papel a cualquier persona.
— Es remotamente imposible que yo sea tu hermana — negué una y mil veces descartando la idea de que él, un licántropo, fuese mi hermano, era imposible.
— Claro que lo eres, te reconocería con tan sólo ver tus ojos. — susurró sin despegar sus ojos de los míos — No hace falta que tenga que ver si tienes la cicatriz o no. Sé que lo eres.
— No. Es imposible — miré a Marcus quien miraba aún más confundido la escena — Tu eres un licántropo.
— Hay una razón para todo — suspiró —. Deberías sentarte, es larga.
Asentí como pude y Marcus me guió hacia la silla, sentándome junto a él. Sólo estábamos nosotros tres sentados allí, todos los demás alumnos habían salido hace un par de minutos, y los demás nos habían dado nuestro espacio.
— Habla...
— Bien — otro suspiro fue largado de sus labios —. Principalmente tú no te llamas Savannah y obviamente Robert no es tu verdadero padre.
— ¿No es mi padre? — lo interrumpí, asombrada y a la vez aliviada.
— Él no es tu padre, tu verdadero nombre es Samantha Dankworth, y eres hija de Natalie Loughty y de Peter Dankworth, ambos licántropos. Nuestro padre era el Alpha de la manada "Bloody moon" fue una manada muy poderosa pero no lo suficiente para vencer a los originales.
— ¿Qué tiene que ver eso? Sigo diciendo que te has confundido, si dices que son licántropos... ¿Cómo es que soy un vampiro?
— Hace milenios atrás, los aztecas y mayas han hecho una profecía en forma de venganza contra los vampiros, éstos decían que en mil años iba a nacer un niña en un eclipse solar junto con la alineación de los planetas, ésta niña tendrá poderes extraordinarios hasta tal punto de destruir el mundo, pero estará condenada al sol. Todo esto sucedió la noche en que naciste, ibas a nacer en una hermosa luna llena, pero nadie nunca pensó que esa misma noche iba a haber el eclipse solar...
>> Mamá y Papá no podían creer que tú eras de la profecía, nadie lo creía. Habías sido un embarazo normal, los meses de gestación habían sido los mismo, pero el primer indicio fueron tus peculiares ojos rojos y al pasar los meses tú te ibas debilitando; no retenías los alimentos y no soportabas el sol como cualquier niño. Papá te llevó con Palmia, la abuela de Aisha, y ésta te hizo tu anillo para el sol. Todos se habían enterado de tu existencia y el Consejo de la Manada no permitió que te dejáramos en ella, para ellos eras una amenaza.
>> Las cosas terminaron empeorando cuando Robert descubrió algunos de tus poderes, más que nada la manipulación o hipnotismo, decidió que se aprovecharía de ello. Así lo hizo con ayuda de Maximus...
— ¿Maximus? — interrumpió Marcus frunciendo el ceño y automáticamente mi cuerpo de tensó.
— Sí, ellos querían el poder de Samantha, fueron tras ella y destruyeron la manada; el Consejo no quiso ayudar y no permitió que ninguna manada ayudara. No les importó la muerte de más licántropos, ellos como muchos más querían destruir a Samantha y aún dudamos de que hubiesen apoyado a Maximus y a Robert.
— Entonces yo tendría que ser una ¿licántropa? — fruncí mi ceño y arrugué mis nariz, eso pasaba cuando no entendía bien las cosas aunque habían quedado más que claras — ¿Por qué nunca me han buscado?
— Seth te ha buscado todo este tiempo — me respondió Marcus —. Por ese motivo es que no lo has visto mucho por aquí, todos estos años ha estado viajando y buscándote.
— Cada vez que dábamos con tu rastro, desaparecías, Robert sabía que iríamos por ti y por esa razón es que viajaban. Cuando nos enteramos de que escapaste de allí buscamos tu rastro, pero como sabes, te habías convertido en una leyenda, nadie sabía de ti.
— ¿Tengo una familia? — pregunté dudosa, procesando toda la información. Había pasado tantos años sin una familia, que el hecho de saber que podía tener una, me asustaba.
— Claro que sí; mamá, papá y los chicos estarán felices de volverte a tener — sonrió y fijé mi vista en Marcus, quien me sonreía feliz. Dejé un rápido beso y me lancé sobre Seth, abrazándolo con todas mis fuerzas.
Lía en multimedia.
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She is my mate.
WerwolfNunca creí haberla encontrado, nunca creí poderla tener en mis manos y menos pensar que era MIA, porque ella es mi mate. *** Una pareja cargada de pasión y deseo, pero sobre todo problemas... ¿El amor es suficiente para rescatarte de la oscuridad...