¡Reacciona!

220 24 4
                                        

— Nuevamente haciendo un papel que no te toca.. — Suspiró, acercándose a su lado.

Sanzu dió un pequeño sobresalto, debido a que Inui realmente tenía un paso liviano. Era difícil de percibir con una persona normal.

— Es que.. El salió. Fue al casino, y me dijo que cuidara a Senju. — Ladeó su cabeza. — Debo hacerlo.

— Ese imbecil.. El es el mayor. Tu solo tienes unos pequeños años más que tu hermana y el en vez de andar paseando por ahí, debería venir.

— Ya no estás en casa.. ¿Donde fuiste? Te fui a buscar, pero dijeron que te habías ido de la nada. Hablaban cosas malas de ti..

— ¿No supiste que pasó? Casi me matan a mi pero le llegó la bala a Aslan.. Maté al que lo hizo, y escapamos.

— ¡No deberías estar acá entonces! Debes irte..

— Una cárcel no es capaz de matarme. — Le guiñó un ojo, riendo.

Sanzu miró a Inui con gran admiración. Definitivamente el quería ser como Inui y seguir sus pasos, mostrarse valiente y fuerte ante todos. Inui era alguien, la figura a seguir de Haruchiyo.

— Ten.. Ve y compra unos dulces. — Le entregó unas monedas, sonriendo. — Con cuidado.. Debo irme ya.

— No soy un niño para ir a comprarme dulces.

Sanzu abultó suavemente sus labios mientras Inui reía suavemente, retirándose del lugar. Lo que daría el por tener una infancia agradable y tranquila.

Mientra Inui se iba, Sanzu iba a comprar aquellos dulces a pesar de sus palabras recientes. Le gustaban aunque le daba pena admitirlo aunque en aquella salida, lo cambiaría por completo.

                            ...

— ¿Y qué tal, niños? ¿les gusta el lugar? Creo que es bueno, y cada uno tendrá su habitación.

Se habían cambiado de departamento recientemente. Había sido rápido, con entrega inmediata.

— Dormiremos en colchones mientras. Debemos juntar dinero para comprar una cama.

— Inui.. ¿Podré seguir durmiendo conmigo? — Preguntó Aslan.

— Claro, claro. Seguirás durmiendo conmigo, pequeño niño. — Apretó su mejilla.

— Por fin dejaré de dormir con esta pulga. — Rió, saduciendo el cabello de Sing.

— Pelado.. — Lo miró mal.

— Ya, ya. Shh.. Silencio. — Cubrió las bocas de ambos. — Acomodense. Iré a ver unas cosas, ¿sí?

Inui salió del lugar, cubriendose un poco con un gorro. Iría a dar vuelta hasta llegar a una casa.
Había hecho conexiones con un chico, un chico que podría entrar a aquella prostitución de Kazuma.

— Hola.. Yasu.

Anteriormente, venía de una familia la cual estaba a nivel de Kazuma solamente que su padre tenía una gran empresa así que claramente tenía amistades con personas que podrían ayudarlo. Habían pasado bastantes años, pero lo había encontrado hace unas semanas.

— Si me descubren.. Juro que te seguiré el resto de tu vida, aunque sea como un maldito fantasma. — Suspiró, sentándose.

— Eres mi única ayuda.. No puedo darte nada ahora.

— Idiota chico lindo. — Empujó su frente. — Yendo detrás de lo imposible, cuando podrías estar viviendo tu vida normal. Tendrías grandes lujos, y sin preocupaciones.

— Pero me faltaría algo.. Me sentiría vacío.

— Pero tendrías grandes millones.. Todos a tus pies.

— Solo callate. — Rodeó sus ojos.

— Okey~ chico lindo.

Tomó un poco de café, para así mirarlo directamente a los ojos.

— Pagué bastante para entrar a ese lugar.. Es asqueroso, realmente. Ver a esos hombres.. — Cubrió su boca, arrugando su nariz. — Entrar en esas habitaciones, es asqueroso. Se escuchan llantos de todos los lugares.

— Me imagino.. Aslan me suele contar. — Bajó su mirada.

— Hay un chico, un chico que siempre está al lado de ese pedofilo. Suele consolar a los niños, cuando entran al lugar pero.. Tiene tu edad. — Relamió sus labios, tomándose el tiempo para hablar.

— Cuéntame.. Cuéntame de el.

Yasu comenzó a hablar, describiendo a aquel preciado amigo que estaba buscando.

— Es.. Es el.. — Cubrió su rostro, suspirando.

— ¿Es a quien buscas? Uf.. Está complicado. Dalo por perdido.

— ¿Qué dices?.. Jamás lo dejaría de buscar. — Apretó su puño.

— Es la maldita pareja de el.. Inui, por favor. ¡Reacciona! Ya lo perdiste.

— No.. ¡No puedo dejar que siga viviendo ahí! — Golpeó la mesa.

— ¿Entonces que harás? Dime.. ¿Qué harás? — Suspiró. —  Tienes una oportunidad. Hay una subasta, en 3 meses.. Ataca ahí, Inui. Yo estaré por ahí, viendo así que te ayudaré.

— ¿Debo esperar 3 meses?.. Dios. — Ladeó su cabeza.

— Planeate bien, Inui. No es difícil, realmente.. Solo hay que ser astuto, como tu. — Se acercó a el, acariciando su cabello. — Yo ya estoy por cumplir los 19 años, pero tu tienes 16 solamente. No entiendo el como soportas esto.

— Deja de mencionar mi edad.

Inui odiaba su edad, realmente la odiaba.

— Solo preparate. Cualquier cosa, puedes pedirme.

— Perdón por no darte nada a cambio.. — Se levantó, suspirando.

— Con una cita.. Estoy bien. — Le guiñó un ojo, riendo con suavidad.

— Desde que te conozco eres así de coqueto.. — Negó.

— ¡Llevabas años sin verme! No puedes decir nada. — Lo abrazó, suspirando. — Estás metiéndote a la boca del lobo.. Son hombres poderosos.

— Le romperé los dientes.

— Ya. Vete, con cuidado.. — Golpeó su espalda.

— Adiós, y gracias.. Realmente eres bueno, a pesar de todo.

Inui asintió, saliendo de el lugar.
Caminó con cuidado, bajando su cabeza. Sentía pasos detrás de él, como siempre.. Pero nunca supo quien lo seguía, así que solo se mantuvo alerta pero de un segundo a otro, lo empujaron haciéndolo caer.

— Oh, lo siento.

Era ya algo tarde. El sol bajaba y la gente poco a poco transitaba menos.. La boca de Inui fue cubierta al estar en el piso. No pasó mucho tiempo en sentir como sus ojos se cerraban.

                               . . .

HOLA, no sé escribir secuestros gracias :b

Espero les haya gustado el capitulo y no se haya visto raro?? Cualquier cositas, me dicen
Nos vemos el próximo capitulo, wiwiwiwiw

Ese mundo..Donde viven las historias. Descúbrelo ahora