31

10 0 0
                                    

Capitulo XXXII

Lucius se arrastró hacia Remus que apenas vio que Raze ya no era una amenaza, y que los refuerzos habían llegado y se dejaron caer sin moverse. Lucius llegó de llegar a su esposo sin notar que tenía el rostro cubierto de lágrimas. Sirius volvió de su forma animada y avanzó hacia su amigo:

–Vamos Moony, ya está hecho, pero no puedes descansar, tu cachorro y esposo te necesitan.

–...

Sirius levantó al cabeza buscando a un medimago , mas este estaba inclinado sobre Caín que al igual que Remus, en cuanto Raze cayó lo hizo él también. El animago no se animó a llamar a Patrick, pues la sangre que manaba del torso de Caín no pareció detenerse y lo que hizo preguntarse a todos ¿cómo es que Caín FitzGerald seguía vivo?

Connor llegó al lugar y si bien tenía varios efectos y cortillas rotas aun podía caminar y conservar la varita en su mano.

–Han llegado algunos pelirrojo y el Ministro... ganamos, pero...

Patrick no volteó a ver al jefe de guardias, pues su trabajo no permitió distracciones, aunado a que no tenía buenas noticias acerca de Conrad.

Connor notó sobre quién trabajaba Patrick y casi gritó de asombro:

–¡No puede ser! ¡Es Caín, pero si yo vi como lo había matado Raze!

–Supongo que Raze también creyó lo mismo. –explicó Patricio.

Connor se inclinó y tocó la frente del licántropo caído.

–No cabe duda de que eres un líder. –Luego se giró a ver a Patrick– ¿Lo salvarás verdad?

–Hare lo que pueda.

Sirius siguió la conversación, cuando sintió que el peso de su amigo le era retirado y vio a Lucius abrazando a este.

–Busca ayuda Black...

Sirius asintió y se levantó buscando con la vista a quien le pudiera auxiliar. Narcissa vio a su primo y fue hasta él, pero su atención se fijó en Remus que yacía en el suelo. La mujer jaló a su primo:

–Busca a Kingsley viniendo conmigo, pero lo mandé a buscar al medimago .

-Si.

–Y Sirius, con algunos que sepamos de hechizos de sanación no será suficiente.

–Llamaré a los medimago y medibrujas de Laboratorios Black.

Narcissa ya no respondió, pues ya se inclinó sobre Remus recitando hechizos tras hechizos diagnósticos sobre el licántropo de cabello rubio trigo.

000

Severus puso atención y notó que ya no había ruido arriba, dejó a Josué en el suelo y le dijo:

–No te muevas de aquí.

-Educación física...

–Ellas –Señaló a la mujer ya su hija recién nacida– deben ser protegidas ¿entiendes? –El niño lloraba, pero movió la cabecita afirmativamente– Eres un niño valiente.

Felicitó el pelinegro y subió empuñando su varita. Abrió la puerta al paciente a la que tuvo que quitarle mentalmente los hechizos de protección y salió lentamente.

Miró los cadáveres de varios agresores, más uno que yacía en una de las camillas envuelto con una túnica y uno más que parecía haber sido tratado por el sanador Macgrey.

Severus salió al pasillo y luego se aventuró a la puerta, la cual fue abierta con violencia y ante ese hecho el pocionista atacó...

–¡ Petrificus Totalus ! –Severus miró al hombre que estaba inmóvil y suspiró aliviado:

compromisoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora