Bangchan apretó el cuello de Mi-suk con mucha fuerza. Sacó el cuchillo bruscamente y la volvió a apuñalar. Empujó el cuchillo hacia arriba para cortar la parte superior.
Mi-suk escupió sangre en la cara de Hyunjin. En esa situación, la sangre brotaba de su espalda, volvía a enterrar el cuchillo una y otra vez.
Bangchan tomó el cabello de Mi-suk y puso el cuchillo en su cuello. Fue cortando su garganta lentamente. Ella aun soltaba quejidos cuando le cortaba la garganta.
Por alguna razón Hyunjin no podía moverse, se quedó paralizado, sintiendo la sangre pasar por sus piernas.
Bangchan lanzó el cuchillo con rabia a la pared. Se levantó y tomó de nuevo de los cabellos a
Mi-suk y la arrastró fuera de la cama. La sangre se quedaba en la cama blanca. Un terrible sentimiento de culpa y tristeza cuando miró que ella ya no se movía.
Bangchan abrió la puerta mientras todavía la jalaba, había un caminito de sangre de la cama hasta la puerta.
Cuando salió, la habitación se sentía demasiado pesada. Hyunjin sólo temblaba, su respiración era muy agitada. Miraba vagamente toda la habitación. De repente sus lágrimas brotaron. Se levantó de la cama y se dirigió al espejo. Miró así mismo, quería gritar, pero su voz no salía.
Sus ojos estaban hinchados y su cara estaba húmeda por las lágrimas. Una ira sorda hizo que alzara su mano, cerró su puño y soltó un golpe en el espejo.
Golpeó el espejo repetidas veces hasta sangrar sus nudillos. Paró y caminó arrastrándose a una esquina y se sentó.
Juntó sus rodillas y apoyó su cabeza en ellas. Estaba empapado de sangre. Por el coraje mordió su labio inferior con mucha fuerza.
Escuchó abrirse la puerta, reaccionó y se paró rápido. Empujó a Bangchan contra la puerta.
—¡¡MALDITO, POR QUÉ HACERLE ESO A UNA MUJER!! ¡¡DÍMELO!! —gritó Hyunjin desesperadamente mientras lo azotaba contra la puerta—.
Bangchan no reaccionaba, tomó de las muñecas a Hyunjin. Él bajó la cabeza y comenzó a llorar.
Sus piernas se debilitaron y se cayó sobre sus rodillas al suelo. Bangchan hizo lo mismo y abrazó a Hyunjin.
Su llanto era incontrolable. Acarició su cabello y le dio palmadas para consolarlo.
Poco a poco el llanto que era como consolar a un niño pequeño después de hacerlo llorar, se calmaba con cada palmada y acaricia cálida que Bangchan hacía.
Sus corazones se sentían cerca y latían rápidamente. Tanta tranquilidad de repente y ambos cerraron sus ojos y durmieron. Al día siguiente, el gran día. El día en que se llevaría a cabo el concierto. Bangchan se despertó primero, encontró a Hyunjin aferrado a su cuerpo. Era imposible levantarse sin despertarlo.
En un movimiento brusco despertó a Hyunjin. Él estaba somnoliento. Lo levantó del piso y lo cargó.
—¿A dónde vamos...? —preguntó somnoliento —.
—Vamos a que te duches. —Contestó Bangchan—.
Abrió la puerta y se dirigió al baño. Entró y dejó a Hyunjin solo en el baño. Bangchan salió de ahí y cerró con llave. Hyunjin se desabotonó la camisa, la dobló y la dejó en el lavabo.
Se miró al espejo, tenía los ojos hinchados, su cara tenía moretones. Giró la manija de la regadera y se paró sobre ella. Dejó caer el agua en su cabello. Recordó lo sucedido de ayer, no podía creer que él llegaría tan lejos solo por unas acosadoras. O quizá, por su carne.
