«El espejo enfrente de la cama, lo veía todo.»
Le recordaba al lugar donde practicaban para trainees y ahí conoció a Felix, el mismo espejo de ahí era testigo de los maltratos que la agencia les daba. Nadie hacía nada para ayudarlos, se sentía como en aquellos tiempos. Pero aún sintiendo coraje porque Felix pudo haber ayudado a Hyunjin a no ser secuestrado por el perro loco.
Pero, ¿por qué Felix desaparecía...?
«Si antes me perseguía como un perro.»
Volviendo con hyunjin, el despertó acostado en el regazo de Bangchan.
—¿Despertaste hyunjin? —¡ugh! bastardo...Perro loco.
—¿quieres desayunar?
—Uh, sí...
—Hyunjin, ¿no te duele tus piernas?—¡Como no me van a doler si me diste 4 golpes en cada una!—dijo jalándole el pelo y sacudiendolo—. ¡¡INCLUSO ME DISTE UNO EN LA ESPALDA Y TE ATREVES A PREGUNTAR QUE SI NO ME DUELE!!
—¡Hyunjin, suéltame, duele!—¡¡NO, TE VOY A SACAR EL CUERO CABELLUDO Y TE VOY A DEJAR COMO EL PITTBULL!!
—¡¡BASTA!!—agarra las manos de hyunjin con fuerza y se acerca a darle un beso para que se tranquilice—.
—Agh, bien, ahora que estás más tranquilo traeré el desayuno—agarra la cabeza de hyunjin para levantarse—.
—Ahora vuelvo—¡¡ugh bastardo, bastardo, bastardo!!—limpiándose la boca—.
—¿Qué demonios fue eso? ¿Por qué me siento así de nuevo?—se preguntó a sí mismo—.
Cuando llegó bangchan dejó la comida en el extremo de la cama para ayudar a hyunjin a sentarse. Miró las piernas de él y sintió lástima. Se prometió a si mismo que no volverá a lastimar de esa forma a hyunjin, solo heridas superficiales. Los dos empezaron a comer incómodamente.
—Cuéntame, hyunjin, ¿cómo eres en tu universidad?—uhh bien, soy un Sunbae
tengo un historial académico bastante bueno.
—Es tu turno. Pregúntame lo que quieras—¿Lo que sea?—si, adelante.
—¿Por qué...me secuestraste?
Una vez más el cuarto se quedó en un silencio profundo.
—Sabía que ibas a preguntar eso, aghh, bien. Así elimino a mis sasaeng pongo una información interesante de mi para llamar su atención, la compran y los rastreo. Después las busco, las mato y las cuelgo en el río Han. Por eso no tengo muchas sasaengs y es por eso que estás aquí. Eres el segundo sasaeng masculino que tengo. Es raro porque el sasaeng masculino sorpresivamente se parece a tí.
Hyunjin apretó los dientes del enojo y aguantó las ganas de golpearlo. Ambos terminaron de comer y bangchan le dijo que lo ducharía.
—Agárrate de mí hyunjin.
A hyunjin se le ocurrió intentar escapar cuando el abriera la puerta pero no funcionó porque no tenía fuerza en sus piernas y terminó cayendo al piso. Al final Bangchan lo llevo cargando como una princesa. Llegando al baño vió que había una regadera y una bañera.
Bangchan lo metió y llenó la bañera de agua mientras hyunjin veía como bangchan se desnudaba ya que el también se iba a bañar pero en la regadera. Vio discretamente que tenía su cuerpo en forma, él sintió envidia ya que el tenía complexión delgada pero no en forma.
Una vez más quiso mirar el cuerpo de Bangchan, lo miró por tanto tiempo que el se dio cuenta y solo se rió. Muerto de la vergüenza se puso de espaldas para que no lo viera sonrojado y también para no verlo. Lo sorprendió porque le echó shampoo en su cabello y empezó a tallar su cabeza con delicadeza e incluso talló su cuerpo con una esponja.
Terminando de bañarlo le secó su cabello con una toalla y lo dejó sentado en una silla para que lo esperara porque el no se había terminado de bañar. En la manija de la regadera vio a otra persona de cabello negro detrás de Bangchan. Ambos mirándose entre si con una mirada de miedo ya que los dos vieron lo mismo.
—Desde que llegaste estas cosas están sucediendo muy a menudo. Es...raro porque se parece a tí, pero en pelo negro.
hyunjin ya sabía de qué se trataba. Pero no iba a decir nada.
Bangchan terminando de ducharse y de vestirse llevó a hyunjin a dentro del cuarto de nuevo.
—Hyunjin, voy salir de nuevo, tengo confianza de que no intentarás hacer algo raro porque no puedes caminar. Te dejo comida y quizás te traiga un regalo de regreso—sonriendo—.
—Está bien—mirada de desinterés—.
Bangchan se acercó a él para darle un beso de despedida.
—¡¡BASTARDO QUE NO SE TE HAGA COSTUMBRE BESARME!!
Bangchan salió de la habitación riendo por la reacción de hyunjin ya que a pesar de que le dijo eso se sonrojó.
Cuando salió de el lugar se cubrió con gorra, mascarilla y lentes para no ser reconocido, se dirigió hacia una camioneta donde su manager lo estaba esperando para llevarlo a una entrevista.
Por otro lado hyunjin estaba satisfecho porque estaba duchado así que se durmió. Mientras estaba durmiendo sintió como le tocaban la cabeza, se despertó creyendo que era bangchan, pero no fue así.
Era otro hyunjin peli negro desnudo, estaba acostado en el regazo del tipo. Se asustó e Intentó escapar pero se lastimó, miró sus piernas y volteó a ver de nuevo.
Ya no estaba. Miró toda la habitación pero no había nada.
—¡¡HASTA CUÁNDO ME VAS A DEJAR EN PAZ!! —dijo casi llorando—.
Dicho eso la habitación se quedó callada. Miró el espejo enfrente de la cama y vio que el tipo estaba a su lado. Se quedó quieto con miedo y giró lentamente para verlo. No estaba, aún así en el espejo se podía ver qué el estaba al lado. volteando una vez más a verlo. Ahí estaba de cerca, mirándolo fijamente a los ojos. Se quedó sin aliento y sin habla. Le sonrió amablemente y después el tipo le puso su mano en la cara de hyunjin.
Después de eso, hyunjin despertó agitado, se trataba de una pesadilla demasiado realista.
O quizá fue real.
