Los pasos acelerados se escuchaban por los pasillos de la base mientras lágrimas débiles caían de los ojos de la chica.
Sentía como su corazón parecía romper las fibras lentamente, su respiración era agitada y su labio ardía, sin mencionar el dolor en su ojo derecho completamente morado y con la ceja rajada.
La chica conforme se acercaba al cuartel central escuchaba las risas de sus mayores, fue cuando la chica entró que deshizo la risa de todos, ver aquella chica con su ropa desgarrada, heridas en sus brazos y su rostro totalmente golpeado los hicieron levantarse rápido de las sillas.
—Qué demonios te pasó.—Soap con movimientos rápidos tomó el rostro de la chica mirando cómo está no hacía más que llorar.—Ghost, Gaz llama a Price, dile acerca lo sucedido, König llévate a la chica.—Dijo queriéndose separar pero ella negó.
—König no...
El chico de la máscara que la iba a tomar con nerviosismo sintió como aquella chica que tanto le gustaba susurraba aquello con dolor haciéndolo detenerse ganándose una mirada de la chica.
—Yo...no puedo seguir cerca tuyo.—Susurró ella mirando como los ojos del chico se apagaba.—Perdóname.
Al cabo de los minutos la chica estaba sentada en una de las sillas siendo curada por una enfermera, con Soap a su lado y König en una silla distanciando mirando un punto fijo, hace meses que había ingresado a la base, la primera persona en recibirlo fue la chica, casi de inmediato se demostró interés alguno hasta que él supo que le gustaba, pero verla en aquel estado diciéndole que se alejará me estaba rompiendo el corazón.
—Soap.—Llamó Price entrando al cuartel viendo a la chica con su mirada baja.—Ven.
Los cuatro chicos se habían distanciado de la chica estando ahora más cerca de König, esa era la idea de Price, que él supiera que había pasado.
—El grupo de cadetes de Kendall fueron culpables de lo sucedido, una chica, llamada Isabella fue la que le hizo eso.—Susurró.—Por König.
El nombre de Isabella hizo que König se levantará furioso de la silla en la que estaba, bajo la mirada de Soap que lo detuvo.
—No hagas nada estupido soldado.—le replicó.
—Me importa una mierda si son cadetes, estoy harto, bien les dije que no quería entrenar a ese grupo, esa chica Isabella me tiene harto, no tiene porque hacer eso por una idiotez.
La chica que estaba escuchando hablar a la enfermera se giró mirando como König me gritaba a Soap, de inmediato se sintió culpable, no era culpa de König, sabía que era el tema ya que aquella chica la había golpeado de una manera horrible con aquel tubo de metal, pero sabía que él no estaba interesado en lo más mínimo.
—König vamos.—Llamó la chica la atención de él antes de salir de aquel sitio, en silencio König suspiro y la siguió haciendo que Soap rodará los ojos.
König yacía sentado en aquella cama frente la chica que estaba acostada boca abajo mirándolo con dolor en su rostro, ella lucía totalmente cansada.
—Me prohibió hablarte, mirarte o tan siquiera verte, pensé que me llamarían para la nueva misión que se aproxima pero cuando llegué ella tenía un tubo de metal en sus manos, me golpeó y no solo ella, uno de los chicos me pasaba el cuchillo en las manos.—susurró con dolor.—Soy alguien débil para pertenecer a la milicia.
König negó de inmediato sin moverse de su sitio.—Eres inteligente, buena con las armas, ser débil internamente no te hace mala persona para un sitio como este, preciosa.
Escuchar aquel apodo hizo que ella cerrará sus ojos sintiendo su corazón saltar, nunca le había dicho a nadie lo cuánto le gustaba aquel chico, él como la trataba, le hablaba o tan siquiera la miraba.
—König.—llamó la chica.
—Dime?
—Te puedo decir algo?
—Claro preciosa.
La chica cerró sus ojos para no abrirlos más sintiendo como aquellas palabras que siempre había querido decir se atravesaban en su garganta.
—Te amo.
Escuchar decir aquello de parte de la chica que él jamás pensó escuchar lo hizo sentir un revoloteo intenso en el estómago, no sabía lo que era amar, nunca lo había hecho con nadie, nunca le había atraído tanto alguien así como ella.
—Nunca quise enamorarme.—La miró, ella lo miraba con cierto brillo en los ojos.—Pero cuando te conocí me di por vencido, necesitaba mi dosis de ti cada día, verte hoy así me dio mucho coraje, es por mi culpa.
—No te lo niego, pero no es tu culpa que le gustes a la chica, según me dijo fue rechazada por ti.—Dijo casi quedándose dormida, König asintió y se levantó para caminar hasta la cama sentándose en el borde acariciando el cabello de la chica.
—Sabes, la rechacé por ti, me gustas mucho enana, más de lo que tú podrías creer, y también puedo decir que te amo.—Dijo besando el cabello de la chica dormida.
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One shots| Call of Duty
FanfictionMini historias de distintos tipos de personajes del video juego Call Of Duty.