¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La oficina estaba en completo silencio esperando escuchar propuestas, los miembros del 141 se miraban entre sí, aquella misión era una jodida mierda y sin duda podían morir.
—Quiero ir.—hablaste en forma de apoyo.—no dejaré que mueran niños por unos narcotraficantes.
Ghost que estaba del otro lado de la mesa donde yacía los planos negó con su cabeza dándote una miraba amenazante que recibiste pero ignoraste, ibas a mirar a Price en forma de una buena respuesta pero fue igual que la de Ghost, ninguno estaba de acuerdo.
—___ tiene razón, deberías evitar eso Capitán.—habló Soap dándote un apoyo el cual respondiste con una sonrisa.
Al cabo de los minutos la oficina quedó vacía de no ser por el trío, mirabas a tus dos chicos con una ceja elevada.
—Ahora qué? No pueden evitar que vaya a misiones por miedo chicos, los adoro y se que son preocupaciones, pero quiero ir, me duele ver que hayan niños de por medio.—jadeaste con dolor de que ellos no te dejaran hacer lo que realmente querías.—Quiero cuidar de los niños.
Price golpeó con furia la mesa sacándote de tus pensamientos, saltaste con miedo alejándote, Ghost lo miraba de medio lado con un asentimiento de cabeza.
—La respuesta es clara, es un no.—respondió.—Aprende que es por tu bien cariño.
Tragaste grueso antes de suspirar pesadamente dispuesta a irte pero la mano de uno de los chicos te detuvo, los brazos de Price te envolvieron con fuerza haciéndote cerrar los ojos, estiraste tu mano en busca de la de Ghost en busca de su calor, tenían ya cinco meses de tener una relación poliamorosa, querías decirle a todos que estabas felizmente con aquellos chicos y no por egoísmo, sino por amor, pero ambos los prohibieron, decían que si algo pasaba quedarían perjudicados ambos.
—Qué se supone que haré contigo?—Susurró Price en tu cabello.—Por más que te niegue las cosas igualmente las haces, sé que quieres cuidar de aquellos niños, pero es peligroso mi amor.
—Quédate.—pidió en un jadeo Ghost mirándote detrás de Price.—Si algo te pasa quedaremos locos.
Asentiste separándote de Price para soltar la mano de Ghost e irte a sentar encima de la mesa con la mirada de ambos puesta en ti.
—Y si lo hacemos oficial?—pediste nuevamente, viste como la cara de Price se arrugó y Ghost negó.—Enserio esto me está matando, creen que es bonito ver que cuando salimos las chicas los miran con ganas y yo no pueda hacer nada? Somos una relación chicos, se los pido.
Ghost suspiró con pesadez, cerraste la boca antes de volver a decir algo presionando con fuerza tus labios bajando la cabeza con miedo, sabías que él nunca te haría nada, ni mucho menos Price, pero tenías miedo de aquella dura mirada que te daba.
