Capítulo 10

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NARRA OLIVIA

Con Pedri se nos hacía imposible separarnos el uno del otro, seguían pasando las horas dentro de la discoteca pero para nosotros nada de lo que estuviera alrededor nuestro tenía importancia en este momento.

- Necesito ir a tomar aire Pepi -le dije soltandome poco a poco de su agarre- ¿me acompañas? -pregunté y él asintió.

Empezamos a caminar entre la gente, el lugar estaba repleto y apenas te podías mover ahí dentro, en el momento que logramos alejarnos de la multitud y llegamos casi a la puerta de salida, nos encontramos con Solci y Gavi, que, apenas se dieron cuenta que estábamos en frente a ellos, suspiraron aliviados.

- Pero tío, ¿dónde se habían metido? -preguntó Gavi- hace rato que los estamos buscando

- Amiga te llamé mil veces -me dice Solci con tono de preocupación- pensé que te había pasado algo

-Estábamos por ahí bailando -respondió Pedri- no estábamos con los móviles

- Perdón amiga, te juro que nunca me di cuenta de que me habías llamado -le digo a Solci mientras que veía a Pedri hablando con algo de Gavi.

- Tranqui Oli, pensé que estabas sola, no con Pedri -me responde ya más tranquila- para -me mira- ¿estuviste todas estas horas bailando con Pedri a solas? -preguntó emocionada.

- Bueno... -la miro- si haber estado besándonos toda la noche se considera bailar podría decirse que sí -contesté sonriendo y en un tono de voz bajo ya que Pedri y Gavi nos podían escuchar a lo lejos.

- ¡AMIGA ME MUERO! -me abraza y empezamos a saltar emocionadas- ESTOY MUY FELIZ, POR FIN DIERON EL PRIMER PASO -me dice aún exaltada.

- Gracias amiga -le digo sonriendo- igual hablemos bajito porque no quiero que nos escuchen ellos -ella asiente y empieza a hacerme miles de preguntas de cómo habíamos llegado a eso.

Nos quedamos bailando un rato más y pude ver a Sol y a Gavi tomando bastante alcohol, digamos que no estaban muy concientes a esta altura de la noche.

Estábamos volviendo a casa en el auto de Pedri y claramente tanto Solci como Gavi se habían quedado totalmente dormidos en la parte trasera del coche. Pedri manejaba concentrado y con su mano apoyada en mi pierna, cosa que me hacía poner muy nerviosa pero me encantaba que hiciera eso.

Habíamos llegado a la casa de Gavi para dejarlo pero estaba siendo una tarea muy difícil despertarlo para que pueda bajar del coche.

-Gavi -le dice Pedri sacudiendolo- Gavi despertate

- ¿Dónde estoy? -responde Gavi totalmente dormido y sin conocimiento de donde estaba.

- En la puerta de tu casa Gavira -le dice Pedri- anda baja antes de que tu madre te vea en este estado -Gavi había tomado bastante esta noche y se le notaba en su aspecto.

- Gracias por traerme -dijo como pudo y bajó del auto con rapidez

- Siguiente parada, casa de las uruguayas -dice Pedri sonriendo.

- Sol ni nos escucha, está totalmente dormida -la miro y efectivamente estaba plácidamente dormida en el asiento de atrás.

- Se ve que tomaron demasiado

- Sol no es de tomar mucho pero cuando toma... -pongo una cara de preocupación- igual por suerte no está despierta sino estaría mareada y hasta con ganas de vomitar te diría -lo miro atenta a Pedri y veo su perfil y su mirada totalmente concentrada en el tránsito de mientras que se ríe por lo que acababa de decir.

- Sos hermosa Olivia -suelta de repente y mis mejillas se encienden automáticamente.

- Mira quién habla, el más guapo de toda España -le digo mientras veo que está estacionando en la puerta de mi casa.

- ¿Solo de España? -se saca el cinturón de seguridad y se queda sentado cara a cara.

- Bueno, del continente puede ser -le digo para molestarlo- pero no hay duda de que los uruguayos uff, te pasan el trapo Pepi -lo molesto aún más y me aguanto la risa porque la cara que puso cuando dije eso fue un poema.

- ¿Y porque esta noche no estuviste con los miles de uruguayos que había en la discoteca y estuviste conmigo? -se acerca a mi quedando a centímetros de mis labios y sonríe al terminar de hablar- no me digas que te dejé sin palabras -me dice jodiendome, claramente siguiendo el juego que yo había empezado recién.

No lo dude y enseguida me lancé a sus labios, eran adictivos.

Me atrajo hacia él y terminé sentada en su regazo, no estábamos para nada cómodos en ese asiento de auto pero tampoco podíamos separarnos porque teníamos la necesidad de seguir lo que habíamos empezado.

Pedri comienza a pasar sus manos por debajo de mi top y acaricia mi espalda de manera lenta y sutil, comienza a bajar sus manos y recorre toda mi espalda hasta posarlas en mi cintura.

- Sos hermosa -frena el beso para mirarme- sos la persona más hermosa que vi en mi vida Oli -sonrió y vuelvo a besarlo como si no hubiera un mañana.

De repente sentimos una voz que venía de la parte trasera del auto y eso hace que enseguida nos separemos y volvamos a nuestros lugares, estábamos tan concentrados en lo nuestro que nos olvidamos de un pequeño detalle.

- Oli -llama mi amiga aún con los ojos cerrados- ¿dónde estamos? -okay creo que está demasiado borracha como para habernos visto a Pedri y a mi.

- Solci tranquila, estamos en la puerta de casa, Pedri nos alcanzó -le digo mientras veo que se empieza a incorporar en el asiento- vení vamos a bajar asi subimos a casa y te preparo un café bien fuerte -asiente y comienza lentamente a bajar del coche.

- No tardes -me dice cerrando la puerta del auto del chico que en ese momento estaba con su mirada puesta en mi, sonriendo.

- ¿Nos vemos mañana Pepi? - le pregunto abrazandolo.

- Claro princesa -me respondió dándome un pequeño beso en los labios.

- ¿Princesa? -le pregunto curiosa mientras sonrío.

- ¿No te gusta? -pone un puchero que me hace reír automáticamente.

- Me encanta -le doy otro besito- mucho

- Bueno entonces mañana te paso a buscar para pasar todo el domingo juntos princesa

- Me encanta la idea Pepi -le digo- cuando me despierte tengo que hacer algunas cosas de la universidad pero supongo que después de almorzar ya voy a haber terminado.

- Dale, mandame mensaje cuando termines y te paso a buscar

- Okey, entonces nos vemos mañana -miro para afuera y veo que Sol ya había subido a el apartamento- voy a salvar a mi amiga de que no vomite toda la casa -río y el se acerca para darme un beso.

- Te quiero Oli -me dice y yo lo abrazo, este hombre algun dia de estos va a hacer que me desmaye de amor.

- Te quiero más Pepi, nos vemos mañana.

Bajo del auto y antes de entrar al apartamento lo saludo con la mano y lo veo irse.

Pedri Gonzalez me tiene totalmente enamorada.

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Perdón que estoy bastante inactiva, es que estoy con miles de parciales de la facultad y no tengo casi nada de tiempo para escribir :(

Pero acá les dejo un capítulo que me gustó mucho escribir

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Los quierooo 

Mi casualidad más bonita - Pedri GonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora