Mi casualidad más bonita - Pedri González

Capítulo 3 (segunda temporada)

NARRA PEDRI

Estaba hermosa.

La sonrisa con la que me contestó la llamada hizo que logre extrañarla un poquitito menos de lo que la extraño.

- Hola mi amor -dice sonriendo- qué guapo estás.

- Vos estás guapa, muy guapa -veo como se sonroja de a poco, es muy hermosa- ¿qué andas haciendo?.

- Estaba ordenando todo lo que me traje de allá, no sabes el rato que me está llevando esto -ríe y me muestra su cuarto, con mucha ropa tirada en la cama- igual por suerte solo me falta guardar esta ropa de acá, lo demás está todo en su lugar.

- Es que tenías muchísimas cosas amor, y otras varias que te dejaste acá -digo mirando su parte del placar, estaba acostado en nuestro cuarto y tenía visión directa a todas las cosas que había dejado Oli acá para cuando vuelva.

- Si no dejaba todo eso ahí no se como lo iba a traer a casa amor, ni siquiera se como hiciste para poder cerrar la valija -ríe y veo como apoya su celular en una mesa, como para ir doblando la ropa y hablar conmigo a la vez.

- ¿Cómo estuvo el viaje? -pregunté- ¿muy cansador?

- Por suerte no se me hizo taan largo como me lo acordaba -comentó- igual creo que es porque de las 13 horas de vuelo dormi 10 -no aguanté la risa y solté una carcajada- te juro amor, me dormí todo, lo que sí me levanté y no sabía ni dónde estaba.

- Mejor amor, esos viajes son larguísimos, lo mejor que pudiste hacer fue dormir.

- Aparte los asientos eran muy cómodos, se pasaron con eso de cambiar los pasajes -dice mirándome con una sonrisa que iba a tardar en borrarse de mi mente.

- Queríamos que viajaran cómodas -dije- lo logramos ¿no?.

- Lo súper lograron -afirma- no sabes, toda mi familia estuvo preguntando por vos, de cuando te iban a conocer en persona y todo eso. Ni te conocen y ya te adoran amor -dice feliz.

- Muero por conocerlos a todos -dije entusiasmado- espero poder ir pronto para ahí.

- Venite rápido porque ya te estoy extrañando un montón -me dijo haciendo puchero.

- No me pongas esa carita porque agarro el primero vuelo a Montevideo y me voy ya -se le iluminó la cara al escucharme decir eso.

- Sii venite -volvió a hacerme el puchero- lugar tengo para que te quedes -dijo enfocando la cámara a su cama y guiñandome un ojo.

- Te prometo que apenas me liberen unos días acá voy amor, hace un día que te fuiste y ya te extraño un montón -dije sincerandome.

- Es que es raro estar tan lejos sabiendo que hasta ayer no nos separabamos más que algunos días que vos tenías que ir a jugar a otro lado, va a ser muy raro acostumbrarme a no verte cuando me despierto, o cuando llego a casa. O esperarte en la puerta de la universidad cuando me decías que estabas en la vuelta y pasabas a buscarme -dijo con melancolía- me acostumbré tanto a vos amor y a compartir con vos todo que ahora hacer las cosas sola y lejos de vos me pone triste.

- Me pasa exactamente lo mismo Oli -digo, con un nudo en el estómago- creo que nos acostumbramos tanto y tan rápido a compartir todo que nos olvidamos que en algún momento íbamos a tener que sobrellevar esto a la distancia.

- Es verdad, pero -hace una pausa antes de continuar hablando- ¿vamos a poder con todo esto no? -pregunta con miedo en su voz.

- Claro que vamos a poder princesa -respondo con seguridad, para que ella la sienta a través de la pantalla- te amo más que a nadie en este mundo, no creas que te voy a dejar ir tan fácil -digo haciendo un chiste, como para romper ese miedo que estaba viendo en sus ojos.

- Sos un tonto -dice riendose- te amo

- Yo te amo más

- No, yo te amo más -contesta haciéndome burla y yo sigo riendo.

- Creo que eso es imposible, no hay nadie que te ame más que yo.

- Y no hay nadie que te ame más que yo Pepi -veo que silencia un segundo la videollamada y habla con alguien que supongo que acaba de entrar a su habitación.

- ¿Todo bien amor? -pregunto cuando vuelve a hablar conmigo.

- Sisi, era mamá, me acaba de decir que íbamos a ir a cenar a la casa de unos amigos de la familia para darme la bienvenida, y que me tenía que empezar a arreglar.

- Anda tranquila amor, mañana hablamos -dije despidiéndome de ella.

- Dale obvio -sonrie- te amo mi Pepi, nunca lo olvides, aunque estemos a 10000 kilómetros de distancia.

- Lo mismo digo amor -sonrio pero por dentro me dolió escuchar que estábamos tan lejos- disfruta, yo me voy a dormir que acá ya son las doce de la noche y mañana entreno temprano.

- Que duermas lindo -tiró un beso a la cámara y colgó la llamada.

Me acomodé en mi lado de la cama y vi su lado vació, como iba a costar acostumbrarme a dormir solo otra vez.

Que difíciles van a ser estos meses sin ella, sin nosotros juntos uno al lado del otro.

Pero supongo que será cuestión de acostumbrarnos

¿No?

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Volvíí

Se vienen dos capítulos por semanaaaa

Gracias por estar del otro lado <3