Un nuevo comienzo y olvidar cosas del pasado que están fuera de su control es lo que Julieta más necesita. Con su amor por la fotografía y el vestir bien, se encamina en la aventura de ser la niñera de dos pequeñas al otro lado del mundo, sin saber...
Para las que no vieron el aviso, el final del capítulo anterior cambió y por lo tanto la continuación de la historia igual.
Pueden continuar, Gracias por leer <3
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Perdición
El día de hoy es cálido, tan agradable como para pasar tiempo fuera de casa, al aire libre. La amplia mesa de la terraza está perfectamente ubicada para que la familia almuerce y a pesar de la insistencia de Matilda y Emily, sigo firme en mi pensamiento de que estar ahí junto a ellos no es prudente. Cuando su padre estaba soltero, claro que no había problema, sin embargo, ahora (a pesar de que ellas todavía no lo saben), sus padres están juntos de nuevo, y aunque Hanna es siempre amable y sonriente, es inevitable no notar lo mucho que me observa día a día. Siento como si su mayor pasatiempo al estar aquí en casa es estudiar mis movimientos, mi forma de moverme, de hablar y la forma que tengo de interactuar con Seb, que por cierto no es mucha últimamente. Es realmente incómodo.
Preparo la mesa de la cocina en donde comemos con Thor y los demás empleados, distraída en mis pensamientos, intentando buscar una manera para solucionar el problema con Mick y nuestra relación falsa, ya que sigue avanzando a pasos agigantados. Dentro de unos días conoceré a sus abuelos. Dios. Esto tiene que parar.
—... ¿cierto?
Levanto la vista de la mesa para enfocarla en Thor que me mira esperando una respuesta. Lo único que alcancé a escuchar fue la pregunta, por lo que asiento en afirmación, aún cuando no tengo idea de lo que dijo.
—¡Lo sabía! —exclama— ¡Sí sientes cosas por él!
Abro los ojos, desconcertada— ¿De qué hablas?
—¡De Seb! ¡Sí sientes algo por él y lo confirmaste!
—¡No! —me acerco a la alacena para buscar los vasos— No te estaba escuchando.
—Porque estabas distraída pensando en él —canturrea, revolviendo la olla con comida.
Niego con la cabeza, insistiendo que no es cierto, estaba pensando en Mick y no de manera romántica. Como cada día, Thor intenta hacerme confesar mis sentimientos y se niega a creerme cuando le digo que lo que pasó con Seb fue algo sin importancia. Bueno, a veces sí quisiera saber qué habría pasado si Seb no se hubiese comportado como un idiota y me hubiese creído, me gustaría saber qué sería de nosotros ahora, sin embargo, no se lo diría a Thor o me enviaría obligada a terapia.
