TRANCE'
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' - 📨—¿Que haces aquí?—pregunto algo anonadada por verle frente a mi puerta.
—¿Vine en un mal momento? Quise traerte esto y pasar la tarde contigo —su sonrisa no se apaga, más bien se hace aún más grande.
Recibo el ramo de rosas que me ha traído y siento que mis mejillas imitan el color de estas.
—¿Te gustan?
—Nunca me habían regalado rosas...—hago una mueca, tratando de sonreír como niña pequeña—, Gracias.
No os voy a mentir, este detalle hubiera significado mil años de vida para mí en cualquier otro momento. Pero ahora no tanto por motivos que ya todos conocemos.
¿Como se las arreglaba para que mi enojo saliera por la ventana? Es decir. Cuando tenía cerca a Zack me importaba mucho más estar con él que perder el tiempo discutiendo, simplemente era un pequeño defecto molesto que sentía desde siempre.
—¿Puedo pasar? —me demoro en asentir, pero termino accediendo y abriendo la puerta de mi departamento en cuestión de segundos.
Al entrar voy directo a la cocina mientras escucha a Zack cerrar la puerta, voy por un jarrón y agua para las flores y no demora en alcanzarme.
—¿Por qué les echas azúcar? —Inquirió.
—Mi abuela decía que así duraban más tiempo — giro sobre mis talones y acomodó el jarrón justo en el centro de la mesa pequeña isla empotrada que tenia la cocina.
—Gran método, a mi madre le encantará.
No me molesto en contestar.
Él parece momentáneamente confuso cuando se acerca.
Simplemente no sabía que decir o como reaccionar ante tantas emociones a la vez. Sentía que en cualquier momento uno de mis dos pensamientos saldría de la nada.
Yo digo que le besemos
Pues yo pido darle una bofetada.
—¿Como has estado?
—¿Yo? ¿Te refieres a estos tres días que no te has dado la dicha de contestarme los mensajes? Pues han estado geniales eh, podría decir que el insomnio me ha tenido de un humor para morir.
Ah vale, había salido el malo.
Zack había abierto un tanto los labios.
—Se que tuve que comunicarme contigo, no estuvo bien dejarte ese día así.
Miro sus ojos detalladamente, me convenzo de que no quiero iniciar una discusión, no quiero arruinar el detalle que ha tenido al traerme rosas y no quiero terminar de arruinar el día.
Pero abro la boca sabiendo perfectamente a lo que conllevará esto.
—Lo entiendo a la perfección, puedes ir a disfrutar de una fiesta mientras tienes el buzón de mensajes lleno por mí.
Su semblante cambia a medida que va escuchando mis palabras, parece molesto o más bien lo está.
—Sabes porqué estaba allí.
—¿En serio es por responsabilidades y compromisos con tu padre? Porque de ser así no te la hubieras tan bien en esa historia.
—Joanna, estás siendo injusta.
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Mensajes que nunca llegaron ✔️
Teen FictionSi recibieras en la madrugada un mensaje de Instagram de un desconocido pidiéndo ayuda para salir de una fiesta.. ¿Aceptarías? Joanna es una estudiante de universidad que vive en un pequeño edificio, una chica cualquiera viviendo una vida normal ¿N...