CAPÍTULO 25

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NARRADOR

Los lobos que habían ido al auxilio de los que se encontraban cautivos, fueron derrotados uno por uno por Jan. La fuerza hibrida del muchacho era algo superior, capaz de vencer a su propio creador.

Los lobos que yacían en el suelo fueron llevados dentro y encarcelados en una celda que anulaba todo poder otorgado por la diosa.

—Cura sus heridas, mujer— dijo uno de los demonios a la madre de Robin, mientras que otro traía un botiquín de primeros auxilios —Pobre de ti si no lo haces bien. Nuestra comida no debe morir— dicho eso se giró y salió junto al otro hombre.

La madre de Robin tomó las cosas y comenzó a curar las heridas de los lobos. Estas no eran tan mortales, solo habían recibido golpes que los habían dejado inconscientes y pronto despertarían.

Entre los lobos que sanó, estaba su hija Adel y unos cuantos más de la manada, se sorprendió y le dio prioridad a la herida de su hija. La mujer pensó qué tal vez a todos los que huyeron habían logrado atraparlos y su mayor temor era que Robin se encontrara entre los lobos que estaban aquí.

Después de curar las heridas los dejó descansar y la mujer siguió cuidando a su hija. Después de dos noches, la mayoría de lobos despertó y entre ellos Noah.
El chico dio un enorme grito y abrió los ojos. Eso hizo que los que ahí se encontraban voltearan a verlo —Robin— lo llamó, lo cual hizo que la madre del omega lo mirara.

Cuando Noah entendió en donde se encontraba dio un golpe a la pared. La madre de Robin se abrió paso y llegó hasta donde Noah se encontraba —¿Quién eres tú?— preguntó.

—Soy Noah— respondió la pregunta y miró a la mujer.

—Antes llamaste a mi hijo, ¿lo conoces?— ella se mantenía de pie, mirando intimidante al chico.

—¿Su hijo?— Noah se puso de pie —¿Robin es su hijo?

—¿Dónde está él?— la mujer lo miró directo a los ojos —¿Le hiciste algo? ¿Por qué un lobo de otra manada lo conocería en primer lugar?

—Lo conocí porque él salvó mi vida. Estaba malherido en el bosque, él me ayudó y me cuidó. Él ahora se encuentra en su manada, espero que esté bien.
—¿Madre?— Adel la llamó, así que la mujer rápidamente acudió a ella.

—Estoy aquí— dijo la mujer —¿Cómo te encuentras?— preguntó mirándola.

—Creo que bien— la muchacha trató de ponerse de pie. —¿Qué sucedió?

—Nos venció una sola persona— respondió Noah.

—¿Quién?— preguntó la chica.

—Jan— Noah respondió.

—¿Qué? Pero él no podría ir en contra de nosotros, Robin es su mejor amigo y Elyan su destinado, ¿Cómo es posible eso?

—Uno de los demonios lo obligó.

—Es extraño.

—Lo sé.

—No entiendo— habló la madre de Robin —Expliquen a detalle lo que sucede.

—Sucedieron muchas cosas, madre— Adel se puso de pie y caminó hasta reunirse con Noah —Este hombre— lo señaló —Es el Mate de Robin.

—¿Cómo? ¿Un foráneo?

—Tampoco lo entendí a la primera, pero la diosa es impredecible. Después de que ellos atacaron la manada descubrimos que Robin salía a escondidas de la manada. Él no quería el destino que le tenías preparado, así que había planeado huir y abandonar la manada. Robin nos salvó porque nos llevó a un lugar fuera del bosque, su amigo, Jan nos acogió y nos dejó dormir en su casa mientras todo se calmaba. Dos de los demonios volvieron a la manada, pero Robin los ayudó y en gratitud nos ayudaron a venir y vencer al clan que nos tiene cautivos, pero todo se complicó y ahora estamos aquí.

—Yo no lo sabía. Herí a mi hijo sin saberlo. Me convertí en mi padre— la mujer comenzó a inundar su rostro de tristeza. —Si tan solo él me lo hubiera dicho, yo habría negado a mi hijo a casarse con él, pero creía que eso era lo que quería.

—Todos lo creíamos, pero si lo decía temía por lastimarte. Él creía que era lo que tú querías.

—¿Es así?— la mujer miró al suelo —Debo pedirle una disculpa cuando vuelva a verlo.

—Tengo una pregunta para usted— Noah miró a la madre de Robin —¿Qué es lo que sucede en este lugar?

—Sencillamente nosotros somos la fuente de alimento de esos demonios.

—¿Todos los lobos se encuentran en el mismo lugar?

—No— la mujer negó con la cabeza —Los clasifican por rangos. Alfas en una celda, omegas en otra y betas en la última.

—¿Nosotros salimos y servimos de alimento?

—Solo si te seleccionan, la principal fuente de alimento son los omegas.

—Ya veo— susurró decaído —Entonces tengo que hacer lo posible para poder ver a mi hermana.

—¿Ella está aquí?

—Si— Noah asintió —Mi manada también fue atacada por estos demonios. Se llevaron a mi hermana y a otros más.

—Que lástima. Pero tengo que aclárate que no todos mis omegas corren con la misma suerte, algunos no logran sobrevivir al maltrato.

—Espero que mi hermana esté bien.

—También lo esperó, niño— la madre de Robin le tomó el hombro, para darle ánimos. —ahora cuéntame ¿Qué significa mi hijo para ti?

—Todo. Él es mi vida entera, no me atrevería a perderlo de nuevo.

—¿De nuevo?

—Si— Noah susurró —Antes de que su manada fuera destruida, él y yo solíamos convivir. Él fue quien me salvó de la muerte, así que en agradecimiento le enseñé algunas técnicas de combate. Después, cuando descubrí que él era mi Mate comenzamos a salir, pero me equivoqué y él se alejó. Obtener su perdón no fue fácil, así que ahora que lo tengo no volveré a cometer el mismo error.

—Ya veo— la mujer sonrió —Cuando salgamos de aquí, yo misma te entregaré a mi hijo para que sea tu complemento.

—¿Lo dice en serio?.

—Si— la mujer asintió —Mi hijo te ama y son Mates. Jamás me opondría a una unión tan sagrada como esa— se le escapó una risita —Créeme, yo rechacé el liderato como Alfa solo por mi Mate.

—Esa es una enorme muestra de amor.

—La es.

Alfa y Omega   [EDITADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora